a la medicina y por ende la Cirugia era poco considerada desde el punto de vista intelectual.
Lamentablemente para nosotros en Venezuela, además de ser una Capitania General con escasos
recursos, fuimos conquistados/colonizados por España que a la sazón era uno de los paises con mayor
atraso en cuanto a ideas innovativas y todavía con el lastre pesado de la inamovilidad de las ideas
catolicas de antaño, cerrada a las ideas filosoficas nuevas que ya circulaban por Europa y que tardarian
mas de doscientos cincuenta años en llegar a Venezuela (practicamente a comienzos del siglo XIX)
(Arturo Uslar Pietri. `La Inteligentsia venezolana')
Sería de España la mayor influencia médica que recibiamos y ésta era considerada en Europa
como una de las mas atrasadas comparativamente con el resto de la paises desarrollados (por ejemplo
Francia, Inglaterra, Italia, Alemania, Holanda) (R. Archila)
Juan María Montalvo Fiallos (1.832 1.889)
Los cirujanos del siglo XIX se dividian en latinistas y romancistas. Los cirujanos latinistas tenian
formacion universitaria, eran egresados de universidades, eran personas cultas y usualmente
pertenecian a la clase de los blancos. Los cirujanos romancistas en cambio no tenian titulo como tal,
eran usualmente personas no cultas y ademas empiricos, no estaban familiarizados con el latin, que
como sabemos, era el idioma cientifico y pertenecian a la clase de los pardos, y segun Archila eran
hombres que se dedicaban a la practica de la medicina dentro y fuera de los hospitales (R. Archila)
Con Francisco de Miranda, cuatro años de larga e insufrible agonía llegan a su fin el 14 de julio
de 1.816. Presentaba escorbuto, hiperplasia protática, desnutrición, anemia carencial, y parasitosis
intestinal asociado a ateroesclerosis cerebral e hipertensión arterial severa, que ocasionó una
hemorragia cerebral con las secuelas de parálisis, dificultad para respirar y cierta dificultad para
articular las palabras.
En esa ocasión el Padre dominico Alversanchez le ofreció los santos óleos y crisma y Francisco
de Miranda agonizante les dirigió la mirada con infinita bondad y convicción murmurándole: "capellan,
dejeme usted morir en paz' (Francisco de Miranda: un análisis humano y médico Julio 3, 2008. Especial para
FENIXnews (http://masones.wordpress.com/2008/07/03/francisco‐de‐miranda‐un‐analisis‐humano‐y‐medico/)
Miranda en la Carraca, España. Oleo de Arturo Michelena 1.896
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