En Caracas como gobernante del país, no goza de la simpatía de la sociedad caraqueña debido a
que no había puntos de enlace social con ellos y dicha sociedad para ganarse la simpatía de Castro y
conociendo su afición al baile, lo comienzan a invitar a fiestas a las cuales va usualmente solo y esto es
utilizado para conseguir favores del presidente, ya que comienzan a llevarle parejas jóvenes para que lo
acompañaran y se acostaran con él. (13,20,24,37)
Esto fue incrementándose al punto de hacerse una característica acentuada de Castro. La
intensidad y frecuencia de la vida sexual disipada hicieron mella en él tanto física como
emocionalmente. Estaba cansado y nervioso lo que deterioraba su desempeño como gobernante (20) y
sin duda alguna tuvo también efecto sobre sus vías urinarias.
Castro es un individuo interesante e inteligente, sensible, sensual, egoísta y
extraordinariamente extrovertido, emotivo e inclusive violento. (13) Era dado a la jactancia y su deseo de
figurar era notable, características que fueron utilizadas por los aduladores de oficio que lo halagaban,
le hacían fiestas y bailes y lo dotaban de hembras para congraciarse y obtener beneficios, esto a la
postre lo perjudicarían notablemente tanto física como políticamente
Cipriano Castro y su gabinete gubernamental
Aun cuando se dice que eran mujeres escogidas para él, no deja de despertar dudas clínicas
debido a la frecuencia que en ésa época se tenía de enfermedades como la gonorrea, la sífilis y el
linfogranuloma venéreo. Pío Gil en `El Cabito' (8) describe de manera morbosa dicha característica de
Castro e inclusive el General López Contreras adepto a Castro refería que la `dedicación al amor libre'
causó grave impacto en la vida política del presidente. (20)
López Contreras, con su parquedad característica, refería que la licenciosa vida de Don Cipriano
le había venido afectando peligrosamente. Excesos con los licores, y sus andanzas sexuales con la
adquisición de alguna enfermedad venérea (alguna gonorrea mal curada) produjo repercusiones
urinarias ascendentes (uretra, próstata, vejiga y riñones) que infectaron las vías urinarias llegando al
riñón y produciendo daños renales importantes, `riñón supurado' .(8)
La sintomatología clínica infecciosa urinaria como fiebres, postración, sudoración, cefaleas, no
lo abandonarían nunca, por el resto de su vida. (25)
Como dato interesante y comparativo, nunca su compadre el general Juan Vicente Gómez,
participaría de aquellas `orgías castristas'.
Fue a partir del año 1904 cuando se convierte en un hombre disipado y trivial. Protagonizando
episodios vergonzosos en prostíbulos. Recibiendo a los ministros en billares o en el gabinete del
masajista, mientras los músicos tocaban componiéndole valses. La liviandad y el indecoroso
comportamiento, campean en el centro del poder, a la par que el presidente pierde su brillantez y sus
facultades físicas debido a sus famosas parrandas. (6,24) Venezuela era definida como el país donde `Los
hombres le abrían los brazos a Castro y las mujeres la abrían las piernas'. (24)
Ya en 1906 expuso como excusa para `una' de sus renuncias `fatiga y hastío'. Varias veces
suspende labores gubernamentales para irse a descansar a la Guaira en Macuto. (4)
El agravamiento de su cuadro clínico es debido al padecimiento de una fístula colónica‐vesical
que se diagnostica clínicamente en 1907 y endoscópicamente en 1908, por el doctor Juan Manuel Iturbe
Bescanza (1883‐1962) quien regresaba de sus estudios en Alemania e introdujo en Venezuela el
133