Algunos científicos piensan que la sífilis pudo ser introducida en Europa tras los contactos entre
vikingos y nativos canadienses, alrededor del año 1300, coincidiendo con el tiempo en el que la
enfermedad llegó a Hull (1),(18),(19).
Esta teoría pudiera verse reforzada por manifestaciones pictoricas a través grabados de
manuscritos medievales del siglo XIII, donde podemos ver monjes padeciendo lo que podria ser un
secundarismo sifilítico exantemático, siendo bendecidos por un obispo (ver abajo)
Monjes infectados de enfermedad exantemática (sífilis?) bendecidos por sacerdote. Ilustración de letra C capital del manuscrito inglés siglo XIII
`Omne Bonum' James le Palmer
Teoría Colombina
En ésta teoría, Cristóbal Colón se le responsabiliza como el factor de traslado de la sífilis del
continente americano a Europa, desde La Española (Haití) y con ello de la pandemia del siglo XV en
territorio europeo a la cual se le dieron las más disímiles explicaciones, entre otras responsabilizando a
los judíos, responsabilizando a la pobreza espiritual del vulgo y del clero por el pecado existente en el
mundo y tambien por las blasfemias que se proferían, no faltando las personas que creían en que dichas
pandemía era un preámbulo al momento del apocalipsis.
Se ha demostrado que existían esqueletos de nativos americanos precolombinos con lesiones
sifilíticas cuando arribó a América la tripulación del primer viaje de Colón el año de 1492 (21)
En los primeros años del siglo XVI se escribía en Europa que la causa por la cual el guayaco o
palo santo, importado de américa, curaba la sífilis era simplemente porque provenía del continente
responsable de su propagación, es decir, de `el remedio proviene de donde proviene la enfermedad'.
Diaz de Ysla y Hernandez de Oviedo entre otros, apoyaron la teoria colombina.
Escultura precolombina de un niño con probables manifestaciones luéticas
Sin embargo éste teoría tenía sus debilidades ya que como se sabe, Colón regresa de la
Española (Haití) el 4 de enero de 1493. Llega a Sevilla el 31 de marzo del mismo año, un domingo de
Ramos con 46 hombres de la tripulación y 10 indios. Se traslada a Barcelona para ver a los Reyes
Católicos y sale a su segundo viaje el 24 de septiembre de ése mismo año 1493, siendo acompañado por
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