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Como hemos mencionado en varias ocasiones, la respuesta sexual humana se vuelve más débil con el envejecimiento. Esto es especialmente cierto para la mayoría de los hombres, cuya capacidad sexual, motivación y rendimiento disminuyen notablemente después de los cincuenta años. Esta caída es menos obvia en las mujeres, cuyos niveles de rendimiento, para comenzar, nunca alcanzaron la de los hombres. Independientemente, ambos sexos pueden continuar teniendo relaciones sexuales satisfactorias si abandonan las expectativas poco realistas y los obsoletos guiones acerca de un comienzo, intermedio y final "adecuado". Para una mujer, la menopausia no tiene que representar el final de su actividad sexual. Al contrario, muchas mujeres se vuelven más activas, porque ya no tienen que preocuparse acerca de los embarazos y las formas de prevenirlos. Psicológicamente, las mujeres mayores experimentan un enflaquecimiento de las paredes vaginales y una reducción correspondiente del fluido vaginal. Estas condiciones pueden ser tratadas con medicamentos hormonales aplicados localmente. (Una sustitución más general de hormonas en mujeres y hombres sanos no es recomendable. Puede ser útil en algunos casos, pero contraindicado en otros.) En algunas mujeres, también puede ocurrir un debilitamiento de los músculos que rodean la vagina, haciéndola menos tensa. Esta vagina "suelta" puede tensarse ejercitando el musculo PC. Así, hombres mayores también pueden usar estos ejercicios para mejorar su propia respuesta sexual. Los hombres en la edad avanzada pueden tardar más para alcanzar una erección del pene, y puede no estar tan firme como antes. Por otro lado, la necesidad de alcanzar un orgasmo y eyacular usualmente se vuelve menos urgente, y en consecuencia, el hombre puede estar en capacidad de continuar con el coito por tiempos más largos que cuando era más joven. En cualquier caso, mientras la pareja se mantenga realmente íntima y continúe su comunicación, una respuesta sexual más débil no tiene porque impedir su relación erótica de ninguna forma, más bien sucede lo contrario.
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El Músculo Pubocóccigeo (Músculo PC)
El músculo, de estructura como una hamaca, se estira desde el hueso púbico en el frente hasta el coxis en la parte trasera.
(izquierda) En la mujeres rodea la vagina, (derecha) el músculo en los hombres
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