`Falos' en cerámica en la Cultura Tumaco‐La Tolita
Representaban sus tamaños y sus variables anatómicas, e integraban su figura en diversos
aspectos de su vida diaria (mango de sartenes, para "poseerlos de Nuevo" cada vez que se cocinaba. Las
mujeres se vanagloriaban de la forma y tamaño del pene de su pareja, llenando de doble sentido, picardía
e incluso humor la cotidianidad que podia resultar aburrida. Muchos de ellos tenían realizada la
circuncisión, otros presentaban cortes que podian servir para desviar el semen y no dejar embarazadas a
su mujer (forma de planificación familiar). Se pintaban el pene de rojo para simbolizar inmortalidad, calor,
pasion, acción, iniciación y armonía con el otro sexo. El rojo es sinonimo de panacea, el principio u origen
de la vida. Los suelos fueron sembrados con esculturas fálicas. Se utilizaban dichas esculturas con fines
votivos (consagrados). Los hombres se masturbaban para fertilizar la tierra, al igual que ciertas culturas
africanas que abren hoyos en el suelo e introducen el pene erecto y se masturban hasta eyacular, con el
mismo fin (Texto y colección arqueológica Luz Miriam Toro).
Falo (Ceramica) Cultura Tumaco‐ La Tolita
En la Antigua Grecia donde se practicaba el patriarcado, las esposas eran tomadas poco en
cuenta, inclusive mucho antes de que la modalidad de la pederestía tomara píé en la sociedad griega, la
Ley de Solón (638‐559 a.C) establecía que el esposo debía tener tres relaciones al mes con su esposa si
esta era heredera.
Pitágorasafirmaba que el sexo "es mejor practicarlo en invierno antes que en verano, pero en
cualquier estación "es malo para la salud". Demóstenescomentaba que "en la sociedad griega,
tenemos heteras o hetairas (nombre que recibían en la antigua Grecia las cortesanas, es decir, una
forma de compañía sofisticada mezclada con prostitución) para nuestro placer, concubinas para
nuestras necesidades diarias y esposas para que nos den hijos legítimos y administren la casa".
La mujer del hogar descuidadas por el hombre, podían elegir entre la masturbación (o lisbos) o el
aburrimiento. Pero hacia fines del siglo II a.C, los griegos regresan hacia sus mujeres básicamente porque
necesitaban tener hijos.
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