Asklepios curaba mediante apariciones en sueños a los fieles que a él acudían en busca de
remedio, recomendándoles las prácticas y las medicinas necesarias para recuperar la salud. En sus
templos se han encontrado numerosos ex‐votos de enfermos que le debían la curación (ver arriba). En
Atenas se halló un texto en el que se agradece a las tres divinidades de la salud que librasen a la ciudad de
una epidemia. Se sabe asimismo que estas divinidades estaban íntimamente asociadas a la diosa de la
, los símbolos de cuyo culto son el cerdo y las espigas de trigo, halladas junto a efigies de
Euamerion
Figura en Terracota de Telesforo y Templo en su honor
Asklepios en regiones boscosas y salutiferas, cerca de
fuentes termales, uniendose en su culto ritos religiosos a las practicas medicas terapeuticas y curando
directamente a los enfermos por la casta sacerdotal.
" era el templo más importante y cada cuatro años se celebraban las
Corinto (en Sicione) y a todo el Peloponeso. Posteriormente pasa
al Atica y a las islas. En Cos se formaría la escuela de Medicina que recibió orientación cientifica del
célebre Hipocrates.
Otros santuarios importantes eran los de Pergamo en Misia y de Tricia en Tesalia. Luego vendrian
Asklepios curaban a los pacientes con medios diversos como intervenciones
`incubatio' que era un sueño revelador
y liberador dentro del recinto sagrado, en el que se aparecia el dios y aconsejaba el remedio o bien daba
Asclepios es representado como
Zeus, con expresión pensativa y bondadosa.
CONSEJOS ATRIBUIDOS A ESCULAPIO O ASCLEPIOS
¿Quieres ser médico, hijo mío? Aspiración es ésta de un alma generosa, de un espíritu ávido de ciencia. ¿Deseas que los hombres te tengan por un Dios
que alivia sus males y ahuyenta de ellos el espanto? Has pensado bien en lo que ha de ser tu vida?
Tendrás que renunciar a la vida privada; mientras la mayoría de los ciudadanos pueden, terminada su tarea, aislarse de los importunos, tu puerta
quedará siempre abierta a todos; a toda hora del día o de la noche vendrán a turbar tu descanso, tus placeres, tu meditación; ya no tendrás horas que
dedicar a la familia, a la amistad o al estudio; ya no te pertenecerás.
Los pobres, acostumbrados a padecer, no te llamarán sino en caso de urgencia; pero los ricos te tratarán como a esclavo encargado de remediar sus
excesos.
Habrás de mostrar interés por los detalles más vulgares de su existencia, decidir si han de comer ternera o cordero, si han de andar de tal o cual modo
cuando se pasean. No podrás ir al teatro, ausentarte de la ciudad, ni estar enfermo; tendrás que estar siempre listo para acudir tan pronto como te
llame tu amo.
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