Dr. Julio César Potenziani B.

Vejiga Hiperactiva


Reproduced here by permission of the author.

 

Contenidos

Capitulo I 1

Definiciones de importancia en el tema vejiga hiperactiva. 1

Capitulo II 9

Aspectos anatomicos y funcionales del sistema urinario inferior, durante la miccion. 9

Capitulo III 16

Fase de almacenamiento urinario vesical 16

Capitulo IV.. 19

Fisiologia del musculo liso vesical 19

Capitulo V.. 28

Caracteristicas microestructurales del musculo detrusor 28

Capitulo VI 35

Diagnostico de la hiperactividad vesical 35

Capitulo VII 75

Piso pelvico muscular 75

Capitulo VIII 85

Clasificacion general de la disfuncion neurogenica vesical 85

Capitulo IX.. 94

Patologias  neurológicas  con  afectación  de  la  funcionalidad  del musculo detrusor (disfunción del sistema urinario inferior) 94

Capitulo X.. 104

Trastornos urológicos en la población geriatrica. 104

Capitulo XI 111

Vejiga hiperactiva en la infancia. 111

Capitulo XII 120

Tratamiento de la vejiga hiperactiva. 120

REFERENCIAS.. 182

 

Capitulo I

Definiciones de importancia en el tema vejiga hiperactiva

 

 

La  terminologia  relacionada con las disfunciones neuromusculares del sistema urinario inferior, esta basada en reportes sobre estandarizacion de la terminologia del funcionamiento del sistema urinario inferior, recomendados por la Sociedad Internacional  de  Continencia (ICS),  realizados en diversas partes del  mundo,  año tras año. Ademas le hemos agregado, definiciones urodinamicas de gran utilidad para todo aquel  que  conduzca  clinicamente,  este  tipo de pacientes, asi como clasificaciones  de utilidad.

La  intencion  fundamental  de  estos  reportes es facilitar la comparacion de los resultados obtenidos por diferentes investigadores, a traves de los estudios urodinamicos, homologando los terminos, para hacerlos mas utilizables por medicos de todas las especialidades (Abrams y col. 1990, Griffiths y col. 1977).

 

 

¿Qué denominamos "función normal" del musculo detrusor?

Es  cuando  durante  la  fase  de  llenamiento  vesical,  el  contenido  de  la  vejiga aumenta  en  volumen,  sin  tener  un  aumento  significativo  en  la  presion  del  detrusor,  lo cual es  llamado acomodacion,  cuando  no se producen contracciones  involuntarias  del detrusor, inclusive al ser provocadas  y cuando en la fase de vaciamiento normal,  esta se  alcanza  por  una  contraccion  mantenida  y  voluntaria  del  musculo  detrusor,  la  cual podra ser suprimida de manera voluntaria.   Esta funcion "normal" del musculo detrusor se denomina "funcion estable".

 

 

¿Qué denominanos "función hiperactiva" del musculo detrusor?

Hablamos de funcion hiperactiva del musculo detrusor, cuando durante la fase de llenamiento,  hay  contracciones  involuntarias  del  musculo  detrusor,  las  cuales  pueden ser espontaneas o provocadas, y no pueden ser suprimidas por el paciente.

Dentro de los eventos que podemos realizar para la provocacion de contracciones

vesicales   estan,   el  llenamiento  vesical   rapido,   las   alteraciones   de  la   postura   del paciente, toser, caminar, saltar o marchar durante la prueba.

El  vaciamiento  puede  ser  debido  a  contracciones  involuntarias  del  detrusor,  o

tambien  a  contracciones  voluntarias,  que  luego  no  pueden  ser  suprimidas.     Esta anomalia de la funcion del detrusor, la desarrollaremos profundamente, en otro capitulo.

Los  terminos  o  sinonimos,  que  han  sido  usados  para  denominar  esta  condicion funcional   son:   detrusor   inestable,   hiperreflexia   del   detrusor,   vejiga   no   inhibida, inestabilidad  vesical,  discinergia  del  detrusor,  vejiga  hiperactiva,  vejiga  irritable,  vejiga espastica.

Resultara  muy  util,  aclarar  dos  terminos  que  han  traido  muchas  controversias  y confusion.   Se  trata  de  los  terminos  "detrusor  inestable"  e  "hiperreflexia  del  detrusor",


constituyendo ambos, lo que hoy en dia se denomina, vejiga hiperactiva.

 

 

¿"Qué denominamos "detrusor inestable"?

Es   aquella   condicion   del   musculo   detrusor,   en   la   que   podemos   demostrar objetivamente,  la  presencia  de  contracciones   del  musculo  detrusor,  provocadas  o espontaneas, de una magnitud de por lo menos 15 cm de agua de presion, ocasionando sintomas  como  urgencia,  frecuencia,  nocturia  e  incontinencia  de  urgencia,  que  se producen  durante  la  fase  de  llenamiento,  mientras  el  paciente,  intenta  inhibir  dichas contracciones no inhibidas del musculo detrusor.

Termino  descrito  por  Bates,  Turner-Warwick  y  Whiteside,  los  cuales  hicieron mencion en el año 1970 de la condicion patologica.

Desde entonces, se ha entendido y profundizado cada vez mas, la trascendencia de esta entidad nosologica en la practica clinica-urologica diaria.

Lo vemos asociado a una sintomatologia caracteristica y molesta, ya mencionada previamente,   como  tambien   puede  cursar  de   manera  asintomatica  y   sin  implicar necesariamente un desorden neurologico.

 

 

¿Qué denominamos "hiperreflexia del detrusor"?

Es  definida  como  la  hiperactividad  del  musculo  detrusor,  debido  a  disturbios  del mecanismo de control del sistema nervioso.

Es dificil definir la similitud o diferencia, entre la inestabilidad y la hiperreflexia del

detrusor,  ambos  estados  de  hiperactividad vesical,  a  pesar  de  que  desde  el  punto  de vista practico, se ha dicho siempre que la primera no obedece a trastornos neurologicos y  la  segunda  si,  pero  esto  no  ha  podido  ser  completamente  esclarecido,  por  lo  cual, debemos confirmar la evidencia objetiva de la patologia neurologica, para poder dar el diagnostico de hiperreflexia del detrusor.

Lo  que  se  recomienda  es  evitar  el  uso  de  terminos  confusos  e  inadecuados, como:   vejiga   hipertonica,   vejiga   sistolica,   vejiga   no   inhibida,   vejiga   espastica   o automatica.

 

 

¿Qué denominamos "vejiga de bajo compliance o poca disten-sibilidad"?

Es  la  relacion  existente  entre  volumen  urinario  y  presion  generada  por  dicho volumen,  en  una  vejiga  con  una  elevacion  sustancial  de  la  presion.   Es  decir  es  una vejiga  que  con  bajos  volumenes  de  orina  en  su  interior,  generara  altas  presiones intravesicales,  con  la  consecuente  sintomatologia  de  urgencia,  frecuencia,  nocturia  e incontinencia de urgencia.

La    palabra    compliance,    podria    ser    traducida    como    "adaptacion    a    la distensibilidad", en este caso, de las paredes vesicales.

 

 

¿Qué denominamos "función hipoactiva" del detrusor"?

Se  define  como  la  contraccion  del  musculo  detrusor  de  magnitud  y  duracion inapropiada para poder lograr el vaciamiento vesical de manera eficaz y  en un tiempo


apropiado (normal).

Es  importante  recalcar  que  la  hipoactividad  del  detrusor,  se  evalua  en  la  fase miccional o de expulsivo urinario, en cambio la hiperactividad del detrusor, se evalua en la fase de llenamiento o almacenamiento vesical.

En  aquel  detrusor  que  no  muestra  contracciones  durante  la  fase  de  llenamiento

vesical y durante la fase de vaciamiento, dicha contraccion del musculo detrusor, podria estar ausente o estar debilmente sostenida.

 

 

¿Qué denominamos "detrusor no contráctil"?

Es   un   musculo   detrusor,   que   no   demuestra   contraccion   durante   el   estudio cistometrico urodinamico.

 

 

¿Qué denominamos "arreflexia del detrusor"?

Es  la  hipoactividad  del  musculo  detrusor,  debida  a  una  anormalidad  del  control neurologico  central,  demostrando  una  completa  ausencia  de  contracciones  vesicales, coordinadas por el Sistema Nervioso Central.

 

 

¿Qué denominamos "detrusor descentralizado"?

Cuando el musculo detrusor presenta arreflexia,  ocasionada por una lesion en el cono medular, o en la salida de los nervios sacros.   Si la lesion estuviera a nivel de las neuronas perifericas, seria denominado "detrusor denervado".

 

 

¿Qué denominamos "vejiga de alta compliance"?

Condicion  existente,  cuando  la  relacion  volumen-presion  de  la  vejiga  es  referida como de gran capacidad, con minimos cambios en su presion.

Es  una  vejiga  que  presenta  altos  volumenes  de  orina  en  su  interior,  y  que  no generara  presiones  elevadas  intravesicales,  con  la  consecuente  sintomatologia  de  los pacientes  que  presentan  volumenes  residuales  urinarios  altos,  que  paradojicamente, pudiera confundirse con casos de hiperactividad vesical, porque el paciente podria tener urgencia, frecuencia, nocturia e incontinencia por rebosamiento.

 

 

¿Qué denominamos "contractilidad normal del detrusor"?

Es  cuando  una  miccion  normal  es  lograda  por  una  contraccion  del  musculo detrusor,  la  cual  es  iniciada  voluntariamente,  sostenida  y  que  puede  ser  suprimida tambien voluntariamente.

 

 

¿Qué se considera "mecanismo de cierre uretral normal"?

Es  aquel  que  mantiene  una  presion  positiva  de  cierre  uretral  durante  la  fase  de llenamiento vesical, aun en presencia de una presion abdominal aumentada.

 

 

¿Qué se considera "mecanismo hiperactivo" de cierre uretral?

Es aquel mecanismo de cierre uretral que se contrae involuntariamente, al mismo


tiempo que ocurre una contraccion del detrusor, o falla para relajarse al intentarse una miccion.

 

 

¿Qué se considera "discinergia detrusor-uretra"?

Es la condicion que se produce cuando hay una contraccion sincronica, tanto del detrusor como de la uretra.  Este diagnostico, debera precisar el tipo de musculo uretral involucrado, bien sea estriado o liso.

 

 

¿Qué se considera "discinergia detrusor-esfinter"?

Es la condicion que se produce cuando hay una contraccion del musculo detrusor coincidente con una inapropiada contraccion de la uretra,  o de los  musculos  estriados periuretrales.

 

 

¿Qué se considera "discinergia detrusor-cuello vesical"?

Es   la   condicion   que   se   produce   cuando   hay   una   contraccion   del   detrusor combinada con un defecto objetivamente demostrable, de la apertura del cuello vesical.

Esta condicion no es rara verla en nuestra consulta clinica diaria, sobre todo, en

poblaciones masculinas jovenes.

 

 

¿Qué se considera "mecanismo incompetente de cierre uretral"?

Es la condicion que se produce al tener una presion de cierre uretral negativa, con la consiguiente perdida  de orina,  la cual puede ser persistente   (continua),  o debida  a aumento subito de la presion intraabdominal (incontinencia urinaria de esfuerzo), o por una    disminucion  involuntaria  en  la  presion  intrauretral,  en  ausencia  de  actividad  del detrusor (uretra inestable).

 

 

Vejiga   hiperactiva   (vejiga   inestable   -   detrusor   hiperactivo-   inestabilidad   del detrusor)

Es  un  termino  que  involucra  solamente  la  fase  de  almacenamiento  vesical,  y

nunca    la    fase    de    expulsion    urinaria    o    fase    miccional,    y    es    diagnosticada especificamente a traves de la cistometria del estudio urodinamico, y se sospecha por la presencia de sintomatologia clinica caracteristica.

Se  caracteriza  por  presentar  contraccciones  involuntarias  del  musculo  detrusor,

las  cuales  pueden  ser  espontaneas  o  provocadas,  estas  ultimas,  por  acciones  como toser,   pujar,   saltar,   caminar,   llenamiento   rapido   de   la   vejiga,   durante   el   estudio cistometrico  (estudio  urodinamico),  o  circunstancias  ambientales  y  todo  esto  con  el paciente intentando suprimir dichas contracciones involuntarias.

Se  denomina  inestable,  cuando  la  etiologia  no  es  neurogenica  y  se  denomina hiperreflexica  cuando  la  etiologia  es  sin  duda  alguna  neurogenica,  la  cual  estara originada por enfermedades, o por lesiones traumaticas, a nivel espinal o supraespinal.

Esta  diferenciacion  sufrira  ciertos  cambios,  que  se  explicaran  en  el  curso  del

presente trabajo.


Las  contracciones  que  se  producen  en  el  sindrome  de  vejiga  hiperactiva,  son usualmente sintomaticas  y  los  sintomas  son,  un  deseo imperioso de orinar (urgencia,, frecuencia urinaria, nocturia y usualmente incontinencia urinaria de urgencia.

 

 

Hiperreflexia del detrusor

Es un estado de hiperactividad debido a disturbios de los mecanismos de control neurologico.     Debera  ser   usado  solamente  cuando   haya   evidencias   objetivas   de trastornos neurologicos relevantes.

 

 

Urgencia motora

Es  la  condicion  urologica  en  la  que  se  presentan  contracciones  vesicales involuntarias,  por  hiperactividad  del  detrusor  (vejiga  hiperactiva),  producidas  por  una serie  de  factores  neurogenicos,  no  neuro-genicos  y  miogenicos  que  condicionan  la percepcion  de  que  se  producira  una  perdida  urinaria  involuntaria  si  la  miccion  no  se realiza con celeridad.  En el capitulo VI en lo refrente a aspectos etiologicos veremos en extenso las causas de la hiperactividad vesical y por ende de la urgencia motora.

 

 

Urgencia sensorial

Es  la  condicion  urologica  donde  se  presenta  un  estado  imperioso  de  orinar producto de un estado de hipersensibilidad vesical, uretral o vesicouretral, originandose urgencia  urinaria  que  se  produce  anormalmente  a  bajos  volumenes  de  llenamiento vesical con  dolor  o  molestias  que  mejoran al vaciar la vejiga  o que  desencadenan  un deseo constante de orinar que en muchas  ocasiones  no se mejora con el vaciamiento vesical   (Stephenson-Mundy);      todo   esto   sin   mostrar   en   ocasiones   evidencias cistometricas   objetivas   de   hiperactividad   vesical.      Es   debida   a   un   estado   de hipersensibilidad   de   las   terminaciones   propioceptivas   y   nociceptivas   de   la   pared muscular vesical, por motivos variados -inflamacion de diversas etiologias, infecciones urinarias,   antecedentes   quirurgicos,   antecedentes   de   tratamientos   quimioterapicos, antecedentes  de  radioterapia,  calculos,  cistitis  intersticial,  tumores  vesicales,  entre otros.  A menudo se acompaña de episodios de incontinencia urinaria de urgencia.

 

 

Incontinencia de urgencia motora

Es  la  condicion  urologica  en  la  que  se  presenta  perdida  involuntaria  de  orina, debida   a   contracciones   vesicales   involuntarias,   como   parte   de   un   sindrome   de hiperactividad   vesical,   asociadas   a   una   sensancion   de   urgencia   y   producidas usualmente  por  numerosas  afecciones  entre  las  que  destacan  las  afecciones  que obstruyen  el  trayecto  de  salida  vesical,  como  por  ejemplo,  el  crecimiento  prostatico benigno u otros estados obstructivos, asi como estados de vejiga de senectud, debido a hipertrofia   y   alteraciones   mioestructurales   de   la   musculatura   vesical,   las   cuales detallaremos mas adelante.

 

 

Urgencia


Se  define  como  el  deseo  imperioso  de  orinar  (fuertes  deseos  de  orinar).    Esta asociada  a  dos  tipos  muy  definidos  de  disfuncion vesical,  o  bien  en  casos  de funcion hiperactiva  vesical  (urgencia  motora),  o  bien  por  hipersensibilidad  debida  a  estados inflamatorios de causas variadas (urgencia sensorial).

 

 

Incontinencia de urgencia

Se   define  como   la   perdida  involuntaria  de  orina,   asociada   con   estados   de hipersensibilidad   de   las   terminaciones   propioceptivas   y   nociceptivas   de   la   pared muscular vesical,  por motivos  variados (inflamacion de diversas etiologias, infecciones urinarias,   antecedentes   quirurgicos,   antecedentes   de   tratamientos   quimioterapicos, antece-dentes de radioterapia, calculos, cistitis intersticial, tumores, entre otros).

 

 

Incontinencia refleja

Es  la  perdida   involuntaria  de  orina  que  se  produce  o  bien  por  hiperreflexia  del musculo detrusor vesical -lo que implica una lesion neurologica-, o bien por perdida del "tono" uretral, que ayuda a la falta de continencia urinaria.

Se presenta en etapas posteriores a un dano de la medula espinal, bien sea por

traumatismos, o por determinadas enfermedades.

Se debera anadir a todo esto, la falta total de sensibilidad, bien sea propioceptiva o nociceptiva.

 

Incontinencia urinaria por rebosamiento

Es la perdida de orina asociada con vaciamiento vesical incompleto o deficiente, debido a una contractilidad disminuida del musculo detrusor o a obstruccion de la salida vesical,  ocasionando  altos  residuos  urinarios  con  la  posibilidad  de  perder  orina  por rebosamiento.

 

 

Inestabilidad uretral

Se  define  como  la  variacion  en  la  presion  maxima  uretral,  mayor  de  15  cm   de agua, excediendo un tercio de la presion uretral maxima en reposo, durante un periodo de 2 minutos, en ausencia de actividad del musculo detrusor.

 

 

Hiperactividad vesical con contractilidad vesical deficiente (HVCO)

Son estados de hiperactividad vesical, pero con caracteristicas propias, en los que los  pacientes  presentan  contracciones  involuntarias  del  musculo  detrusor,  pero  deben esforzarse  mucho  para  poder vaciar su vejiga,  por cuanto las  presiones  intravesicales generadas, son de poca fuerza.

Dicho   vaciamiento   puede   ser   completo   o   incompleto,   con   la   presencia   de sintomas de incontinencia de urgencia y elevados niveles de orina residual.

Estos   pacientes   podrian   tener   sintomas   de   uropatias   obstructivas,   o   de incontinencia urinaria de esfuerzo, o de incontinencia por rebosamiento, haciendo dificil su diagnostico.


 

Compliance o distensibilidad vesical

Es definido como el cambio de volumen por unidad de cambio de presion durante el llenamiento vesical en la cistometria -estudio urodinamico- indicando la funcion de almacenamiento de la vejiga (ICS 1976).

Mas  especificamente,  es  el  cambio  en  el  volumen  intravesical  dividido  por  el

cambio  en  la  presion  intravesical  durante  un  incremento  de  volumen  o  DVIDP,  en unidades de mililitros por centimetro de agua.

El deterioro de la compliance vesical,  denotara una disminucion de la capacidad

vesical y un aumento de la presion intravesical, en la fase de almacenamiento vesical.

La  compliance  vesical  sera  determinada  por  la  interrelacion  entre  elementos constituyentes de la pared vesical, como por ejemplo fibras colagenas, fibras elasticas, musculo liso, en union al epitelio, nervios y vasos sanguineos.

Blaivas, menciona dos factores involucrados en la aparicion de una vejiga de bajo

compliance,   que   son:   un   componente   viscoelastico   alterado   y   un   componente neuromuscular afectado.

 

Sensibilidad vesical

Valora la sensibilidad propioceptiva, que informa de la tension y contraccion de las paredes  vesicales,  y  la sensibilidad  exteroceptiva o  nociceptiva  que informa  del  dolor, toque y temperatura.

La  sensibilidad  puede  ser  normal,  hipersensitiva,  o  hiposensitiva  y  se  precisa  a

traves de la cistometria del estudio urodinamico, durante el llenado vesical, a traves de la primera sensacion de llenado vesical, de la sensacion de llenado maximo vesical, de la sensacion de urgencia y de dolor, por la maxima repleccion.

 

 

Capacidad vesical organica

Es   la   cantidad   total   de   orina   que   puede   almacenar   la   vejiga   durante   una evaluacion cistometrica.   Sabemos  que la capacidad de un adulto es de 400 ml a 550 ml,   aproximadamente,   en  vejigas   normales.     Debe  diferenciarse  de  la  capacidad funcional,  que  es  aquella  cantidad  de  orina  que  puede  almacenar  la  vejiga  urinaria, durante la fase de llenado vesical, hasta tener intensas ganas de orinar.

Esta  afectada  por   muchos   factores   y   usualmente  la  capacidad  organica  es superior a la capacidad funcional, sobre todo en presencia de factores como la edad, la obstruccion  de  la  salida  vesical  y  enfermedades  que  afecten  la  distensibilidad  vesical (por ejemplo la hiperactividad vesical).

 

 

Maxima capacidad cistometrica

Es el volumen en el cual el paciente siente que no puede retardar mas la miccion.

 

 

 

Estabilidad del detrusor


Es la habilidad del musculo detrusor para permanecer relajado e inactivo durante el  llenamiento  urinario  vesical,  aun  cuando  se  realicen  maniobras  provocativas  de  la contractilidad vesical.

 

 

Contracciones no inhibidas del musculo detrusor (CNI)

Son  las  contracciones  del  musculo  detrusor  que  se  suceden  en  la  fase  de almacenamiento o llenamiento vesical y que el paciente intenta suprimirlas, sin poderlo lograr y que deben alcanzar una presion mayor de 15 cm de agua.

 

 

Frecuencia urinaria

Es la condicion que se presenta cuando el paciente orina mas de 8 veces al dia.

 

 

Nocturia

Es la condicion que se presenta, cuando el paciente se levanta 2 o mas veces a orinar por la noche, una vez que ya se habia dormido.

 

 

indice de nocturia (iN)

Se  define  como  el  volumen  urinario  nocturno,  dividido  por  la  capacidad  vesical funcional; este indice cuantificara la sobre-produccion urinaria nocturna, relacionada con la capacidad de almacenamiento vesical.  Mientras mas alto sea el iN, mas intensa sera la nocturia.

 

 

Poliuria nocturna

Volumen urinario nocturno que represente mas del 35% del volumen urinario total en 24 horas.

 

 

Poliuria

Volumen urinario total en 24 horas que supere los 2 500 ml.

 

 

Vejiga balanceada

Segun  Bors-Comarr  y  Hackler,  se  denomina  asi,  a  aquella  vejiga  que  se  vacia bien de orina, y con un residuo urinario pos-miccional (RPM), menor del 10% al 20% de la  capacidad  vesical  o  menos  de  100  ml,  aun  teniendo  una  presion  del  detrusor aumentada,  bien  sea  por  una  baja  distensibilidad  (compliance)  o  por  hiper-actividad vesical.

 

 

Incontinencia urinaria

Existen muchas clasificaciones de las mas simples a las mas complejas, como por ejemplo la que refiere que la incontinencia urinaria, es cualquier perdida incontrolada de orina en los 12 meses previos, sin tomar en cuenta  su  severidad (Diokno).

 

 

La Sociedad Internacional de  Continencia (ICS),  definio en 1976 la incontinencia


como  la  condicion  en  la  cual,  las  perdidas  involuntarias  de  orina  representan  un problema social e higienico y son objetivamente demostrables.

 

 

Incontinencia urinaria de esfuerzo  (IOE)

Segun la Sociedad Internacional de Continencia (ICS), la incontinencia urinaria de esfuerzo  es  la  perdida  involuntaria  de  orina,  cuando  la  presion  intravesical  excede  y supera la presion maxima de cierre uretral, pero en ausencia de actividad contractil del detrusor.

 

 

Prevalencia e incidencia en incontinencia urinaria

La "prevalencia" de la incontinencia urinaria, se define como el numero de casos totales de incontinencia urinaria, en un cierto periodo de tiempo.

La  "incidencia"  de  la  incontinencia  urinaria,  es  el  numero  de  nuevos  casos  de

incontinencia urinaria, sobre un cierto periodo de tiempo.

 

 

Clasificacion  de  incontinencia   urinaria   de   esfuerzo   en  la  mujer   (IOE)   segun

Blaivas (1988)

 

 

Tipo 0 =     No se demuestra fuga de orina en el examen clinico y urodinamico.

Tipo I =       Cuello vesical cerrado en reposo y situado por arriba del borde inferior de la sinfisis  pubiana.    En  el  esfuerzo  el  cuello  vesical  y  la  uretra  proximal  se abren, pero su descenso es minimo (menos de 2 cm).

Puede haber incontinencia urinaria.  Hay poco o ningun grado de cistocele. Tipo IIa =    Cuello vesical cerrado en reposo y situado por arriba del margen inferior de

la sinfisis  pubiana.   Al esfuerzo el cuello vesical y la uretra se abren y  hay

descenso rotacional del cuello vesical y de la uretra proximal. Puede haber incontinencia urinaria.

Tipo IIb =   Cuello vesical cerrado en reposo y situado en la margen inferior de la sinfisis pubiana  o  por  debajo.   Durante  el  esfuerzo  puede  haber  o  no  haber  mas descenso, pero la uretra se abre y la incontinencia urinaria se produce.

Tipo III =    Cuello   vesical   y   uretra   proximal   abiertos   en   reposo,   en   ausencia   de contracciones del detrusor.   Hay una evidente fuga de orina, la cual puede incluso ser por gravedad.  Hay deficiencia esfinteriana intrinseca.

 

 

Clasificacion  de  incontinencia   urinaria   de   esfuerzo   en  la  mujer   (IOE)   segun

Potenziani (1994)

 

 

Tipo 0 =     Pacientes  con I0E,  que  no se les  pudo  demostrar fuga  o  escape  de  orina durante el estudio urodinamico, o durante el examen clinico.

Tipo I =       Pacientes   con   descenso   uretrocervical   con   maniobra   de   Valsalva,   sin presencia   de   prolapsos   genitales.   No   presentan   residuo   posmiccional significativo (RPM).


Tipo II =      Pacientes  con  descenso  uretrocervical  con  maniobra  de  Valsalva,  con  la presencia de cistocele grado I, sin residuo         posmiccional        significativo (RPM).

Tipo III =     Pacientes   con   descenso  uretrocervical  con   maniobra   de   Valsalva,   con cistocele grado II-III, con residuo pos-miccional significativo (RPM).

Tipo IV =    Pacientes con descenso uretrocervical con o sin maniobra de Valsalva, con cistocele  grado  II-III  y  rectocele  asociado  grado  I-II-III  u  otros  prolapsos (enterocele,   histerocele)   con   residuo   urinario   posmiccional   significativo (RPM).

Tipo V =     Pacientes   con  cuello  vesical  y   uretra  proximal  abiertos   en  reposo,   en ausencia   de   actividad   contractil   del   detrusor.     Pueden   tener   o   no   la presencia de prolapsos  genitales.  Presenta dano intrinseco del mecanismo esfinteriano.


 

 

 

Capitulo II

Aspectos anatomicos y funcionales del sistema urinario inferior, durante la miccion

 

 

Aparte de integrar todos los conocimientos neurourologicos, es importante detallar los   aspectos   anatomicos   y   funcionales,   individualmente,   para   poder   tener   un conocimiento mas completo de lo que es la miccion humana.

Las     funciones     neurourologicas     del     sistema     urinario     inferior     para     el almacenamiento   y   vaciamiento   periodico   de   la   orina,   dependeran   de   circuitos neurologicos que incluyen al cerebro y a la medula espinal.

Es una compleja red de circuitos inhibidores y facilitadores, que se entremezclan, en diferentes  niveles neuroanatomicos, desde el lobulo frontal cerebral pasando por el tallo cerebral,  y  por diferentes  centros  miccionales  a nivel de la  medula espinal,  hasta llegar  a  nivel  sacro,  y  posteriormente,  conducir  estos  estimulos  facilitadores  o  inhi- bidores hasta los organos efectores, vejiga y uretra, que determinaran, en caso de estar en condiciones normales, la obtencion de una miccion normal.

La fase  de  almacenamiento  de  orina es  una fase simpatica,  lograda  a traves  de receptores  mecanicos-sensitivos  de  distension  de  las  paredes  vesicales,  y  de  una estimulacion  simpatica  al  secretar  noradrenalina  que  ocasiona  la  estimulacion  de  los receptores  alfa1  y  receptores  beta-adrenergicos  y  la  secrecion  de  acetilcolina  por nervios pudendos y parasimpaticos, que activa los receptores nicotinicos en el musculo estriado y los receptores muscarinicos (M2-M3) en el musculo liso vesical, que ocasiona una  relajacion  del  cuerpo  vesical  con  el  cierre  del  cuello  vesical  y  la  contraccion  del mecanismo esfinteriano uretral externo.

La fase de vaciamiento o fase miccional, es una fase parasimpatica, en la que se produce   una   estimulacion   parasimpatica,   con   una   estimulacion   de   los   receptores colinergicos,  ocasionandose  asi  una  contraccion  del  cuerpo  vesical,  una  abertura  del cuello   vesical   y   una   relajacion   del   mecanismo   esfinteriano   uretral   externo.     No olvidemos que la inervacion parasimpatica tambien ocasiona la salida a la circulacion de AlP y  oxido  nitrico  que provoca la contractilidad  de  la vejiga  en  el caso  del  AlP y  la relajacion de la musculatura lisa uretral en el caso del oxido nitrico.

La miccion es producto de una extensa y compleja red neuromuscular, que cada dia se profundiza mas, y donde las investigaciones han llevado a un conocimiento cada vez mas profundo de la bioquimica de los  mediadores quimicos de la pared y  mucosa vesical, asi como de los receptores muscarinicos, adrenergicos, dopaminergicos, gaba- ergicos, no adrenergicos-no colinericos, que llevaran a su vez a una mas extensa y a la vez mas precisa disponibilidad terapeutica en lo relativo a farmacos disponibles para los


diferentes  disturbios que presente la miccion humana tanto en su fase de llenamiento, como en su fase de vaciamiento, ocasionados por las mas variadas etiologias.

Estan  centralmente    integrados  y  coordinados  por  centros  de  la  miccion  en  el lobulo frontal y en el tallo cerebral, asi como en los nucleos relacionados con la miccion, en las areas extrapiramidales (cerebelosas) y en nucleos ubicados en la medula espinal y  en areas  infraespinales  (sacras),  en  ganglios  perifericos,  y  se integran final-mente  a los organos o estructuras diana (vejiga, uretra, rabdoesfinter, lisoesfinter y musculatura pelvica   muscular),   a   traves   de   plexos   neurologicos,   ubicados   en   la   muscularis vesicouretral,  estructura  muscular  lisa  compleja,  que  involucra  a  la  vejiga  y  la  uretra (Griffiths, 1997) .

Ademas,  el  acido  glutamico  actua  sobre  los  receptores  NMDA  y  no  -NMDA,  y estaria considerado el mayor transmisor en las sinapsis centrales en las vias reflejas de la miccion (Matsumoto y col. 1995).

Hoy  sabemos  que  existen  tambien  otros  neurotransmisores  centrales,  como  el

GABA,  la  serotonina,  la  acetilcolina,  las  encefalinas,  la  dopamina,  las  neurokininas,  el oxido nitrico y el AlP, los cuales funcionan como moduladores inhibiendo o faciltando la transmision lograda por el acido glutamico.   De esto hablaremos mas en el capitulo de fisiologia del musculo liso vesical, en lo referente a los neurotransmisores excitatorios e inhibitorios.

Segun  de  Groat,  de  la  Universidad  de  Pittsburgh,  un  gran  investigador  en  el campo  del   control   neurologico   de  la  vejiga   urinaria,   podrian   especularse   nuevos conceptos  para  explicar  la  inervacion  del  sistema  urinario  inferior,  y  los  mecanismos reflejos  que  controlan  el  sistema  urinario  inferior,  de  los  cuales  en  la  pagina  previa hablamos  de  ellos  y  resumiendo  describimos  tres  tipos  de  nervios  perifericos:  nervios pelvicos parasimpaticos, que activan-excitan la vejiga contrayendola y relajan el aparato esfinteriano  distal  para  poder  lograr  el  vaciamiento  urinario;  nervios  del  simpatico lumbar,  que  inhiben-relajan  la  vejiga  y  activan-excitan  la  base  vesical  y  la  uretra  para poder  lograr  el  almacenamiento urinario,  y  el tercer tipo de nervios  involucrados  en  el control  neurologico  del  sistema  urinario  inferior  son  los  nervios  pudendos  con  una funcion basica de excitar-activar tonificar el aparato esfinteriano externo, asi como inter- conexiones para poder tonificar tambien el piso pelvico muscular y con esto ayudar a la continencia urinaria.

Pues bien de una manera mas  profunda, se sabe que el control voluntario de la miccion  depende  de  dos  factores  que  son:  las  conexiones  entre  la  corteza  del  lobulo frontal y la region septal-preoptica del hipotalamo y de las conexiones existentes entre el lobulo paracentral y el tallo cerebral y la medula espinal.

Al  producirse  lesiones  de  dichas  areas,  desaparece  el  "control  inhibitorio"  de  la corteza   cerebral   sobre   el   area   hipotalamica   anterior   y   por   ende   aparecera   una hiperactividad vesical inmediata.

Por otro lado a nivel del tallo cerebral, encontraremos que el efecto predominante sobre  la  fisiologia  vesical  es  de  tipo  "inhibitoria",  y  tendremos  que  el  centro  miccional "facilitador"   de   la   region   gris   periacueducto   (PAG),   al   ser   estimulados   produce


contracción vesical, y parece tener intimas relaciones con las vias aferentes vesicales, a traves  de las  neuronas  inermediolaterales  de la  medula espinal lumbosacra (De Groat

1997, van der Horst 1993).

Todos  los  circuitos  basicos  mencionados  anteriormente y  que nos  han permitido entender muy superficialmente lo que podria estar pasando con el control de las fases de  la  micción,  se  piensa  que  son  a  su  vez  modulados  tanto  a  nivel  central  como periferico por variados mecanismos entre los que se incluyen:  modulación presinaptica homosinaptica y heterosinaptica, inhibición y facilitación de la transmisión ganglionar, y la  alteración  de  las  vias  neurológicas  por  sustancias  quimicas  segregadas  por  los

6rganos diana.

Se esta trabajando intensamente, para definir el rol lo mas exacto posible de los receptores  muscarinicos  M1,  M2,  M3  en  conjunción  con  los  receptores  adrenergicos, puesto  que  cada  dia  se  descubren  nuevas  propiedades  de  los  neurotransmisores,  de los neuropeptidos aferentes contenidos en las varicosidades nerviosas que rodean a los ganglios  parasimpaticos  intramurales  vesicales  (CGRP,  sustancia  P),  con  sus  efectos moduladores sobre dichas sinapsis ganglionares.

Por   otro   lado   factores   neurotróficos   como   el   NGF,   GDNF   (glial   derived neurotrophic  factor),  BDNF,  segregados  por  el  musculo  liso  vesical  induciran  cambios plasticos en las terminaciones aferentes y eferentes vesicales.

Sin  duda  alguna,  en  los  próximos  años  veremos  un  sinnumero  de  trabajos  de investigación en este campo, que luego seran llevados  a la aplicación clinica practica, para  poder  enfocar  mejor  a  las  diferentes  patologias  que  podrian  originar  disfunción miccional,  de  las  cuales  la  hiperactividad  es  una  de  las  mas  importantes,  por  su repercusión en la calidad de vida de los pacientes afectados.

 

 

ASPECTOS ANATCMICOS Musculo detrusor

Existe un concepto anatómico, que es de suma importancia para el entendimiento de la funcionalidad del tracto urinario inferior y es lo concerniente a la muscularis de la vejiga,   la   cual,   esta   en   continuidad   anatómica   directa,   a   lo   largo   de   la   unión vesicouretral, a nivel del cuello vesical.

Por las  diferencias  en relación con la inervación  intrinseca de la vejiga,  esta fue dividida en dos unidades funcionales, que son, el "cuerpo" -ubicado por arriba del nivel de  la  entrada  de  los  ureteres  en  la  vejiga-  y  la  "base"  -ubicada  por  debajo,  en  la pared vesical posterior.

El  clasificar  asi   al   musculo  detrusor,   ha  tenido  tambien  su  correlación  con aspectos  fisiológicos  y  farmacológicos,  que  lograran  que  ambas  zonas    tengan  la posibilidad  de  realizar  funciones  independientes,  a  pesar  de  que  anatómicamente tengan continuidad.

Sabemos que el cuerpo, tendra funciones duales, como reservorio urinario, en la fase de almacenamiento y llenado vesical y como bomba en el expulsivo urinario o fase de vaciamiento urinario.


Una  caracteristica  del  cuerpo  vesical  es  que,  para  permitir  el  almacenamiento vesical, se distendera de manera tridimensional, pero la unidad de la base permanecera fija como si fuera un plato plano, envolviendo la union vesicouretral que favorecera, por tanto, el "cierre funcional" de la zona de la salida vesical.

En  cambio  en  la  fase  de  vaciamiento  urinario,  la  unidad  del  cuerpo  vesical, generara una contraccion miccional para expulsar la orina, que ocasiona el empuje de la unidad de la  base  vesical,  abriendose en forma  de  embudo,  lo cual conduce  la  orina, hacia la uretra prosta-tica y por ende al exterior.

Para   poder   tener   una   fase   de   almacenamiento   urinario   satisfactoria,   es indispensable  que  el  cuerpo  vesical,  sea  bastante  distensible  -buena  compliance-, que   permita   un   llenado   vesical,   sin   elevaciones   patologicas   de   las   presiones intravesicales, y a la vez tenga estabilidad, es decir, que no presente contracciones no inhibidas, ni otros episodios de hiperactividad del detrusor, con lo cual se conseguiria no tener   sintomas   caracteristicos   de   dicho   proceso,   como   son   nocturia,   urgencia, frecuencia e incontinencia de urgencia.

La fase de almacenamiento urinario o llenamiento, depende de que "mecanismos reflejos  medulares",  activen las  vias  simpaticas  y  somaticas,  que a su vez  modifica la salida  vesical  y  de  que  un  sistema  inhibitorio  tonico  cerebral,  suprima  la  actividad parasimpatica excitatoria hacia la vejiga urinaria, para lograr, por un lado, dar tonicidad y contraccion al aparato esfinteriano tanto proximal como distal, y por el otro lado evitar la contraccion del musculo detrusor vesical, es decir, mantenerlo relajado.

La fase de vaciamiento urinario   o expulsivo, se logra a traves de la inhibicion de las vias simpaticas-somaticas, lograndose una relajacion del aparato esfinteriano, tanto proximal  como  distal,  es  decir  tanto  del  cuello  vesical  (esfinter  liso  interno),  como  del esfinter estriado externo, y de la activacion de las vias parasimpaticas  reflejas  espino- bulbo-espinales, pasando a traves del centro de la miccion, en el tallo cerebral.

Para  poder  lograr  una  fase  expulsiva  urinaria  satisfactoria,  es  de  trascendental importancia que el  musculo detrusor pueda exhibir una capacidad contractil,  capaz  de desencadenar una contraccion poderosa, rapida y coordinada, tanto con la abertura del mecanismo  del  cuello  vesical  -mecanismo  esfinteriano  proximal  o  de  musculatura lisa-, como con la abertura del mecanismo esfinteriano estriado distal.

Un  paciente  con  lesion  cerebral,  podria  presentar  hiperactividad  vesical  por  no contar,  o contar  de  manera reducida,  con los  mecanismos  "inhibitorios"  ubicados  a un nivel por arriba del tallo cerebral.   Lesiones a nivel de la medula espinal por otro lado, conduce  a  "reflejos  vesicales  medulares  primitivos",  estimulados  por  las  neuronas aferentes vesicales tipo fibras C, llevando a hiperactividad del musculo detrusor.

Union ureterovesical y trigono vesical

La capa muscular que envuelve la parte distal de los ureteres se extiende dentro de  la  zona  trigonal  y  el  entrecruzamiento  de  las  extensiones  musculares  de  ambos ureteres,  sobre  la  zona  trigonal  se  denomina  "musculo  trigonal  o  uretero-trigonal"  o trigono superficial, es ancho en la base del musculo detrusor y se embudiza y estrecha hacia la union vesico-uretral (salida vesical).


Extensiones  musculares  de la base del detrusor hacia la parte superior y lateral, envuelven tambien la parte superficial de los ureteres distales, y se llama vaina ureteral de Waldeyer.

La vaina profunda de los ureteres terminales, la forma la muscularis ureteral por si misma.

Esta disposicion tendra el objetivo fundamental de cerrar los ureteres en su parte distal,  por  un  mecanismo  valvular  debido  a  la  disposicion  de  los  haces  musculares, evitando el reflujo urinario de la vejiga hacia el sistema urinario superior, al distenderse el cuerpo vesical de manera tridimensional y a su vez, cerrarse el cuello vesical por una contraccion de la base vesical.

Se evitaran las consecuencias como las infecciones y el dano del sistema colector renal y posteriormente al parenquima renal, por el "efecto martillo" del reflujo urinario.

 

Cuello vesical (esfinter muscular liso • Lisoesfinter urinario)

Desde  el punto de vista histologico,  histoquimico,  en relacion con los  receptores adrenergicos   y   colinergicos   que   contiene,   y   tambien   desde   el   punto   de   vista farmacologico,  la  musculatura  lisa  de  esta  zona,  es  distinta  de  la  que  conforma  el cuerpo y la base del musculo detrusor.

Hasta  no  hace  mucho,  se  consideraba  al  trigono,  como  parte  del  mecanismo esfinteriano   proximal,   pero   desde   1979,   cuando   Gosling   publica   su   trabajo   "La estructura  de  la  vejiga y  de la  uretra  en  relacion  con  la funcion",  se sabe  que  es  una unidad distinta e independiente del resto del detrusor.

En el cuello vesical del varon, las celulas musculares lisas forman un anillo circular completo,  el  cual  se  extiende  distalmente  para  rodear  la  porcion  preprostatica  de  la uretra.

En la mujer los haces musculares se extienden oblicua y longitudinalmente dentro

de las paredes uretrales.  Parece dificil que en la mujer, el cuello vesical, tenga la activa participacion  que  tiene  en  los  hombres,  en  el  aspecto  de  la  continencia  urinaria  y tambien en la respuesta que obtengamos en los trastornos funcionales del cuello vesical con la urofarmacologia respectiva.

El funcionamiento del cuello vesical es diferente en hombres y mujeres y el papel que desempena en la continencia urinaria, tambien sera diferente en ambos sexos.

El  esfinter  proximal  liso,  llamado  tambien  esfinter  interno  o  lisoesfinter,  es  un

"mecanismo  muscular  liso  esfinteriano"  bastante  complejo,  que  abarca  los  musculos que  integran  la  base  de  la  vejiga,  los  que  integran  la  union  del  cuello  vesical  con  la uretra y los que integran la zona de la uretra proximal en la mujer, o uretra prostatica en el hombre.

Por  supuesto,  en  lo  concerniente  a  la  continencia  urinaria,  a  todo  lo  antes mencionado, se le sumaria la presencia del esfinter muscular estriado (esfinter externo) o rabdoesfinter,  en  el caso del  hombre y  en el caso de la  mujer se le sumarian otros factores,   como   soportes   anatomicos   de   los   organos   pelvianos,   asi   como   a   las estructuras  que  sostienen  al  cuello  vesical  (ligamentos,  fascias)  y  a  la  uretra,  que  le


confieren   propiedades   biomecanicas,   que   resultan   en   la   obtencion   final   de   la continencia  urinaria,  unido  al  mantenimiento  del  trofismo  de  los  tejidos  de  la  uretra  y trigono vesical, supeditados a una accion hormonal estrogenica.

El mecanismo muscular liso esfinteriano es denominado "liso-esfinter" y sabemos que   tiene   dos   funciones   muy   importantes:   una   es   mantener   una   salida   vesical continente por su accion sobre la base del detrusor y sobre la muscularis uretralis.

La  otra  funcion  es  el  mantenimiento  de  una  zona  ureterovesical  competente,  a traves de las vainas ureterales, sumado a la base trigonal del detrusor y a la muscularis uretral  proximal,  que  eviten  que  con  cada  contraccion  del  detrusor,  se  produzca  un reflujo vesico-ureteral, con las consecuencias ya por todos conocidas.

 

 

Muscularis uretralis

Su  conocimiento  nos  dara  la  posibilidad  de  "entender"  sus  trastornos,  porque  al interrumpirse  su  "continuidad  funcional",   por   motivos   muy   variados,   redundara  en problemas de diversa indole para el paciente.

La podemos considerar como una extension muscular inferior de la base vesical, que se introduce en la pared uretral, para formar capas musculares orientadas en haces circulares  o  longitudinales,  las  cuales  a  su  vez  por  cambios  en  su  orientacion  forman haces de capas orientadas oblicuamente.

Ademas  las terminaciones  del  musculo trigonal,  en forma acintada, se continuan dentro de la uretra en su lado interno, de su cara dorsal hasta el verumontanum en la uretra prostatica, o hasta el cuello vesical en la mujer.

La   muscularis   uretralis   de   la   region   subvesical,   en   el   hombre,   sufre   una modificacion  por  la  presencia  de  la  glandula  prostatica,  la  cual,  conforma  la  capsula prostatica, en su area mas externa y en forma circular.

En  la  linea  media  en  su  region  ventral,  la  muscularis  uretralis  se  une  con  la

comisura anterior de la prostata.

Segun  la  descripcion  anatomopatologica  de  McNeal,  se  describe  como  estroma anterior fibromuscular (EAF).

 

 

Esfinter urinario externo (rabdoesfinter)

Hasta  no  hace  muchos  años,  los  haces  musculares  estriados  circulares  de  la uretra   membranosa,   eran   considerados   como   el   esfinter   externo   y   como   un constituyente del conocido "diafragma urogenital".

Actualmente  existe  un  concepto  dual  en  el  mecanismo  esfinte-riano  uretral,  uno proximal y  uno distal.   Hoy el "musculo estriado periuretral", es considerado como uno de   los   componentes   del   mecanismo   distal   esfinteriano,   pero   sin   duda   el   menos importante en los mecanismos de continencia.

Tambien se ha descrito como "zona esfinteriana externa", en un sentido funcional, debido   a   las   consideraciones   estudiadas   en   el   perfil   uretral   de   los   estudios urodinamicos.

La  estructura  denominada  rabdoesfinter,  es  una  parte  integral  de  la  muscularis


uretralis  en  ambos  sexos,  independiente  de  la  musculatura  externa  estriada  del  piso pelvico.  Tambien ha sido denominada "esfinter uretral intrinseco externo distal", termino por demas explicito pero tambien muy confuso, para la mayoria.

El rabdoesfinter esta mejor definido en los hombres que en las mujeres.   Es mas ancho en la region uretral ventral que en la dorsal.  Unos creen que es parte de la uretra membranosa y ha sido asociado con la capsula prostatica.

Caudalmente, sus fibras tienen una orientacion circular en la uretra membranosa y tienen una forma en U, con cierta debilidad en su aspecto dorsal.

Cranealmente,   se   extiende   dentro   y   adyacente   a   la   muscularis   uretralis   y

conforma  el  componente  externo  que  se  adosa  a  la  prostata  como  un  componente integral de la capsula prostatica.

Aquellos casos que presentan incontinencia urinaria, luego de operaciones sobre la glandula prostatica, como la RTUP, dirigida al crecimiento prostatico benigno (CPB), o las prostatectomias radicales, en caso de cancer prostatico, se pudieran explicar por lo  mencionado  acerca  de  la  capsula  prostatica,  asi  como  por  fibras   musculares, diseminadas  dentro  del  parenquima  glandular  y  dentro  de  la  capsula  prostatica,  y tambien por la presencia de hiperactividad vesical.

Investigadores   como   Gil   Vernet,   han   descrito   extensiones   muscu-lares   del rabdoesfinter dentro de la region proximal de la uretra bulbar, e inclusive relacionadas con las glandulas bulbouretrales de Cowper.

8abemos   que   la   configuracion   que   describen   los   haces   musculares   del

rabdoesfinter  en  la  region  prostato-capsular,  es  en  "forma  de  mariposa",  por   lo  que entendemos,   luego   de   este   breve   resumen,   por   los   aspectos   anatomicos   del rabdoesfinter,  que facil es,   quedar con trastornos  de la continencia urinaria,  luego de cirugias prostaticas muy cruentas y accidentadas.

La neuroanatomia de la miccion urinaria a nivel de la medula espinal sacrolumbar y de los   nervios  perifericos, esta bastante bien  aclarada.   La inervacion simpatica del sistema urinario inferior deriva de la medula espinal toracolumbar T12-L2.   A traves de los  nervios  hipogastricos,  la  inervacion  simpatica,  actua  sobre  la  relajacion  vesical  y tambien sobre la contraccion del cuello vesical y de la uretra proximal.

La inervacion parasimpatica y somatica del sistema urinario   inferior, proviene del segmento sacro de la medula espinal 82-84.  La inervacion parasimpatica -a traves de los  nervios  pelvicos- y  la inervacion somatica  -a traves  de  los  nervios  pudendos-, actuan   sobre   la   contraccion   vesical   y   sobre   la   contraccion   del   esfinter   externo (rabdoesfinter).

Enfermedades   de   la   medula   espinal   sacra,   daran   como   resultado,   vejigas arreflexicas  o  hiporreflexicas.  Cuando  no  exista  inervacion  pudenda,  el  paciente  no tendra  sensibilidad  a  nivel  perineal  y  el  tono  esfinteriano,  estara  abolido,  asi  como tambien tendra ausencia del reflejo bulbocavernoso.

Cuando hay enfermedades de los nervios perifericos tales como hernias de disco intervertebral  o  discocele,  tabes  dorsal,  diabetes  con  repercusiones  funcionales  en  la vejiga  (cistopatia  diabetica),  o  antecedentes  de  cirugia  radical  pelvica,  se  obtendran


combinaciones  de  hallazgos  urodinámicos,  como  por  ejemplo  arreflexia  del  musculo detrusor, deficiencia esfinteriana, tanto interna como externa.

 

 


Capitulo III

 

Fase de almacenamiento urinario vesical

 

 

Sera  la  alteracion  de  la  fase  de  almacenamiento  vesical,  lo  que  llevara  a  los pacientes,  a  presentar  una  modalidad  de  comportamiento  vesical  denominada  vejiga hiperactiva,  o  como  se  ha  denominado  hasta  ahora,  segun  la  vieja  nomenclatura, detrusor inestable.

La  Sociedad  Internacional  de  Continencia  (ICS),  definio  la  hiperactividad  del detrusor,   como   la   "contraccion   fasica   del   detrusor,   ocurrida   durante   la   fase   de provocacion de la cistometria urinaria, realizada preferiblemente con agua".

Las funciones que debe desempeñar el sistema urinario inferior, en el sentido de

almacenar la orina y  de expulsar esa orina al exterior,  esta totalmente bajo el influjo y dependencia  de  circuitos  neurologicos  que  van  desde  el  cerebro,  pasando  por  la medula  espinal,  hasta  los  organos  efectores  (vejiga,  uretra,  piso  muscular  perineal  y mecanismos esfinterianos) (Chai y Steers 1996).

Para que se lleve a cabo una fase  de almacenamiento de orina,  son necesarios varios requisitos:

a.   Mecanismos  reflejos  espinales,  que  puedan  activar  al  mismo  tiempo,  las  vias

neurologicas simpaticas y somaticas, que actuen sobre la salida vesical, sobre la uretra y sobre el mecanismo esfinteriano uretral distal o externo.

b.   Sistema  inhibitorio  tonico  en  el  cerebro,  que  pueda  ser  capaz  de  suprimir  los efectos excitatorios parasimpaticos sobre la vejiga urinaria.

 

 

Por  otro  lado,  la  miccion  o  fase  de  vaciamiento  de  orina,  es  exactamente  Lo contrario,  de  la  fase  de  almacenamiento,  es  decir  hay  una  inhibicion  de  las  vias neurologicas simpatico-somaticas y por otro lado hay una activacion de las vias reflejas espino-bulbo-espinales parasimpaticas, pasando a traves del centro de la miccion, en la region superior del tallo cerebral (Elbadawi 1988).

Hay evidencias que sugieren que estas actividades son moduladas por la corteza y  subcorteza  cerebral  y  que  los  impulsos  que  viajan  al  centro  de  la  miccion  del  tallo cerebral, pueden viajar por otras vias aferentes a las ya conocidas.

Con finalidad didactica y  para un enfoque "homogeneo" de las  posibles  medidas terapeuticas,  se  ha  querido  adoptar  una  explicacion  neurologica  simple,  que  ha  dado buenos resultados clinicos.

Tres tipos de nervios perifericos, intervienen en la inervacion del sistema urinario

inferior: nervios parasimpaticos sacros o nervios pelvicos; nervios del sistema simpatico toraco-lumbar,  que  son  los  nervios  hipogastricos  y  la  cadena  simpatica;  y  nervios somaticos sacros, que son los nervios pudendos.

 

Requisitos para una fase de almacenamiento vesical normal


 

1.   Distensibilidad vesical normal

2.   Estabilidad vesical

3.   Competencia de la union ureterovesical

4.   Continencia de la salida vesical

5.   Sensibilidad vesical normal

 

 

En   el   esquema   a   continuacion   podremos   darnos   cuenta   de   lo   que   hemos explicado anteriormente:

 

Distensibilidad vesical

La  distensibilidad-compliance  vesical  mide  el  cambio  en  volumen  por  unidad  de presion del detrusor durante la fase de llenamiento vesical.

Es  la  capacidad  que  permite  a  la  vejiga  urinaria  llenarse  progresivamente  a  su

maxima capacidad, con un minimo aumento en sus presiones intravesicales.

Mantener la vejiga a baja presion es el resultado final de la excelente interaccion entre  las  propiedades  biomecanicas,  propiedades  fisicas  y  propiedades  activas  del cuerpo vesical.

Las propiedades fisicas del cuerpo del musculo detrusor, son determinadas por la

disposicion  geometrica  y  la  interrelacion  de  sus  elementos  musculares,  todo  esto sostenido por un intersticio sano.

Las  propiedades  mecanicas  o  fisicas  de  la  vejiga  depende  basicamente  de  la

elasticidad  del  musculo  detrusor  y  del  tejido  conjuntivo  que  contenga  (principalmente tejido colageno y elastico).

La   vejiga   de   baja   compliance   y   de   baja   capacidad,   esta   caracterizada histologicamente  por  fibrosis  y  acumulacion  de  componente  en  la  matriz  extracelular. Habra  un  radio  anormal  de  fibras  colageno  y  fibras  elasticas  que  engrosara  la  pared vesical y afectara la disten-sibilidad de la vejiga urinaria.

En  las  vejigas  normales  hay  una  intensa  presencia  de  colageno  tipo  I  y  tipo  III ubicado  en  la  lamina  propia  del  detrusor.  Pero  en  las  vejigas  de  bajo  compliance (escasa   distensibilidad),   habra   un   aumento   del   colageno   tipo   III   en   los   haces musculares.

El  colageno  tipo  I  forma  unidades  musculares  fuertes  y  gruesas,  en  cambio  el colageno   tipo   III   forma   fibras   aisladas,   delgadas   y   debiles.   Esto   tendra   sus repercusiones  en  pacientes  con  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo  (IOE),  quienes tendran menor porcentaje de fibras de colageno tipo I, por lo cual hara menos resistente a los tejidos  de estas pacientes, con lo cual podria producirse la incontinencia urinaria (Norton-Bergman-Sayer).

La  presion  del  musculo  detrusor  esta  relacionada  con  las  fuerzas  en  la  pared vesical.    La  vejiga  se  comporta  como  una  esfera  de  paredes  delgadas,  por  lo  cual podriamos aplicar la Ley de Laplace (presion del detrusor = F/ R2).

Con el llenado vesical, las paredes vesicales se adelgazan y por lo tanto, aumenta


la  fuerza  sobre  ellas,  pero  tambien  aumenta  el  radio.    Cuando  esto  sucede,  ambos aumentos  (F  y  R)  anulan  cualquier  incremento  en  la  presion  del  musculo  detrusor, manteniendose este muy  bajo, inclusive con la vejiga llena de orina.   Contribuyendo a esta situacion, tendremos el efecto modulatorio del sistema nervioso autonomo.

La  fuerza  F  y  la  presion  del  musculo  detrusor,  dependen  tambien  de  la  tasa  de llenado   vesical.      Esto   sera   la   clave   para   el   entendimiento   de   la   aparicion   de contracciones  no  inhibidas  en  la  prueba  de  cistometria  de  llenado  rapido,  porque  las maximas presiones del detrusor se consiguen en el llenamiento rapido.

El  comportamiento  del  detrusor  en  estos  momentos,  obedece  a  mecanismos fisicos pasivos (propiedades biomecanicas), debido a la viscoelasticidad de las paredes vesicales.

El  colageno  del  musculo  detrusor  determina  la  elasticidad,  que  permite  que  las paredes  vesicales,  una  vez  deformadas  por  accion  del  esfuerzo,  vuelvan  a  su  estado anterior de normalidad, cuando ese esfuerzo desaparece.

La viscosidad en cambio, es la propiedad que permite que un material o estructura determinada, retarde su deformacion por el esfuerzo, y esto en el caso de las paredes vesicales  sera  condicionado  por  la  fuerza  del  musculo  liso  vesical,  incluyendo  sus elementos contractiles.

La compliance o distensibilidad de las  paredes  vesicales,  podra ser alterada  por cambios en la viscoelasticidad, o en la actividad tonica del musculo detrusor.

Cuando  existe   un   paciente  con   un  comportamiento  viscoelastico   demasiado

pronunciado, puede ser tomado o como un signo precoz de aumento patologico del tono activo del detrusor, o como una vejiga fibrotica, con pobre distensibilidad, que afectara las propiedades viscoelasticas del musculo detrusor.

 

Estabilidad del musculo detrusor

Es el mecanismo de seguridad que tiene la vejiga, para contrarrestar la posibilidad de desarrollar contracciones no inhibidas del detrusor (CNI), que podrian acompañarse de  incontinencia  de  orina,  urgencia,  frecuencia  einclusive  nocturia,  durante  la  fase  de llenamiento vesical.

Para   poder   alcanzar   la   estabilidad,   el   musculo   detrusor   necesita   algunos requisitos,  como  por  ejemplo,  no  tener  celulas  musculares  irritables,  que  presenten actividad  espontanea  aumentada,  o  que  exhiban  respuestas  exageradas  a  estimulos neurologicos excitatorios.

Otro requisito para alcanzar la estabilidad es que no haya condiciones que afecten a las celulas musculares en su capacidad contractil.

Suprimir    las    influencias    neuroexcitatorias,    se    lograra    por        mecanismos modulatorios y por la interaccion del sistema nervioso simpatico y parasimpatico.

La contraccion tonica sostenida, del llamado lisoesfinter, por estimulo del sistema nervioso  simpatico  (receptores  alfa  adrenergicos),  sera  fundamental  en  la  fase  de almacenamiento urinario vesical.

Esto ayuda a que las uniones ureterovesicales, sean competentes y que la salida


vesical, sea eficaz y continente, que como sabemos son requisitos fundamentales de la fase de almacenamiento vesical.

Por  tanto  la  continencia  del  paciente  se  lograra  por  la  accion  conjunta  de  la contraccion tonica sostenida del lisoesfinter,  del  musculo liso de la capsula prostatica, de la  muscularis  uretralis,  y  del rabdoesfinter,  los  cuales  contribuiran,  a una sostenida contraccion tonica postural total.

 

 

Sensibilidad

Es  el  ultimo  requisito  en  la  fase  de  almacenamiento  urinario  vesical,  y  esta considerado  de  gran  importancia.    Cuando  el  llenado  vesical  alcanza  determinados volumenes, se despiertan las primeras sensaciones vesicales y los primeros deseos de orinar (sensibilidad propioceptiva), en este momento, si las condiciones o circunstancias no permiten que el paciente pueda orinar, el paciente tiene la posibilidad de posponer la miccion,  al  suprimir  la  actividad  excitatoria  parasimpatica  y   aumentar  la  actividad simpatica y conjuntamente con un aumento de la actividad del rabdoesfinter.

Cuando ya el paciente pasa de las primeras sensaciones a sensaciones de dolor o  urgencia  miccional,  esta  se  denomina  sensibilidad  nociceptiva,  viajando  por  vias neurologicas diferentes a la primera.

 

Competencia de la union ureterovesical

No  hay  duda  que  una  union  ureterovesical  alterada,  estara  aso-ciada  a  reflujo vesicorenal en un alto porcentaje de casos, que a su vez afecta la dinamica vesical con la consiguiente alteracion de la fase de almacenamiento vesical.

 

Continencia de la salida vesical

Como   ya   hemos   mencionado,   es   muy   importante   que   haya   una   integridad anatomica   y   neurologica   para   que   se   lleven   a   cabo   todas   las   interacciones neuroanatomicas  que  faciliten  una  adecuada  coordinacion  entre  la  relajacion  vesical (distensibilidad-estabilidad)  y  el  cierre  u  oclusion  de  la  salida  vesical,  porque  si  este ultimo  no  lograra  su  objetivo,  tampoco  lograria  la  vejiga  llenarse  de  orina  y  con  ello alcanzar una fase de almacenamiento vesical normal.

 

 


Capitulo IV

Fisiologia del musculo liso vesical

 

 

 

En este capitulo se tocaran aspectos  relevantes  de la fisiologia del  musculo liso vesical, los cuales se estan profundizando dia a dia, porque como veremos en el curso del   tema,   se   han   descubierto   vias   neurologicas   alternas   a   las   ya   conocidas   y tradicionales que todos estudiabamos.

Es asi como mencionaremos a los neurotransmisores diferentes a la acetilcolina y a la noradrenalina,  mencionaremos tambien a los cotransmisores y  el concepto de los mecanismos de transmision neuromodulados, se mencionaran las "fibras nerviosas no- adrenergicas no-colinergicas", las cuales son las responsables de explicar la resistencia relativa de la contractilidad del detrusor a la atropina.

Mencionaremos  tambien  las  subdivisiones  de  los  receptores  muscarinicos,  que han  hecho  posible  complejizar  e  individualizar  los  efectos  terapeuticos  deseados  de farmacos de diferente sitio de accion, sobre la fisiopatologia de la hipercontractilidad o hiperactividad vesical.

Es  por  tanto  indispensable,  que  se  tenga  la  mayor  cantidad  de  conocimientos posibles   en   relacion   con   la   fisiologia   del   musculo   liso,   porque   los   argumentos farmacologicos  para combatir la hiperactividad vesical,  estaran basados  estrictamente, en  aspectos   fisiologicos,   que  haran   mas   exitosa  la  terapeutica   de   dicha  entidad hiperactiva, que en ocasiones resulta sumamente dificil combatir (Fry 1997, Zimmerm y col. 1996)

Murakuno  en  el  año  1995,  describio  a  traves  de  microscopia  electronica,  la disposicion  tridimensional  de  las  fibras  colagenas  y  elasticas  en  la  vejiga  urinaria, dispuestas entre los fasciculos musculares.

Esta disposicion asegura las propiedades viscoelasticas de la vejiga, que facilita

la estabilidad vesical con llenamiento a baja presion.

Hay filamentos delgados, intermedios o gruesos dentro de la celula muscular lisa, con  responsabilidad  tanto  en  la  contraccion  celular,  como  en  el  mantener  una  forma definida de dicha celula.

Los  filamentos  gruesos,  contienen  miosina,  los  filamentos  delgados,  contienen

actina,  tropomiosina  y  caldesmon.    Los  filamentos  intermedios,  contienen  desmina, entramado  citoesqueletico  rigido,  que  tambien  ayuda  a  mantener  la  forma  celular  y ayuda a distribuir las fuerzas contractiles.

Es indispensable, para el que quiera adentrarse en este mundo de la fisiologia del

musculo liso vesical, conocer los trabajos que han sido considerados piedras angulares del avance de dicho tema, asi tenemos a Elbadawi, desarrollando nuevas teorias de la inervacion  del  sistema  urinario  inferior,  a  Burnstock  desarrollando  las  teorias  de  la inervacion  purinergica  (no-adrenergica,   no-colinergica)  y   de  la  presencia  de  otros neurotransmisores   (cotransmisores),   a   Cowan   profundizando   en  las   causas   de  la hiperactividad vesical  en  las  mujeres  y  su relacion con  la  presencia  de  inervacion no-


adrenergica, no-colinergica.

En la reciente reunion de la AUA en Dallas-1999 Pezzone,  Fraser, van Bibberm, Chancellor y de Groat, de la Universidad de Pittsburgh, mencionaron por primera vez en el  mundo  de  la  urologia  la  presencia  de  celulas  "marcapasos"  en  el  sistema  urinario, parecidas   a  las  celulas  intersticiales   descritas   por  Ramon  y   Cajal  en  el  sistema gastrointestinal, lo cual en caso de tener celulas hiperactivas podrian responsabilizarse tanto  de  episodios  de  incontinencia  urinaria,  como  de  inestabilidad  uretral.   Esto  esta bajo intensa investigacion, para determinar sus alcances.

En  relacion  con  la  inervacion  y  control  neurologico  del  sistema  urinario  inferior vemos  como  Elbadawi  publica  en  1974  y  en  1982  sus  aportes  al  respecto,  donde explica    que    la    inervacion    muscular    del    sistema    urinario    inferior,    se    deriva exclusivamente   de   neuronas   posganglionares,   lo   que   denomina   como   "Sistema neuronal corto urogenital".  Esto debido al hecho de que existe una distancia muy corta, entre los ganglios perifericos y el organo final a ser inervado, en este caso la vejiga, en ocasiones dicha distancia se acorta al punto que los ganglios pueden estar no solo muy cerca, sino adyacentes o incluso en el espesor de dicho organo diana (vejiga).

Refiere Elbadawi, que dichos ganglios estan constituidos por tres tipos de celulas: neuronas    colinergicas    principales,    neuronas    adrenergicas    principales    y    celulas pequeñas   intensamente   fluorescentes   (SIF),   estas   ultimas   con   una   funcion   muy importante  en  la  neuro-modulacion  de  la  funcion  vasomotora  interganglionar  y  en  la transmision  ganglionar.    Uno  de  los  conceptos  mas  importantes  que  se  esgrimen  en estos   trabajos   de   Elbadawi,   es   que   las   vias   aferentes   autonomicas   podrian interconectarse,  no solo  con  el  organo  efector  (organo  diana),  sino con otros  ganglios del   mismo   sistema   o   efectuar   sinapsis   sensitivas   infraespinales,   con   el   sistema urogenital  corto  o  a  nivel  de  ganglios  centrales  para  formar  un  circuito  neurologico "organo-ganglio-organo"  que  funcione  e  interactue,  totalmente  inde-pendiente  de  la medula espinal.

 

 

Proteinas contractlles del musculo llso

La miosina contiene 2 cadenas  alfa-helicoidales  de cadena pesada (MHCs), que contienen AlP (adenosin trifosfato), sitios moleculares de union a la actina, y dos pares de cadenas livianas (MLCs).

La  actina  y  la  miosina,  interactuan  para  ocasionar  la  contraccion  de  la  celula

muscular lisa.   La miosina,  actua como una AlPasa.   Cuando la  miosina se une a un filamento  de  actina,  el  adenosin  difosfato,  es  desprendido  de  manera  rapida  de  la miosina, la cual estara libre para unirse a otro AlP y comenzar el ciclo de nuevo.

La   energia   quimica   es   transformada   en   energia   mecanica,   resultando   en

acortamiento celular y por supuesto en contraccion celular muscular lisa.

Hay una caracteristica que debemos señalar y es que la celula muscular lisa esta preparada  para  mantener  una  contraccion  suave  y  por  mas  tiempo,  que  la  celula muscular estriada, consumiendo menos AlP (5 a 10 veces menos).  Esta caracteristica es  muy  importante  para  mantener  la  salida  vesical  ocluida,  a  traves  de  contraccion


muscular, durante la fase de almacenamiento urinario vesical.

Para   comenzar   la   secuencia   de   la   contraccion   celular,   es   importante   la fosforilacion de la  miosina,  al ser activada la kinasa de la cadena ligera de la  miosina (MLCK).

El  Ca++   y  los  niveles  de  fosforilacion  de  la  miosina,  caen  a  pesar  de  que  se

mantiene la fuerza de la contraccion (efecto cerrojo).   Por tanto,  se supone, que debe haber un segundo sitio regulatorio con una mayor sensibilidad al Ca++, que la activacion de MLCK por el Ca++  calmodulin.

El  rol  del  calcio  en  la  celula  muscular  lisa,  es  mas  complejo  que  en  la  celula muscular  estriada,  porque  tiene  numerosos  sitios  de  entrada  a  la  celula  y  participa  el reticulo sarcomerico.

Debido a que el tono del musculo liso vesical, esta relacionado con los potenciales de accion generados,  medicamentos  como los  bloqueadores  de los canales  de calcio, asi  como  los  abridores  de  los  canales  de  potasio,  podrian  ser  usados  para  producir relajacion del musculo detrusor y por tanto podrian ser utilizados en los casos clinicos de hiperactividad vesical.

Por otro lado, se han identificado peptidos como mediadores de la regulacion del tono en organos que contienen musculatura lisa y se esta poniendo mucho enfasis en la inervacion no adrenergica no colinergica (NANC) contenida dentro del sistema urinario.

Peptidos  como  ET1,  VIP,  SP,  han  sido  identificados  por  grupos  de  trabajo  muy importantes, como moduladores de la contractilidad del musculo detrusor.

Por tanto la estimulacion o inhibicion de los receptores peptidicos del musculo liso del detrusor podria ser una de las maneras de actuar sobre la contractilidad de la vejiga urinaria.

El  comienzo  en  la  generacion  de  la  fuerza  contractil  de  la  celula  muscular  lisa,

esta claramente unido a la fosforilacion de la MLC, miosina dependiente del Ca++, con la subsecuente activacion de otros puentes interrelacionados (Hypolite y col. 1998).

Siroky y col. de Boston en la reunion de Dallas-1999 publicaron un trabajo acerca delos  productos  de la ciclooxigenasa (COX) que  son los  eicosanoides  y  los  productos de  la  lipooxigenasa  (LOX)  que  son  los   leukotrienes  los  cuales  interfieren  con  la contractilidad  del  musculo  liso  vesical.   La  isquemia  cronica  lleva  a  hiperactividad  del musculo  liso  y  en  su  mecanismo  estarian  involucrados  cambios  en  el  ciclo  de  los productos de la lipooxigenasa (LOX), los leukotrienes.

 

 

La  hiperactividad  vesical,  se  producira  cuando  en  la  fisiologia  celular  del musculo   detrusor,   exista   hipoxia   celular   y   aparezca   un   sistema   excitatorio adicional.

 

 

Existen  hipotesis,  sustentadas  por  investigadores  de  la  talla  del  Dr.  Alan  Wein, que ha publicado recientemente, variaciones regionales en la composicion de isoformas de miosina y  en la fosforilacion de las  cadenas ligeras en el tono vesical en reposo, y han llegado a la conclusion de que la presencia de miosina no insertada y el bajo nivel


de fosforilación de  MLC (miosina  de cadenas  ligeras)  en las  celulas  musculares  lisas, podrian  contribuir  por  su  acción  sobre  los  puentes  de  miosina,  al  mantenimiento  del estado de contracción del detrusor, durante la fase de llenamiento vesical.

 

 

Neurotransmisores·Cotransmisores·lnervacion    no    adrenerqica·no    colinerqica

(NANC)

Los  neurotransmisores  autonómicos  que  todos  conocemos  son  la  acetilcolina (Ach)  y  la  noradrenalina,  pero  estudios  de  investigación  llevados  a  cabo  por  los  mas importantes grupos  de investigación del mundo entero, han llegado a la conclusión de que  hay  otros  neuro-transmisores  que  podrian estar presentes  en  el sistema  nervioso autónomo.

Burnstock  y  col.  (1964  y  1978)  y  Cowan  y  col.  (1983),  publican  trabajos  de investigación que han sido pieza fundamental en el desarrollo de terminos como el de los cotransmisores y de los mecanismos de transmisión neuromodulados, que incluyen la inhibición o facilitación presinaptica de la secreción de determinado neurotransmisor, la  modulación  possinaptica  de la  acción de dicho neurotransmisor y  en tercer lugar  el papel que juegan determinadas hormonas y prosta-glandinas sintetizadas localmente.

El  rol  de  los   cotransmisores   esta  siendo  investigado   profundamente  y   esta redimensionandose en los estados patológicos de hiperactividad vesical y cambiara sin duda alguna la terapeutica de los estados de hiperactividad vesical.

Los  cotransmisores  pueden  secretarse  junto  a  un  neurotransmisor  clasico,  en

respuesta  a  un  estimulo  nervioso  y   podrian  interactuar  a  nivel  de  los   diferentes receptores autonómicos conocidos, antes de obtener una respuesta funcional.

Las  tres  funciones  conocidas  de  los  cotransmisores  son:  la acción  directa  sobre las celulas possinapticas, la facilitación de los neurotransmisores clasicos (acetilcolina- noradrenalina), y la inhibición de los neurotrasmisores clasicos.

Existe   una   amplia   variedad   de   neurotransmisores   nuevos   que   se   estan investigando como por ejemplo: el peptido intestinal vasoactivo (VIP), la sustancia P, las prostaglandinas,  la  5  hidroxitriptamina,  la  histamina  H1,  los  opiodes  endógenos,  la galanina,  los  receptores  GABA,  y  el  neuropeptido  Y  (NPY),  con  acciones  directas  y muchas veces bastante potentes sobre la musculatura lisa vesical y uretral.

De hecho la galanina actua a nivel de  mecanismos presinapticos sobre la vejiga urinaria  e  influenciara  el  mecanismo  contractil  vesical  al  modular  la  secreción  de acetilcolina (Ach) durante el estimulo neurológico.

Los neurotransmisores inhibitorios son:

a.   Aminoacidos inhibitorios (GABA, glicina). b.   5-hidroxitriptamina (serotonina).

c.   Dopamina.

d.   Peptidos opioides (encefalinas).

e.   Peptidos    no-opioides    (CRF)    o    factores    de    liberación    de    corticotropina, neuropeptido Y, motilina.

f.   Acetilcolina.


g.   CGRP-calcitonin gene related peptide.

 

 

Todos  estos  neurotransmisores  inhibitorios  "inhiben"  el  reflejo  miccional  al  tener acciones sobre el SNC directamente.   Es decir tienen un efecto inhibitorio tonico sobre el  centro  micccional  del  tallo  cerebral,  regulando  la  capacidad  vesical,  es  decir  la distensibilidad-compliance  vesical.   Ademas  tienen  tambien  un  efecto  inhibitorio  en  la medula  espinal,  como  es  el  caso  de  los  peptidos  opioides  como  la  encefalina  y  el GABA.

La 5-hidroxitriptamina es decir la serotonina estara presente en los nucleos de las terminaciones medulares autonomicas lumbosacras y tendran su actividad en la fase de almacenamiento   vesical   se   produ-cira   activacion   de   la   vias   simpaticas,   y   del rabdoesfinter e inhibiendo las vias parasimpaticas (de Groat, 1997).

El  neuropeptido  Y  se  consigue  en  neuronas  adrenergicas  y  colinergicas.   Tiene actividad motora la cual esta bajo intensa investigacion.

Los neurotransmisores excitatorios son:

a.   Neuropeptidos (sustancia P y el VIP-polipeptido intestinal vasoactivo). b.   Acido glutamico.

c.   Acetilcolina.

d.   Norepinefrina. e.   Oxido nitrico.

En  un  articulo  de  de  Groat  y  col.  (1993),  se  demuestra  la  gran  variedad  de

neurotransmisores que regulan la transmision de impulsos excitatorios e inhibitorios que pasan por el centro miccional del tallo cerebral y por las vias descendentes limbicas de los reflejos mic-cionales.

De  especial  interes  es  el  acido  glutamico,  el  cual  esta  considerado  el  mas

importante  neurotransmisor  excitatorio  del  SNC,  y  tiene  un  rol  fundamental  en  los reflejos vesicales y uretrales y en el procesamiento de los impulsos aferentes que llegan a  la  vejiga  urinaria.    De  hecho  los  receptores  glutamatergicos  NMDA  (N-methyl-D- aspartate) y no-NMDA se les ha encontrado una funcion importante en el enlace de los impulsos  nerviosos  entre los centros  miccionales  cerebrales  (limbicos, tallo cerebral) y las neuronas preganglionares medulares.

La sustancia  P y  el  VIP (polipetido vasoactivo intestinal),  son neuropeptidos  que se   consiguen   en   las   vias   aferentes   vesicales,   que   modulan   el   reflejo   miccional, disminuyendo la actividad vesical, por lo cual tienen un rol en la hiperactividad vesical.

El oxido nitrico, lo podemos conseguir en las fibras nerviosas y en las neuronas en los  nucleos  espinales  del  sistema  nervioso  autonomo  y  en  las  interconexiones  de  la medula espinal.   En estudios de investigacion ha suprimido la hiperactividad vesical en animales de experimentacion.

Hay mucha controversia todavia en su relacion con aspectos de la miccion y mas aun  en  su  relacion  con  estados  de  hiperactividad  vesical.    Sin  embargo  no  pasara mucho tiempo, para que tengamos respuestas bastante definitivas.

En   relacion   con   la   inervacion   "no-adrenergica,   no-colinergica"   (NANC),   se


considera un mecanismo que contribuye a la contractilidad vesical y que explica por que hay pacientes que exhiben una resistencia a los farmacos derivados de la atropina.   El neurotransmisor involucrado parece ser  un nucleotido  purina  o un  analogo.    Inclusive este  tipo  de  inervacion  (NANC),  podria  ser  responsable  del  50%  de  la  respuesta contractil  vesical  en  la  poblacion  femenina  lo  que  tambien  podria  explicar  la  mayor prevalencia de la hiperactividad vesical (HV) en las mujeres (Cowan y col. 1983).

En la poblacion masculina esta inervacion purinergica, es decir la no adrenergica, no-colinergica,  se  observaria  solamente  en  presencia  de  determinadas  patologias urologicas que se estan definiendo (Ruggieri 1988).

 

 

En el sistema urinario inferior humano, hay tres tipos de recep-tores autonomicos que son:

1.   Receptores colinergicos muscarinicos

2.   Receptores alfa adrenergicos y beta adrenergicos

3.   Receptores purinergicos

 

 

Receptores collnerqlcos muscarinlcos

Existen varios grupos de receptores muscarinicos:

1.   Receptores muscarinicos tipo M1 (los cuales actuan sobre la secrecion gastrica y sobre la contractilidad cardiaca). Predominan en ganglios y glandulas secretoras.

2.   Receptores muscarinicos tipo M2 (los cuales regulan la contractilidad del musculo

liso).   Predominan  en  el  miocardio  y  en  poca  cantidad  en  el  musculo  liso,  entre ellos el vesical.

3.   Receptores    muscarinicos    tipo    M3    (los    cuales    tambien    actuan    sobre    la contractilidad del  musculo liso vesical).   Predominan  en las  glandulas  secretoras (exocrinas) y en el musculo vesical.

4.   Receptores   muscarinicos   M4,   localizados   principalmente   en   el   pulmon   y   el cerebro.

5.   Receptores muscarinicos M5, los cuales estan bajo estudio.

 

 

La  contraccion  del  musculo  detrusor,  esta  mediada  por  la  estimulacion  de  los receptores muscarinicos por la acetilcolina.

Existen  subpoblaciones  o  subtipos  clonados  de  receptores  muscarinicos,  con

distintas  localizaciones  anatomicas  y  por  supuesto  con  distintas  funciones  (bien  sea como agonistas o antagonistas de la contractilidad vesical).

Se  han  descrito  al  menos  5  subtipos  que  son  m1  -  m2  -  m3  -  m4  -  m5, determinados   geneticamente   y   los   subtipos   m1   -   m2   -   m3   tendran   las   mismas localizaciones  que  los  receptores  M1 -  M2  -  M3,  por lo  que  se  acostumbra colocarlos juntos, es decir M1/m1, M2/m2, y M3/m3.

La   mayoria   de   los   receptores   muscarinicos   en   la   musculatura   lisa   vesical (aproximadamente 80%), son del subtipo M2/m2, sin embargo estudios de investigacion in  vitro  sostienen,  que  la  contraccion  muscular  lisa,  incluyendo  la  vejiga,  podria  estar


mediada por receptores muscarinicos del subtipo M3/m3 (Rovner y Wein 1998).

Todo  lo  mencionado  tendra  repercusiones  en  la  terapia  farma-cologica,  porque existen   farmacos   con   accion   selectiva   diferente   sobre   los   diferentes   subtipos   de receptores muscarinicos.

Lo  que  si  parece  facil  de  imaginar,   es  que  con  base  en  esta  complejidad

mencionada  anteriormente,  la  regulacion  neurologica  vesical  se  hace  bastante  dificil. Seran necesarios muchos estudios de investigacion, para conocer a cabalidad cada tipo y  subtipo  de  receptor  muscarinico  y  su  papel  definitivo  en  la  contractilidad  vesical humana.

La activacion de estos  receptores,  originara o bien inhibicion de la secrecion de acetilcolina,  en  el caso  de los  receptores  M2/m2,  o  bien  en  el  caso  de los  receptores M1/m1,  facilitan  la  liberacion  de  dicha  acetilcolina.  El  antagonismo  de  los  receptores muscarinicos  M1/m1,  podria  contribuir  a la inhibicion vesical  y  por  ende a  combatir  la hiperactividad vesical, esto debera ser definido en los proximos años.

La  actividad  de  los  receptores  muscarinicos  es  de  indole  cambiante  (dinamica), porque estara sujeta a cambios en relacion directa con el micro y macro ambiente que los  rodea,  es  decir  factores  neurologicos,  factor  de  una  salida  vesical  expedita  u obstructiva, factor relacionado con la ancianidad, factores relacionados a enfermedades con afectacion secundaria de la vejiga urinaria, y factores relacionados a cambios de la microestructura del detrusor por tratamientos recibidos (tipo quimioterapia o radioterapia o cirugias endovesicales).

Los tipos y subtipos  de receptores  muscarinicos  han sido y seran, el objetivo de mayor importancia, a tomar en cuenta, por las  grandes  industrias farmaceuticas,  en la obtencion de medicamentos que combatan la hiperactividad vesical, entidad nosologica, en  continuo  auge,  tanto  por  su  mejor  entendimiento,  como  por  su  amplia  gama  de presentacion.

 

 

Receptores adrenerqlcos

La presencia de la inervacion simpatica en el cuerpo del musculo detrusor vesical, es  bastante  limitada.    El  hecho  de  que  la  noradrenalina  inhiba  la  funcion  vesical,  al bloquear  la  transmision  ganglionar  parasimpatica,  ayudara  a  que  la  vejiga  tenga  la relajacion  apropiada  durante  la  fase  de  almacenamiento  urinario  vesical,  aspecto  de gran ayuda en los enfoques terapeuticos  de pacientes  con hiperactividad vesical,  bien sea  de  origen  neurologico,  (hiperreflexia),  o  de  origen  no  neurologico  (inestabilidad  o hiperactividad vesical).

Los   receptores   adrenergicos   predominantes   en   la   vejiga   urinaria   son   los receptores  alfa  1,  ubicados  principalmente como  subtipos  alfa  1a,  en el fondo vesical, en el trigono vesical, y en la base vesical.   Se piensa que posiblemente sea el subtipo alfa 1L, el responsable de ser-vir de mediador, en las respuestas contractiles (Malloy y col. 1998).

Contrario a lo que sucede en el cuerpo del detrusor, tendremos una abundante inervacion  simpatica,  en  la  base  vesical,  en  la  prostata  y  en  la  uretra  prostatica,  que


tendran una importancia fundamental en la fase de almacenamiento vesical, de hecho es   una   fase   simpatica,   porque   a   traves   de   receptores   mecanicos-sensitivos   de distension de las paredes vesicales y de una estimulacion simpatica =estimulacion de los receptores alfa y beta adrenergicos= ocasionaran una relajacion del cuerpo vesical y  el cierre  del  cuello vesical y  contraccion  del  mecanismo  esfinteriano  uretral  externo, con lo que se lograra la continencia urinaria y el almacenamiento de orina en la vejiga.

Se  piensa  que  en  la  hiperactividad  vesical,  hay  una  perdida  de  la  respuesta inhibitoria de los receptores beta-adrenergicos, mediada por la noradrenalina.

 

 

Prostanoides

La mucosa vesical sintetiza eicosanoides, al igual que el musculo detrusor vesical y  ambos,  secretan  eicosanoides,  en  respuesta  a  un  estimulo  determinado,  como  por ejemplo, el simple estiramiento del musculo liso vesical, en respuesta a daños sobre la mucosa  vesical,  de cualquier  naturaleza,  por  estimulacion nerviosa  y  por  respuesta  al AlP y a sustancias mediadoras de la inflamacion (Siroky y col. 1999).

Los prostanoides, pueden servir de vinculo entre el estiramiento de la musculatura lisa  vesical,  producido  normalmente  por  el  llenado  vesical,  y  la  activacion  de  las  vias aferentes "capsaicina-sensibles" producto tambien de la distension vesical.

En  un trabajo  aparecido  en  el  AUA  Meeting  de  San  Diego  1998,  Azadzoi y  col.,

mencionan  a los  isoprostanos  contenidos  en la  orina,  como  potentes  constrictores  del musculo liso del detrusor vesical.

Los isoprostanos son prostaglandinas, productos finales de la peroxidacion de los lipidos. Los  niveles  de isoprostanos  urinarios, aumentan con la edad, con el habito de fumar cigarrillos, con la diabetes y con las enfermedades cardiovasculares.

Los  isoprostanos  son  conocidos  mundialmente,  como  marcadores  del  estres oxidativo   en   el   cuerpo   humano,   y   son   de   gran   importancia   en   la   fisiologia   y fisiopatologia vesical.

Por  lo  antes  mencionado,  se  postula  que la inhibicion de los  mecanismos  arriba

mencionados, podrian en teoria, mejorar los estados de hiperactividad vesical.

 

 

Taquiquininas y receptores vanilloides

La secrecion de taquiquininas locales como la sustancia P, la neurokinina A y  la neurokinina  B,  asi  como  otras  sustancias  peptidicas,  por  las  terminaciones  nerviosas ubicadas en el espesor de las paredes vesicales, producen efectos biologicos variados, entre  otros,  el  de  contraccion  de  la  fibra  muscular  lisa  vesical,  facilitan  ademas  la secrecion  de  neurotransmisores,   producen  efectos   vasodilatadores   y   aumentan  la permeabilidad plasmatica que produce un medio fisiologico adecuado para la obtencion de una excelente transmision y percepcion neurologica.

Las   acciones   de   las   taquiquininas,   esta   mediada   por   la   activacion   de   tres receptores   denominados   NK-1,   NK-2   y   NK-3.     El   receptor   NK-2,   parece   ser   el


responsable   de   servir   como   mediador   de   las   res-puestas   contractiles   de   las taquiquininas, en el musculo liso vesical.

Debemos  recordar  que  la  sensacion  de  llenado  vesical  y  todos  los  eventos  que conducen  a una  miccion  refleja,  son causados  por la  activacion  de  receptores  de  tipo mecanico que se encuentran en la pared vesical.

La   sensibilidad   nociceptiva   es   conducida   neurologicamente   por   fibras   no

mielinizadas  conocidas  con  el  nombre  de  Fibras  C.    Estas  son  neuronas  aferentes sensoriales que contienen neuropeptidos, tales como un peptido relacionado al gene de la  calcitonina  y  la  sustancia  P,  las  cuales  actuan  de  mediadores,  en  una  gama  muy amplia   de   respuestas   fisiologicas,   que   incluyen  el   dolor,   la  termoregulacion  y   la inflamacion neurogenica.

La sustancia P, es un decapeptido que se consigue en el intestino y en el cerebro, y  tambien  en  la  vejiga  urinaria,  donde  causa  contraccion  vesical  en  animales  de experimentacion que son atropina resistentes.   Pero es  un mediador de contracciones no colinergicas.

Aqui entra en accion la capsaicina, la cual es un constituyente de la pimienta roja, que actua depletando de sustancia P y otros peptidos de nervios aferentes, deprimiendo el  reflejo  contractil  y  estimulando  las  fibras  C;  pero  en  altas  concentraciones  y  por tiempo prolongado, las desensibiliza.  La mencionaremos en el capitulo del tratamiento de las vejigas hiperactivas.

Tanto  la  capsaicina,  como  la  resiniferatoxina  (RTX),  analogo  ultrapotente  de  la capsaicina, actuan a traves de los receptores vanilloides sobre las neuronas sensitivas.

Ella  actua  sobre  los  receptores  vanilloides,  originando  una  disminucion  de  la sensibilidad  de  las  fibras  C  sensitivas  aferentes.    Esto  ocasiona  un  bloqueo  de  la secrecion   de   los   neurotransmisores,   suprimiendo   por   tanto,   la   actividad   neuronal sensorial (Biro y col. 1997, 1998).

Maggi y col. (1989) publicaron las evidencias cistometricas que demuestran que la capsaicina  intravesical,  modula  las  respuestas  re-flejas  miccionales  en  pacientes  con desordenes   de   hipersensibilidad,   que   en   aquel   entonces,   no   se   denominaba hiperactividad vesical.

Si  las  taquiquininas  producen  hiperactividad  vesical,  el  tratar  de  bloquear  o antagonizar los receptores NK, con medicamentos especificos para ello, podria ser una manera novedosa y eficaz de tratar dicho sindrome.

De   hecho   para   finalizar   mencionare   que   es   probable   que   existan   muchas

subclases  de  receptores  vanilloides  de  alta  afinidad  que  podrian  mediar  la  respuesta vanilloide.

Esto  sin  duda  alguna  tendra  repercusiones  importantisimas  en  el  campo  de  la

terapeutica de las vejigas hiperactivas (Szallasi 1996).

 

 

Fibras nerviosas aferentes vesicales

Las  fibras   nerviosas   perifericas  difieren  unas   de  otras,   depen-diendo  de  su velocidad de conduccion y de la funcion para la cual fueron creadas.


Son clasificadas como grupo A,  B,  C basado en su diametro,  en la velocidad de conducción del impulso nervioso y en su función.

Lo mencionaremos de una manera esquematica.

 

 

Fibras A alfa, Fibras A beta = gran diametro y de una vaina de mielina gruesa, son las mas rapidas en la conducción del impulso nervioso (15 a 130 m/seg).

Las  Fibras  A  alfa  tiene  función  motora  y  las  Fibras  A  beta,  tienen  función sensitiva (toque, presión).

Fibras  A  delta  =  son  de  diametro  regular,  mielinizadas  finamente  y  de  conducción

nerviosa  mediana.    Su  función  es  mixta,  es  decir,  sensitiva,  para  el  dolor agudo, para la temperatura y para la función motora.   Estan localizadas en el musculo liso y se activan en respuesta a la distensión de la pared vesical.

Fibras B =  regular diametro, conducción nerviosa mediana (3 a 15 m/seg) y ligeramente

mielinizadas   y   su   función   esta   ubicada   en   las   fibras   autonómicas preganglionares.

Fibras C =       tienen  el  diametro  mas  pequeno,  no  son  mielinizadas  y  conducen  el impulso  nervioso  lentamente.   Sus  funciones  son sensitivas  (para  el  dolor) para   las   respuestas   reflejas,   responden   al   estiramiento   de   la   mucosa vesical, por ende se consideran sensibles al volumen-llenado vesical.  Otras fibras   C   descritas,   son   insensibles   a   la   distensión   vesical   normal, denominada  aferentes  silentes.   Otras  responden al frio y  por ultimo,  otras son   sensibles   a   la   sobredistensión   vesical   (receptores   de   sensibilidad nociceptiva).


 

 

 

Capitulo V

Caracteristicas microestructurales del musculo detrusor

 

 

 

El  año  1991,   Elbadawi,   publica  su  trabajo  "Bases   micro-estructurales   de  la contractilidad del detrusor.   El enfoque MIN para su entendimiento y estudio", y desde entonces, se ha dado un gran avance en el entendimiento de los procesos patologicos, que afectan de manera temporal o permanente al musculo detrusor de la vejiga urinaria, y con ello, se ha avanzado enormemente en el enfoque terapeutico de los mismos, para beneficio de todos nuestros pacientes.

No  habra  la  menor  duda  de  considerar  este  trabajo,  como  la  piedra  angular  del entendimiento  de  los  cambios  estructurales  vesicales  en  pacientes  con  problemas  de vaciamiento  urinario  -es  decir,  con  salidas  vesicales  obstructivas-,  bien  sea  por causas anatomicas o por causas funcionales.

Su entendimiento fue y sera trascendental en los campos de la investigacion, de la terapeutica   y   del   pronostico   de   los   casos   urologicos   con   trastornos   obstructivos infravesicales.

 

 

"Conocer  a  fondo  la  estructura  de  un  6rgano  determinado,  sera  la  clave, para poder entender todos los fenómenos que suceden en su funcionamiento, sea este normal o patológico" (Elbadawi).

 

 

La  microscopia  electronica,  ha  permitido  conocer  a  fondo  lo  que  significa  el "concepto  MIN",  que  no  es  otra  cosa  que  el  acronimo  que  traduce  musculo  liso, intersticio  y  nervios  intrinsecos.     Representan  los  tres  constituyentes  tisulares  del musculo detrusor, los cuales estan intimamente integrados.

El funcionamiento normal del musculo detrusor, depende no solo de aspectos de tipo   general   como   por   ejemplo   la   topografia   anatomica,   sino   que   dependera fundamentalmente,     de     la     integridad     funcional     de     los     tres     constituyentes microestructurales   antes   men-cionados,   no   solo   para   la   fase   de   almacenamiento urinario, que en cierta manera, es la que nos atañe principalmente en esta revision, sino tambien   en   la   fase   del   vaciamiento   urinario   (fase   miccional).   Esto   se   denomina correlacion funcional/estructural o "morfologia funcional".

Por  otro  lado  las  anormalidades  en  la  fase  de  almacenamiento,  o  en  la  fase  de vaciamiento, sera denominado "patologia funcional" del detrusor.

Hemos   dicho   que   en   un   sentido   general,   para   que   el   detrusor   exhiba   un funcionamiento  adecuado,  debera  tener  estabilidad,  distensibilidad  o  compliance  y ademas contractilidad adecuada.

Todos  ellos seran  modulados y  conducidos  por uno o  mas  de los constituyentes

microestructurales   (MIN).      Cada   uno   de   ellos   tendra   una   funcion   especifica   y


determinada, en las fases de la funcion vesical (llenamiento y/o vaciamiento).

 

 

Estabilidad del detrusor y concepto MIN

La estabilidad se logra por efecto inhibitorio de las celulas musculares, durante la fase  de  almacenamiento  vesical,  y  por  propiedades  intrinsecas  de  la  celula  muscular (componente N del MIN).

Las  vias  neurologicas  involucradas  en  mantener  la  estabilidad  vesical  son  las cefaloespinales  y  las  vias  ganglionares,  asi  como  sinapsis  axo-axonales,  dentro  del propio musculo detrusor.

Serviran de moduladores, al producir inhibicion alfa-2 adre-nergica, de los axones

colinergicos, en las uniones neuroefectoras que tienen con las celulas musculares.

 

 

Distensibilidad del detrusor y concepto MIN

La distensibilidad,  favorece una compliance vesical normal,  la cual resulta en un llenado vesical con un aumento minimo de las presiones intravesicales.

La distensibilidad, depende de la proporcion de celulas musculares en el intersticio vesical,  y  del  contenido  relativo  de  fibras  colagenas  (componente  rigido)  y  de  fibras elasticas   (componente   flexible   y   estirable),   ambos   componentes   del      intersticio (componente I del MIN).

En  un  excelente  trabajo  de  investigacion  de  Deveaud  y  col.  (1998)  sobre  el analisis  molecular  de  tejido  colageno  en  la  fibrosis  vesical,   revela  que  la  fibrosis  del tejido vesical se caracteriza por la presencia de tejido conjuntivo dentro de las diferentes capas de la pared vesical, dando al final como resultado una vejiga de bajo volumen, de alta presion vesical, de bajo compliance o distensibilidad, que podria inclusive llegar a afectar el funcionalismo renal.

Esto  podria  ser  ocasionado  por  patologias  neurologicas,  tipo  mielodisplasia  o traumatismos  de  la  medula  espinal  o  siguiendo  a  causas  no  neurologicas  como  la obstruccion   infravesical,   por   problemas   de   obstruccion   prostatica,   o   posterior   a radioterapia,   la   cual   usualmente   por   si   sola   es   causa   de   disminucion   de   la distensibilidad  vesical  y  mas  aun  si  esta   acompañada  de  cirugia.   Tambien  veremos afectacion  de  la  distensibilidad,  posterior  a  quimioterapia,  o  a  la  presencia  de  cistitis intersticial,  o  a  enfermedades  de  tipo  infecciosas,  como  la  eschistosomiasis,  o  la tuberculosis.

La  denominada  cistitis  quimica,  es  producida  por  agentes  quimioterapeuticos administrados  tanto  por via  endovenosa como  por via intravesical,  para  el tratamiento del    cancer    de    celulas    transicionales    de    vejiga,    entre    ellos    estan    el    BeG inmunoterapeutico,  la  doxorubicina,  la thiotepa,  la  mitomycina,  y  la ciclofosfamida.   La incidencia de cistitis quimica es muy variable y va del 5% al 90%.  La cistitis ocasionada por ciclofosfamida puede llegar hasta un 40% de incidencia.

Los resultados del trabajo de Deveaud y col. concluyen que la infiltracion de tejido conjuntivo    dentro    de    los    haces    musculares    lisos    de    la    vejiga    urinaria    son especificamente de tejido colageno tipo III.


Por tanto hay una relacion directa entre el aumento cuantitativo de colageno tipo III  dentro  de  la  estructura  del  musculo  detrusor  y  la  alteracion  de  las  propiedades viscoelasticas  de  la  vejiga  y  por  tanto  afectacion  de  la  distensibilidad  o  compliance vesical, aspecto este, muy importante en la posible aparicion de hiperactividad vesical.

La distensibilidad o compliance vesical puede alterarse por cualquier factor que modifique la viscoelasticidad  de los  constituyentes  del  musculo  detrusor vesical,  o  por un  llenamiento  vesical  demasiado  rapido,  que  exceda  las  posibilidades  de  "relajacion por tension", que vemos en la vejiga en las fases intermedias de la distension vesical, cuando la vejiga se llena por arriba de su nivel permitido de distensibilidad y por factores neurologicos  que  modifiquen  el  comportamiento  del  musculo  liso  a  la  distension  y llenamiento vesical (Wein).

 

 

Contractilidad del detrusor y concepto MIN

La contractilidad  normal  del  musculo  detrusor,  depende de la transmision  de los impulsos  nerviosos,  hacia  la  celula  muscular  para  contraerse  subitamente  y  ademas depende del mecanismo excitacion-contraccion de la celula muscular.

Solo una pequeña parte de la musculatura vesical, cuenta con inervacion, capaz

de estimularse neurologicamente, por lo cual es facil imaginar que para que la vejiga se contraiga,  necesita  una  contraccion  lo  suficientemente  fuerte,  rapida  y  sostenida,  que pueda ser capaz de iniciar una miccion y que ademas pueda transmitirse, de las celulas musculares  inervadas  a  la  poblacion  celular  no  inervada  y  que  haya  coordinacion  del grupo  de  celulas  musculares  inervadas  en  toda  la  extension  del  musculo  detrusor (componente  N y  M del MIN).

 

 

Estructuras neurológicas del detrusor y concepto MIN

Los  plexos  neurologicos  intrinsecos  colinergicos  y  sus  uniones  neuroefectoras, obtienen una accion excitatoria neurologica sobre el  musculo liso del detrusor,  de tipo parasimpatica.

Para  una  excelente  transmision  nerviosa  de  los  axones  a  la  celula  muscular  se

requiere,  que tanto  ellos  como  las  uniones  neuro-efectoras,  esten  en  perfecto  estado, con  abundantes  vesiculas  sinapticas  y  con  hendiduras  anchas  entre  los  axones  y  las celulas musculares inervadas.

Las  alteraciones  de  estas  estructuras  arriba  mencionadas  impiden  la  respuesta

satisfactoria de las celulas musculares y mas aun ocasionan respuestas no adecuadas, y fuera de control (Hald y Bradley 1982).

 

 

Estructuras musculares del detrusor y concepto MIN

Los factores relacionados con la estructura de las celulas musculares, que tienen un papel fundamental en el complejo mecanismo "excitacion-contraccion" son:

a.   Los  miofilamentos  tienen  que  tener  una  organizacion  y  dispo-sicion  adecuadas, para  que  las  proteinas  actina  y  miosina,  involucradas  en  el  proceso  contractil, aseguren que la celula muscular tenga una "fuerza contractil" efectiva.


 

b.   La presencia de mitocondrias sanas, aseguran que la energia celular proveniente del   ATP,   pueda  ser   mantenida  por  una   normal  secuencia   enzimatica,   pero deberemos contar con un  reticulo endoplasmico sano, para que pueda almacenar

suficiente Ca++, que junto al ATP, son esenciales para la normal contraccion de la

celula muscular lisa del musculo detrusor vesical.

 

 

c.   Un sarcolema  normal,  con sus  bandas  de  miofilamentos  a  manera  de soporte  o anclaje, facilita que la "fuerza contractil" alcance a toda la superficie celular. Ademas en esta zona se encuentran las vesiculas sinapticas, donde posiblemente

se  efectua,  tanto  el  transporte  de  los  iones  activos,  Na+,  K+,  Ca++,  como  el

intercambio  Na-  Ca++,  ambos  procesos  funda-mentales  en  el fenomeno  de  la

"excitacion-contraccion" de la celula muscular.

 

 

Requisitos del detrusor para lograr una contraccion efectiva

Por  la  estructura  y  organizacion  geometrica  muscular  del  detrusor,  se  lograra  la transmision normal de la contraccion de una celula a otra, inclusive a distancia.

Para  ello  es  indispensable,  que  la  celula  contractil  muscular  pueda  "acortarse- encogerse", con lo cual estaria provocando una "fuerza contractil" y  la celula contractil muscular debera estar sometida a acoplamiento mecanico con las celulas adyacentes, para poder lograr, la transmision de dicha "fuerza contractil".

Para poder llevar a cabo dicho acortamiento o encogimiento de la celula muscular, esta debera tener una configuracion cilindrica y la orientacion de las miofibrillas, debera tener   una   inclinacion   entre   10   y   15   grados   con   respecto   al   sarcolema,   lo   que garantizara,  que toda la superficie de la celula, reciba la fuerza contractil,  acortandose como punto final.

El  acoplamiento  celular,  se  lograra  al  estar  dichas  celulas  bien  compactas  y alineadas dentro de los fasciculos musculares, con uniones celulares adecuadas, y con el menor espacio posible entre ellas, al no tener tejido colageno en exceso.

La presencia de "minimas tensiones", que se van sumando de una celula a otra y

de  un  grupo  de  celulas  musculares  a  otras,  hacia  los  tabiques  microscopicos  del intersticio   circundante,   alrededor   de   los   fasciculos   musculares,   redundara   en   la contraccion del haz muscular completo (coordinacion contractil).

 

 

Importancia del componente intersticial y el concepto MIN

Antes se creia que el   intersticio, solamente ayudaba a cohesionar los elementos tisulares   del   musculo   detrusor,   y   con   ello   garantizaba   una   "forma   geometrica" caracteristica.

El concepto actual reconoce, que para que el musculo detrusor, tenga una funcion normal  (distensibilidad  y  contractilidad),  se  debera  contar  con  un  tejido  colageno  de cantidad adecuada, de localizacion adecuada, y en forma de red o malla.

Otro  factor  del  componente  intersticial,  es  la  cantidad  de  elastina  que  tiene  el


compartimiento,  lo  cual  sin  duda  alguna  repercutira  sobre  la  distensibilidad  y  sobre  la contractilidad adecuada del musculo de la vejiga urinaria.

 

 

Cambios fisiopatológicos en la microestructura del musculo detrusor hiperactivo

Entre  las  causas  de  la  hiperactividad  vesical,  existen  causas  no  especificas (inestabilidad idiopatica), causas de envejecimiento vesical (tanto en mujeres, como en hombres),   causas   obstructivas   de   la   salida   vesical   (SVO),   llamada   (inestabilidad obstructiva), causas neurologicas que afectan los mecanismos del control vesical (hiper- reflexia  del  detrusor),  deterioro  del  sistema  nervioso  central  (procesos  degenerativos cerebrales) muchas veces producto del envejecimiento y del deterioro microestructural vesical  por  la  senectud  en  si  misma  y  la  hiperactividad  vesical,  que  encontramos paradojicamente,   en   casos   con   contractilidad   vesical   deficiente   (HVCD),   entidad reciente-mente descrita.

No hay duda que para que se produzca una vejiga hiperactiva, deberan sucederse ciertos cambios en la propiedad, la estructura y  la inervacion del musculo detrusor, es decir   deberan   alterarse   las   propiedades   del   miocito   del   detrusor,   como   requisito fundamental, para la produccion de hiperactividad vesical, con la elevacion de la presion intravesical de manera inestable.   Esta explicacion o teoria miogenica es liderizada por Brading (1994), quien refiere que es indispensable la alteracion de las propiedades de la celula muscular lisa, para que se produzca hiperactividad vesical.   Cambiara no solo la actividad muscular espontanea, sino tambien la morfologia del miocito vesical.

La denervacion parcial del musculo detrusor puede ser el responsable de alterar las propiedades del musculo liso, llevando a este, a una excitabilidad y a un aumento de la actividad entre las celulas  musculares, resultando en una contraccion miogenica del musculo detrusor en su totalidad.

Vemos  como  Levin,  del  Albany  College  de  Farmacia,  reciente-mente  publicaron un  trabajo  por  demas  interesante  a  nivel  de  conejos,  donde  estudio  las  alteraciones celulares   que   ocurren   en   cuadros   clinicos   de   disfuncion   vesical   secundarias   a obstruccion parcial de la salida vesical y se consiguio con tres importantes alteraciones celulares que son: disminucion de la densidad nerviosa (denervacion), disminucion de la habilidad  del  reticulo  sarcoplasmatico  para  almacenar  y  eliminar  calcio,  asi  como disfuncion de las mitocondrias. Gormley demostro que la hiperactividad vesical inducida por  obstruccion  de  la  salida  vesical  en  pacientes  mayores  de  70  años  es  dificil  que desaparezca,  luego  de  realizarse  procedimientos  quirurgicos  de  alivio  de  la  salida vesical,  en  contraste  con  el  70%  de  pacientes  que  teniendo  hiperactividad  vesical  y siendo  menores  de 70  años,  una vez  operados,  se les  desaparece la hiperactividad o inestabilidad vesical.

Estos  cuadros  clinicos  de  obstruccion  de  la  salida  vesical  muestran  disminucion de la actividad enzimatica tanto de las mitocondrias como del reticulo sarcoplasmatico. Vemulapalli, Retik y Freeman en el Meeting de la AUA en Dallas 1999, demostraron que

40  cm  de  agua  de  presion,  eran  los  necesarios  para  ocasionar  altera-ciones  tanto

moleculares como celulares en la fibra muscular lisa de la vejiga urinaria.


Stein y col.  mencionan que no hay duda que la obstruccion urinaria ocasiona un dano a la membrana proteica celular de la fibra muscular lisa, debido a la presencia de radicales libres (SERCA= sarcoplasmic endoplasmic reticulum Ca++  Mg++  ATPasa).

Persson y col. en el Meeting de la AUA en Dallas 1999, refieren los efectos de la obstruccion  urinaria  infravesical,  con el estiramiento  mecanico  de  la fibras  musculares lisas  vesicales  y  el  factor  de  crecimiento  PDGF  sobre  la  activacion  de  los  mayores factores de transcripcion de crecimiento controlado que son el AP-1 y el NFxB.   No hay duda que la obstruccion y el estiramiento mecanico causan la formacion de complejos AP-1  ADN  y  el  NFxB/ADN  en  el  control  de  la  hipertrofia  asociada  a  la  activacion genetica.  Esto podria abrir un sin numero de posibilidades a las terapias de modulacion genetica para las vejigas obstruidas y con hipertrofia de sus paredes musculares y por supuesto con disfuncion vesical en relacion a su falla de distensibilidad (hiperactividad vesical).

Park  y  col.  en  el  Meeting  de  la  AUA  en  Dallas  1999,  mencionan  tambien  los efectos  de  la  obstruccion  de  la  salida  vesical,  la  cual  aumenta  la  produccion  de prostaglandinas,  que  juegan  un  papel  importante  en  la  modulacion  de  la  contratilidad vesical,  a  traves  de  las  vias  aferentes  "capsaicina-sensibles",  a  traves  a  su  vez  de  la activacion genetica via COX-2 en el musculo liso de la vejiga.   La curcumina inhibidor AP-1, suprime la expresion COX-2, a raiz del estiramiento de las fibras musculares lisas y  podria  ser  considerada  a  corto  plazo  una  alternativa  terapeutica  en  los  estados  de hiperactividad vesical.

Por  tanto  no  hay  duda  que  las  elevaciones  espontaneas  y  caprichosas  de  la presion  intravesical,  que  se  produce  en  las  vejigas  hiperactivas,  son  miogenicas,  sea cual fuera su etiologia.

Como  ejemplo  de  cambios  microestructurales  del  musculo  detrusor    tenemos

entre  otros,  los  que  se  producen  por  la  vejez  y  que  han  sido  descritos  de  manera admirable por Elbadawi, los cuales mencionaremos a continuacion:

 

 

"Patron     de     dislocacion     ultraestructural"     en     detrusor     hiperactivo,     con contractilidad normal.

Tendremos  reduccion  o  perdida  marcada  de  las  uniones  celulares  intermedias, con  aumento  de  los  espacios  intercelulares  musculares,  y  con  celulas  musculares unidas  por  protrusiones  de  las  uniones,  semejando  un  seudosincicio  o  malla,  con brechas dificiles de distinguir en las zonas de contacto de las uniones y donde no hay incremento   de   fibras   colagenas,   y   donde   los   nervios   intrinsecos,   las   uniones neuroefectoras, y las celulas musculares son normales.

La repercusion clinica de estos cambios debido a las uniones bizarras, que uniran las  celulas  musculares  y  les  dara  a  dichas  celulas  propiedades  funcionales  como  si fueran  de  verdad  una  malla,  ocasionaran  contracciones  involuntarias  del  detrusor, siempre y cuando la propagacion electrica involucre territorios celulares suficientemente grandes.


"Patron  de  deqeneracion"  en  un  detrusor  hiperactivo,  pero  con  contractilidad deficiente  (HVCO)

A  las  caracteristicas  anteriores,  se  les  anaden  hallazgos  como  degeneracion marcada  y  extensa  de  las  celulas   musculares,  caracterizada  por  un  sarcoplasma distorsionado, con vacuolas.

La  degeneracion  muscular  puede  ser  focal  o  generalizada,  con  miofilamentos  y

nucleos   distorsionados,   organelas   desorganizadas   y   un   sarcolema   ramificado   y engrosado.       Hay    degeneracion    de   los    nervios    intrinsecos    del   detrusor,    con degeneracion  y   retraccion   de   las   terminaciones   axonales,   hay   depleccion   de   las vesiculas  simpaticas,  mitocondrias  y  tendremos  dano  estructural  de  los  axolemas,  el axoplasma podria fragmentarse, lisarse, o tener apariencia vacia y con posible perdida de las uniones neuroefectoras.

La repercusion clinica determinada por la degeneracion de las celulas musculares, podria  comprometer  su  capacidad  contractil,  al  no  poder  conseguir  una  contraccion efectiva.

Ademas   la   degeneracion   del   componente   neurologico,   podria   enlentecer,   o inclusive   impedir,   la   transmision   de   los   impulsos   nerviosos   a   nivel   de   la   region neuroefectora, logrando que solo sea una  minima cantidad de celulas  musculares, las que puedan generar una respuesta contractil eficaz por mediacion neurologica.

Esto   ocasiona   una   contraccion   debil,   sin   fuerza,   ineficaz   y   sobre   todo,   no coordinada, pero paradojicamente este paciente  tendra contracciones  involuntarias del musculo  detrusor,  durante  la  fase  de  llenado  vesical  (hiperactividad  o  inestabilidad vesical).

 

 

"Patron de hipertrofia muscular microestructural" en un detrusor hiperactivo, con evidencias objetivas y subjetivas de obstruccion de la salida vesical.

Presenta     abundantes     celulas     musculares     hipertroficas,     con     tamano desproporcionado,  con  terminaciones  acintadas  y  bizarras.    Ademas  presenta  una separacion  amplia  de  las  celulas  musculares  y  de  los  espacios  intercelulares,  que ocasiona perdida de las uniones celulares intermedias.

El   musculo   detrusor   con   este   patron   microestructural,   tiene   tejido   colageno abundante en los  espacios   intercelulares,  asi  como en los  septum  del intersticio y  de manera comparativa, tiene menor cantidad de fibras elasticas.

La repercusion clinica sera producto de la disminucion de la habilidad que tiene el

musculo  detrusor,  para  poder  generar  una  contraccion  miccional  lo  suficientemente energica, como para poder superar la obstruccion de la salida vesical.

Podria  desencadenar  tambien  la  aparicion  de  contracciones  no  inhibidas  del

musculo  detrusor,  a  traves   de  la  propagacion  del  estimulo  contractil,  por  celulas normales e hipertroficas, a traves de las uniones neuroefectoras, con las caracteristicas patologicas arriba mencionadas.

 

 

Mecanismos neuroqenicos de la hiperactividad vesical


Los  aspectos neurogenicos  que ocasionan hiperactividad del  musculo detrusor o hiperactividad vesical los cuales explicaremos en capitulos de este libro, se producen al presentarse  varios  cambios  en  la  vias  neurologicas,  perifericas  o  centrales.    Estos cambios incluyen:

1.   Disminucion de los impulsos inhibitorios centrales o perifericos.

2.   Aumento  de  la  transmision  excitatoria,  en  las  vias  neurologicas  reflejas  de  la miccion.

3.   Aumento de los impulsos aferentes que vienen del sistema urinario inferior.

4.   Presencia   de   reflejos   vesicales   subitos,   que   no   pueden   ser   inhibidos   por mecanimos centrales.

 

 

Por tanto los requisitos para que se produzca hiperactividad vesical son: aumento de  la  actividad  neurologica  aferente  vesical,  presencia  de  una  disminucion  del  control "inhibitorio"  del  sistema  nerviso  central,   o   de   los   ganglios   perifericos,   existira  un aumento  de  la  sensibilidad  del  detrusor  a  la  estimulacion  eferente  y  por  ultimo  habra cambios  en  las  propiedades,  estructura  e  inervacion  del  musculo  detrusor,  lo  cual alterara   las   propiedades   del   musculo   liso   vesical,   conduciendo   a   un   exceso   de excitabilidad y a un incremento de la actividad de conduccion nerviosa entre las celulas, resultando  al  final  en  la  aparicion  de  contracciones  miogenicas  coordinadas  y  no coordinadas del musculo detrusor en su totalidad.

El Dr. William de Groat de la Universidad de Pittsburg, uno de los mas importantes investigadores  en  el  estudio  del  control  neurologico  de  la  miccion,  habla  de  "cambios plasticos", para referirse a los cambios que sufren las fibras sensitivas aferentes del tipo A-delta, convirtiendose en fibras tipo C, cuando el paciente sufre lesiones medulares.

En  el  tema  de  tratamiento  de  la  hiperactividad  vesical,  veremos  como  agentes intravesicales  como  la  capsaicina  y  la  resiniferatoxina,  desorganizaran  los  reflejos contractiles  involuntarios  que  son  provocados  o  facilitados  por  la  fibras  C  aferentes vesicales,  con  lo  cual  se  lograria  el  control  de  dicho  estado  de  hipercontractilidad vesical.

 


 

Capitulo VI

Diagnostico de la hiperactividad vesical

 

 

 

A.         Definicion de detrusor hiperactivo

"Es    aquella   condicion    del    musculo    detrusor,    donde    podemos    demostrar objetivamente,  la  ocurrencia  de  contracciones  del  musculo  detrusor,  provocadas  o espontaneas,  de  una  magnitud  de  mas  de  15  cm  de  agua  de  presion,  ocasionando sintomas  como  urgencia,  frecuencia,  nocturia  e  incontinencia  de  urgencia,  que  se producen durante la fase de llenamiento vesical, mientras el paciente, intenta inhibirlas".

Termino descrito por Bates y col, los cuales hicieron mencion en el año 1970 de la condicion de, hiperactividad vesical.  Desde entonces, se ha entendido cada vez mas, la trascendencia de esta entidad en la practica clinica-urologica diaria.

Hay numerosos investigadores en el campo de la uroneurologia que creen que la definicion antes mencionada, podria dejar de diagnosticar alrededor del 40% al 50% de las  vejigas  hiperactivas,  por  lo  cual  investigadores  de  la  talla  del  Dr.  Alan  Wein  de  la Universidad  de  Pensilvania,  han  sugerido  que  la  hiperactividad  de  la  vejiga  urinaria, podria ser definida con base en los  sintomas, o  al estudio urodinamico.   Se logra con esto,   que   no   solo   los   especialistas   urologicos,   con   facilidades   y   conocimientos urodinamicos,  puedan llegar al diagnos-tico,  sino  que se hace mas  facil inclusive para medicos generales, y de otras especialidades, llegar mas frecuentemente al diagnostico y  mejorar  por  ende,  la  calidad  de  vida  de  dichos  pacientes,  que  de  otra  manera  se hubiera hecho mas dificil su diagnostico, objetivo primordial de toda esta investigacion.

 

Definicion actualizada de hiperactividad vesical

"La   hiperactividad   vesical,   es   una   condicion   caracterizada   por   sintomas   de frecuencia,  nocturia,  urgencia,  incontinencia  de  urgencia,  o  incontinencia  refleja,  los cuales,  pueden  presentarse  individualmente  o  en  conjunto,  pero  no  deben  existir factores patologicos locales, que causen los sintomas antes mencionados".

Dicha  condicion  podria  originarse,  bien  sea  por  causas  neurologicas  (vejiga neurogenica hiperreflexica), o por causas no neurologica (vejiga hiperactiva).

Todo  lo  antes  mencionado  se  deberia  acompañar  de  un  hallazgo  urodinamico caracteristico, como es la presencia de hiperactividad del musculo detrusor y el hallazgo de  disminucion  de  la  compliance-distensibilidad  vesical,  evidenciados  ambos  por  la presencia  de  contracciones  no  inhibidas  del  detrusor,  junto  a  una  baja  capacidad funcional vesical" (Hampel y col. 1997).

Esta  definicion,  sin  duda  alguna,  mejorara  ampliamente  el  diagnostico  de  dicha condicion, y nos alertara sobre la cantidad de entidades nosologicas que provocarian la hiperactividad vesical.

Al definir la condicion de hiperactividad de esta manera,  tendremos  la seguridad

de  que  estara  al  alcance  de  cualquier  medico  en  general  y  que  de  una  u  otra  forma,


ayudara a que estos  pacientes reciban la atencion necesaria,  no queden a la deriva y ademas sin diagnostico.

 

 

B.   ¿Qué  debemos  lograr  con  la  evaluacien  de  pacientes  con  hiperactividad vesical?

Constatar la presencia de contracciones no inhibidas o involuntarias del musculo detrusor (CNI).   Precisar los  aspectos clinicos y  urodinamicos de las contracciones  no inhibidas  del  musculo  detrusor.    Determinar  en  lo  posible  los  factores  etiologicos,  e identificar otras causas tratables de hiperactividad vesical.

 

 

c. Objetivos de la evaluacien de pacientes con hipereactividad vesical

1.   Identificar  y  tratar,  las  etiologias  que  originen  cualquiera  de  los  cuatro  sintomas cardinales  de  la  hiperactividad  vesical,  porque  solo  con  esto,  mejoraremos  la calidad de vida del paciente.

2.   Diagnosticar las enfermedades cronicas debilitantes, porque de esa manera tanto el medico como el paciente, pueden tener las perspectivas y pronosticos correctos de la enfermedad, ajustados a la realidad.

3.   Tratar de definir  el tipo  de sintoma que tiene el  paciente,  es  decir,  de los  cuatro

sintomas cardinales que presentan los pacientes con hiperactividad vesical, definir precisamente cada uno de ellos y jerarquizarlos.

4.   Identificar  todos  aquellos  factores  asociados  de  la  condicion  patologica  vesical,

para poder dar un tratamiento lo mas amplio y completo posible.   Si por ejemplo, el   status   del   piso   pelvico   muscular   es   debil,   sin   tonicidad   adecuada,   nos conllevaria de una vez, a impartir rehabilitacion fisica muscular, cualquiera sea su modalidad.

Si el paciente ha pasado por numerosos  tratamientos  medicos  y  es  refractario a los   mismos,   es   un   factor   a   tomar   en   cuenta   para   las   alternativas   no farmacologicas,    es    decir   terapias    conductuales,    en   todas    sus    variantes, estimulacion  electrica  del  piso  pelvico  (EEPP),  o  procedimientos  bajo  anestesia, tanto   quirurgicos   como   no   quirurgicos,   tratamientos    de   neuromodulacion, enterocistoplastia   de   aumento,   procedimientos   de   miomectomia,   derivacion urinaria y acupuntura, entre otros.

5.   Evitar   las   equivocaciones   en   el   enfoque   del   tratamiento   en   pacientes   con hiperactividad vesical.

 

 

El diagnostico de la "hiperactividad vesical", se debera hacer con precision, para no confundirlo con disfunciones neurologicas que desarrollan hiperreflexia, ni con otras entidades que podrian causar sintomatologia parecida (Coullard y Webster 1995).

Sin embargo se debe puntualizar, que el termino de "hiperactividad", es netamente un termino urodinamico, porque si lo vemos desde un punto de vista practico y clinico- terapeutico,   el  tratamiento   podria  ser  el   mismo  en   muchos   aspectos,   para  otras condiciones que originan disminucion de la compliance-distensibilidad vesical, bien sea


organica o funcional,  con la presencia de contracciones  no inhibidas  del detrusor,  con todo su cortejo sintomatico.

 

 

D. Incidencia y epidemiologia de la vejiga hiperactiva

La   incidencia   de   la   hiperactividad   vesical,   que   se   describe   en   poblaciones sintomaticas  o  asintomaticas  desde  los  10  a  los  50  años,  es  del  10%  al  15%,  lo  cual aumenta   en   diferentes   situaciones,   como   por   ejemplo   mujeres   con   incontinencia urinaria,  que  alcanzan  hasta  un  60%,  y  en  pacientes  por  arriba  de  los  6  años  con enuresis  nocturna,  que  tendra  una  incidencia  del  15%,  pero  cuando  la  enuresis  es diurna-nocturna, la hiperactividad vesical, alcanzara de un 95% a un 97%.

Cifras  de  prevalencia que se  manejan actualmente refieren que  del  10% al  60%

de las mujeres presentan perdida de orina de variadas etiologias, las cuales del 10% al

35% podrian ser perdidas signifi-cativas, con deterioro importante en la calidad de vida y del 3% al 12% podrian ser perdidas severas (Bump 1997).

En hombres de mas de 60 años, el 20% podria presentar vejiga hiperactiva. Numerosas  publicaciones  refieren  que  solamente  en  los  Estados  Unidos  de

Norteamerica,  existen  mas  de  15  millones  de  personas  con  vejiga  hiperactiva,  lo  cual

implica una gran prevalencia (Appel 1998).

Aproximadamente    20    millones    de    personas    en    los    Estados    Unidos    de Norteamerica, son incontinentes y  de estos  15 a 18  millones, son mujeres  y de estas, sólo aproximadamente 50 000 reciben tratamiento medico (Appel 1998).

Otro grupo poblacional que presenta vejiga hiperactiva,   son sobre todo, hombres

de  mediana  y  avanzada  edad,  que  tienen  una  salida  vesical  obstructiva  (SVO),  por causas usualmente prostaticas (organicas), o por causas de comportamientos anómalos del   cuello   vesical   (funcionales),   las   cuales   desarrollaran   en   estos   pacientes   la posibilidad de tener musculos detrusores hiperactivos, en un 50% a 80% de los casos, debido  a  cambios  microestructurales,  ya  mencio-nados  previamente  (Blaivas  1995,

1996).

En pacientes  masculinos que han sido operados  de cirugia de alivio de la salida vesical,  o  de  cirugia  radical  prostatica  (Blaivas  1995)  o  en  mujeres  operadas  de incontinencia  urinaria  de  esfuerzo,  a  traves  de  procedimientos  de  uretrocervicopexia, pueden quedar  en un 10% a  25% de los  casos,  con persistencia de contracciones  no inhibidas (hiperactividad vesical), aun cuando en un 80% a 90% podrian desaparecer.

Pacientes  tanto  masculinos  como  femeninos,  sometidos  a  cirugias  pelvianas intraabdominales  (histerectomias,  cirugias  de  recto-sigmoides  entre  otras),  podrian sufrir   denervaciones   perifericas,   que   podrian   conducir   a   la   presencia   de   vejigas hiperactivas, en un porcentaje no precisado.

Sin  embargo  en  la  practica  clinica,  los   casos  con  antecedentes   quirurgicos pelvianos intraabdominales tienen, mas frecuentemente, vejigas hipoactivas.

Durante  el  embarazo  veremos  que  las  pacientes  tendran  hiperactividad  vesical con  contracciones   no  inhibidas   del   musculo   detrusor   (CNI),   con   vejigas   de   baja distensibilidad  (compliance),  con  un  primer  deseo  miccional  adelantado,  y  con  una


capacidad  vesical  disminuida  (sobre  todo  en  el  tercer  trimestre  del  embarazo),  segun estudios de gran importancia realizados por Francis y por Cutner.

 

 

"A pesar de su gran prevalencia, los pacientes que sufren de hiperactividad vesical,    y   que   por    ende    podrian   tener    urgencia,   frecuencia,    nocturia    e incontinencia  de  urgencia,  muy  frecuentemente,  no  le  dan  importancia  a  tales sintomas,   y  por  tanto  no  reportan  dichas  anormalidades  a  sus  medicos,   ni siquiera cuando dichos sintomas puedan tener una repercusión importante sobre la calidad de vida (QOL), de cada uno de ellos".

 

 

E.  Aspectos etiológicos de la vejiga hiperactiva

 

 

1.   Causada por obstruccion de la salida vesical (SVO) de indole diversa.

2.   Causada por estados de inmadurez neuroanatomica vesical (causa congenita)

3.   Causada por alteraciones del comportamiento vesical, en su relacion con el medio ambiente circundante del paciente (psico-somaticas o psiquiatricas).

4.   Causada  por  cambios  vesicales  relacionadas  a  la  edad  del  paciente  (vejiga  de

senectud).

5.   Causada  por  entidades  nosologicas  que  afectan  el  comportamiento  del  piso pelvico muscular y de la uretra, sobre todo en la infancia (conductuales).

6.   Causada por trastornos miogenicos del musculo detrusor.

7.   Causada  por  estados  de  hipersensibilidad  de  diversa  etiologia  (inflamatorios, actinicos,  tumorales-carcinoma  in  situ  (Tis),  cancer  prostatico,  o  posteriores  a tratamientos   quirurgicos,   o   posteriores   a   tratamiento   quimioterapico,   o   en presencia de enfermedades como la cistitis intersticial.

8.   Causada por afecciones psicosomaticas

 

 

Debemos  antes  que nada,  precisar que  en las  clasificaciones  de los  estados  de hiperactividad vesical, deberemos colocar, no solo las causas definidas de inestabilidad del  musculo  detrusor  puro,  sino  que  tambien  debemos  colocar  causas  neurologicas, porque una perturbacion de cualquier punto del eje neurologico global, podria llevar al paciente a presentar episodios permanentes o transitorios de hiperactividad vesical.

Con  frecuencia  en  nuestra  practica  profesional  diaria,  patologias  que  afectan  la corteza cerebral, el tallo cerebral, la medula espinal, los centros sacros de la miccion y/o la inervacion periferica al musculo vesical, podrian afectar las fases de almacenamiento (llenado) o de vaciamiento urinario (expulsivo), o ambas, porque desde el punto de vista neurologico,  la hiperactividad o  inestabilidad vesical,  podria  muy  bien considerarse un estado de hiperexcitabilidad del reflejo miccional.

 

 

F. CLASIFICACICN ETIOLCGICA DE LA HIPERACTIVIDAD VESICAL

 

 

1.   Causas neurologicas de hiperactividad vesical (desarrolladas en el capitulo IX).


 

2.   Causas no neurologicas de hiperactividad vesical.

 

 

• Hiperactividad vesical de causa conqenita-conductual

Conocemos  la  manera  de  orinar  de  los  ninos  antes  de  cumplir  dos  anos,  y  es gracias  a  un reflejo  medular,  que  responde con  una contraccion vesical,  la llegada de estimulos  de  distension  vesical,  sobre  los  receptores  de  estiramiento  que  tiene  el musculo detrusor y todo gracias a que por motivos de maduracion, no ha llegado a tener la capacidad de retardar, o inclusive posponer la miccion, lo cual a su vez se produce al tener   el   nino,   la   madurez   neurologica   de   percibir   la   sensacion   de   vejiga   llena (sensibilidad propioceptiva y nociceptiva).

Hay  una  maduracion  retardada  del  control  del  sistema  nervioso  central  sobre  la funcion del detrusor y sobre la uretra.

Por   tanto,   las   micciones   que   presenta   un   nino   antes   de   los   2   anos,   son caracteristicas de un estado de "hiperactividad del musculo detrusor".

En   el   momento   que   el   nino   presente   su   "control   urinario",   no   se   debera unicamente  a  la  maduracion  de  sus  vias  neurologicas,  sino  tambien  a  un  complejo proceso de "conductas aprehendidas", las cuales podrian ser ademas las responsables de sindromes urologicos "funcionales" de la edad adulta.

Hay una serie de entidades nosologicas que hacen que el nino siga presentando contracciones involuntarias del musculo detrusor vesical, aun despues de haber pasado esta   fase   de   transicion,   para   que   adquiera   sus   habilidades   urinarias,   que   lo acompanaran toda su vida, es decir despues de los 2 anos en adelante.

Entre   ellas   tenemos,   las   enuresis,   el   reflujo   vesicoureteral,   el   sindrome   de Hynman  o  vejiga  neurogenica  no  neurogenica  y  las  cistitis  recurrentes  de  indole funcional,  que  pondran  a  prueba  las  habilidades  diagnosticas  del  medico  urologo,  o pediatra.

Todos   estas   entidades,  son  fiel  reflejo  de  disfunciones   mic-cionales  que  se presentan clinicamente con contracciones no inhibidas de la vejiga (CNI), es decir con vejigas hiperactivas.

El nino que presente estas disfunciones miccionales, con todas las repercusiones sociales  que  ello  pueda  conllevar,  tanto  en  su  colegio,  como  en  su  propio  nucleo familiar,   para   poder   "contener   la   orina"   debido  a   la   urgencia   que  tiene,   por   las contracciones  vesicales  repentinas,  desarrollara  un  estado  de  "hipercontractilidad  del esfinter estriado externo o rabdoesfinter", asi como del piso pelvico muscular, que a su vez   llevaran   al   nino   a   una   especie   de   "discinergia   vesico-esfinteriana   funcional", causando posteriormente, variados problemas en su edad adulta.

Los  sintomas  que  presentan  estos  ninos  son  urgencia  urinaria,  incontinencia  de urgencia, incontinencia de esfuerzo, micciones intermitentes, las cuales las veremos de manera  clara  en  la  uroflujometria,  que  llamativamente  son  efectuadas  con  un  gran esfuerzo miccional (pujo).   Presentaran tambien episodios de infecciones urinarias, las cuales   son   causadas   por   el   motivo   explicado   en   el   parrafo   anterior   de   la


hipercontractilidad   del   esfinter   estriado,   que   podria   llevar   a   residuos   urinarios significativos    y    como    sabemos,    desarrollaran    urgencia    miccional/sensorial    con incontinencia,  y  como  dato  curioso,  tendran  repercusiones  en  el  area  intestinal  con colicos por hiperperistaltismo, e inclusive podrian tener encopresis.

Es   verdaderamente   notable,   que   los   ninos   con   trastornos   de   hiperactividad vesical,   son   ninos   muy   maduros   dentro   del   contexto   personal-social,   lo   cual, paradojicamente,  podria  no  "encajar"  con  un  nino  que  se  esta  orinando...  pero  asi sucede.

Cuando vean a un nino, y con mayor frecuencia a una nina, que en una actividad de grupo tiene las piernas cruzadas en X, y esta intranquila, y en ocasiones sudorosa, palida, y no quiera interrumpir lo que en ese momento este realizando (fotos de grupo, jugar al escondite,  cantar canciones  de cumpleanos,  estar en una fogata en la playa), ese nino podria presentar un sindrome de vejiga hiperactiva o inestable.

Cuantas  veces  hemos  observado  ninos  que  jugando  al  escondite,  se  orinan mientras   estan   escondidos.   Pues   bien,   si   investigamos   un   poco,   encontraremos patologias  miccionales,  que  usualmente podrian  atribuirse  a estados  de  hiperactividad vesical.

iCuantos  ninos  etiquetados  por  sus  profesores  de  primaria  y  secundaria,  como alumnos problemas por sus habitos de "inventar pretextos para orinar", para salirse de clase, tendran en realidad una vejiga hiperactiva?

Con  estos  ninos  tendremos  una  relacion  medico-paciente  excelente,  por  cuanto

tienen un "alcance"  diferente a  los  otros  ninos,  en el sentido  de  que parecen ser  mas maduros.

Lo  peligroso  de  estas  disfunciones  miccionales  en  las  edades  infantiles  y  en  la pubertad/adolescencia,  es  que  podrian  presentarse  con  reflujo  vesico-ureteral,  con todos los agravantes del caso, tanto desde el punto de vista infeccioso, como desde el punto de vista de posibles  danos renales, por el "efecto martillo" de la orina refluyente sobre los calices renales polares.

Estos son aquellos casos que usualmente son tildados como "casos problemas" y van de medico en medico, con pesimos resultados.

 

 

• Hiperactividad vesical, causada por la VEJEZ

En  edades  ancianas,  es  muy  comun  la  hiperactividad  del  musculo  detrusor,  por cuanto  hay  factores  organicos,  funcionales  y  circunstanciales  de  cada  paciente,  que promoveran a dicho comportamiento anomalo de la vejiga.

Cambios  relacionados  con  la  vejez,  afectaran  al  sistema  urinario  inferior,  el sistema nervioso central (SNC) y los mecanismos de control miccional.

El  aumento  del  contenido  de  colageno  en  la  microestructura  del  detrusor,  el deterioro de la presion de cierre uretral, sobre todo en las mujeres y los cambios en el patron diurno nocturno de la excrecion urinaria, son algunos de esos cambios.

Yoshida  y  col.  en  el  Meeting  de  la  AUA  en  Dallas  1999,  refieren  que  hay  un

aumento del AlP celular y una disminucion de la acetilcolina (Ach) con la ancianidad, lo


que  llevaria  inequivocamente  a  cambios  (trastornos)  funcionales  en  el  musculo  liso vesical.

Se  describen  patologias  que  presenta  el  paciente  de  un  modo  general,  que pudieran  repercutir  en  la  fase  del  almacenamiento  vesical,  bien  sea  por  aspectos medicamentosos, o por enfermedades en si misma, de las cuales las mas importantes son  las  enfermedades  de  etiologia  vascular  cerebral,  tan  frecuentes  en  la  ancianidad (ACV),  la  enfermedad  de  Parkinson,  las  neuropatias  autonomicas  y  la  insu-ficiencia cerebral   cronica,   todas   ellas,   sin   duda   alguna   afectaran   las   vias   neurologicas cerebro/medulares y  ocasionaran usualmente vejigas  de poca capacidad funcional por hiperactividad vesical.

El factor de la poca movilidad del paciente, con una vida seden-taria, favorece la aparicion de problemas que llevan a la incontinencia urinaria, asi como a episodios de constipacion, por hipoperistaltismo intestinal.

Factores  como  la  disminucion  o  carencia  de  sensibilidad  en  el  aspecto  del

almacenamiento  vesical,  son  importantes  al  final,  en  la  obtencion  de  la  continencia urinaria, y por otro lado, no debemos descuidar los aspectos psicologicos, que sin duda alguna influyen notablemente en las percepciones que tenga el paciente, de si mismo y del medio ambiente humano y fisico que lo rodea.

 

 

LA  ETIOPATOGENESIS  DE  LA  HIPERACTIVIDAD  VESICAL  EN  LA  VEJEZ  ES MULTIFACTORIAL

 

 

Los   trastornos   emocionales   del   paciente   senil,   son   trascendentales,   en   la modificacion  y  trastornos  de  la  esfera  urinaria,  tanto  en  su  fase  de  almacenamiento vesical, como en la fase de vaciamiento vesical.

Cuando   hablamos    de    incontinencia,    nos    referimos    primordialmente   a    la

incontinencia  de  urgencia,  punto  caracteristico  de  la  hiperactividad  vesical  y  ella  la encontraremos hasta un 70% en estas poblaciones ancianas.

La  incidencia  que  presenta  la  poblacion  anciana  masculina,  en  relacion  con  la

incontinencia urinaria, usualmente generada por episodios de hiperactividad vesical, es de aproximadamente entre 25% y 30% y en la poblacion anciana femenina, va del 40% al 50%.

Los factores "vesicales", por afectacion de la fase de almacenamiento vesical, se

suman  a  los  factores  que  ayudan  a  la  continencia,  desde  el  punto  de  vista  uretral (incompetencia   uretral),   muy   normales   de   la   edad   senil,   porque   sobre   todo,   las pacientes  femeninas,  tendran  signos  fisicos  de  deprivacion  estrogenica,  que  como sabemos  afecta  vagina,  uretra,  trigono  vesical  y  musculatura  pubococcigea,  con  la correspondiente "resequedad"  de  dichos  tejidos,  que  conllevan por  ultimo,  al  aumento de  la  predisposicion  a  bacteriuria,  que  pueden  convertirse  en  significativas  y  producir infecciones  urinarias  y  posiblemente  incontinencia  de  urgencia  de  tipo  sensorial  y  por otro  lado,  afectar  directamente  el  "efecto  sello"  de  la  mucosa  y  submucosa  uretral, dando al final, incontinencia urinaria en diversos grados.


La  atrofia  genital,  en  tejidos  estrogeno-dependientes,  se  caracteriza  por  una disminucion   progresiva   y   creciente   de   la   vascularidad,   hialinizacion   de   las   fibras colagenas,    fibras     elasticas    resquebrajadizas,    con    disminucion    del    volumen citoplasmatico celular.

El  contenido  de  glucogeno  de  las  celulas  epiteliales  vaginales  disminuye  y  por esto  los  lactobacilos  acidofilos  disminuyen  en  poblacion  con  lo  que  aumenta  el  pH vaginal, facilitando la colonizacion bacteriana.   La pared vaginal se adelgaza y se seca. Veremos  reducida  la  maduracion  epitelial  y  se  veran  mas  celulas  parabasales  en  la citologia de rutina (Cardozo L).

No   existe   ya   ninguna   duda   de   que   cuando   una   mujer   alcanza   su   etapa menopausica,  hay  una  incidencia  elevada  de  sintomas  urinarios,  como  por  ejemplo disuria,   frecuencia,   nocturia,   urgencia   e   incontinencia   urinaria   de   urgencia,   con episodios  recurrentes  de  infeccion  urinaria.  Todo  esto  se  controlara  y  sera  reversible con tratamiento estrogenico.

Las   causas   mas   comunes   involucradas   en  la   genesis   de  los   episodios   de incontinencia  urinaria  en  la  vejez  son:  deterioro  fisico,  disminucion  de  la  movilidad, enfermedades agudas o cronicas, deterioro mental con estados confusionales en union de  grados  diversos  de  demencia,  infecciones  urinarias,  impactacion  fecal,  deprivacion estrogenica,  insuficiencia  cardiaca,  farmacoterapia  que  induzca  un  aumento  del  gasto urinario   (diureticos),   farmacos   que   entorpezcan   el   estado   de   alerta   del   individuo (sedantes,   hipnoticos),   sobre   todo   cuando   no   se   "dosifica"   acorde   a   las   edades ancianas,  otras  causas  involucradas  en  la  genesis  de  los  episodios  de  incontinencia urinaria  en  la  vejez  son  la  presencia  de  trastornos  endocrinometabolicos,  asi  como trastornos del funcionalismo renal.

En  el  hombre  anciano,  todos  los  factores  arriba  mencionados  se  suman  a  la probabilidad de que el paciente tenga, cambios  microestructurales  producidos  por una salida vesical obstructiva,  sumado a cambios  microestructurales,  que produce la vejez por si misma.

No olvidemos aquella sabia frase latina que dice "senectus ictus morbus est", "la vejez por si misma es una enfermedad".

 

 

••• Hiperactividad vesical, causada por una SALIDA VESICAL OBSTRUCTIVA

Esta demostrado, que de un 50% a un 80% de los casos de pacientes con salida vesical    obstructiva,    evidenciado    por    parametros    objetivos    y    subjetivos,    tienen hiperactividad vesical, es decir muestran inestabilidad de la vejiga urinaria, evidenciada por hallazgos cisto-metricos en la fase de llenamiento (contracciones no inhibidas) y por una  sintomatologia  clinica  caracteristica  y  por  una  disminucion  de  la  distensibilidad- compliance vesical (Abrams 1997, Blaivas 1997, Hald y Bradley 1982, Yokoyama y col

1997).

A   su   vez,    diversos    estudios    de   investigacion,    han   demostrado   que   la sintomatologia  y  la  hiperactividad  vesical,  se  redujeron  hasta  un  50%,  cuando  se realizaba una cirugia de alivio de la salida vesical,  como  la reseccion endoscopica  de


prostata,  u  otras  modalidades  tanto  quirurgicas,  como  las  modalidades  "minimamente invasivas", tan en boga en la actualidad (Gemalmaz y col. 1998).

Al  respecto  uno  de  los  trabajos  que  marcaron  pauta  fue  el  del  Dr.  Abrams  en Inglaterra, quien desde el año 1985, demostro la relacion directa entre obstruccion de la salida  vesical  (SVO)  e  hiperactividad  vesical,  con  la  mejoria  de  esta  al  resolverse quirurgicamente el problema obstructivo del paciente.

Por otro lado fueron  Cumming y  Chisholm,  quienes  en el año 1992 demostraron que  habia  cambios  en  la  inervacion  del  musculo  detrusor  al  obtenerse  un  alivio urodinamico  de  la  salida  vesical,  es  decir,  que  no  solo  podriamos  obtener  un  alivio sintomatico del paciente al mejorar el comportamiento de la vejiga, sino que ella tendria tambien cambios estructurales-organicos positivos.

En conclusion, cuando un paciente presenta una salida vesical obstructiva (SVO) inducira cambios  en las funciones  de los receptores  muscarinicos y adrenergicos y en los  mecanismos  NANC (no adrener-gicos-no colinergicos),  que tienen relevancia en la contraccion y relajacion vesical (Levin y col. 1999).

Los  diferentes  subtipos  de  los  receptores  muscarinicos,  hace  bastante  dificil precisar lo referente a las  regulaciones  muscarinicas  del  musculo detrusor vesical.   El transmisor responsable del componente NANC de la contraccion vesical, posiblemente es el AlP.

Aun  cuando  su  importancia  en  los  seres  humanos  no  es  significativa,  alcanza niveles de importancia en casos de pacientes con salida vesical obstructiva, lo cual se debe tomar en cuenta en lo que a terapeutica se refiere.

Una  de  las  hipotesis  de  mayor  fuerza  en  relacion  con  la  hiperactividad  vesical inducida  por  obstruccion  de  la  salida  vesical,  es  aquella  postulada  por  el  grupo  del Albany College of Pharmacy, donde Levin refiere, que hay una disminucion en la pOde los tejidos vesicales, al igual que una disminucion del flujo sanguineo.

La   hipertrofia   del   detrusor,   consecutiva   al   trastorno   obstructivo,   favorece   la magnitud  y  duracion  de  los  periodos  de  isquemia  del  musculo  vesical,  lo  cual  se continua con periodos de reperfusion con una pOnormal.

La  isquemia  que  se  presenta  va  a  ocasionar  un  aumento  del  ion  calcio  libre

intracelular, que activa enzimas hidroliticas especificas, entre las cuales se encuentra la calpaina  (proteasa  calcio-activada)  y  la  fosfolipasa  A2  (fosfolipasa  calcio-activada). Esta naturaleza ciclica de los  periodos  de isquemia y  reperfusion del musculo vesical, genera radicales libres que activan a su vez a las peroxidasas lipidicas que podran ser o no, dependientes del calcio.

La  activacion  de  las   antes   mencionadas   enzimas   hidroliticas,   ocasiona  una perdida  progresiva  de  lipidos   y   fosfolipidos   de  la   membrana  celular  y   de  zonas intracelulares,  lo  cual  es  facil pensar,  ocasionaran alteraciones  de  las  propiedades  de dicha membrana.

Esto  ocasiona  aumento  de  la  excitabilidad,  tanto  de  la  membrana  de  la  celula muscular  lisa,  como  de  las  neuronas  involucradas,  que  finaliza  con  la  hiperactividad vesical.


Tendremos   ademas,   por   la   perdida   lipidica,   fenomenos   de   denervacion, hipersensibilidad   por   denervacion   de   los   receptores   autonomicos,   en   lo   que   a transmision   neurohumoral   se  refiere,   habra   un  aumento   de   la  sensibilidad  de  la membrana de la fibra muscular lisa vesical, que al final, ocasionara hiperactividad tanto neurogenica, como miogenica.

Por  otro lado  Park  y  col.  (1998) demostraron  que la  obstruccion  urinaria  induce, por  el  estiramiento  local  de  la  fibra  muscular  lisa,  mas  que  por  la  presion  existente dentro de la vejiga, a la secrecion de una enzima, la ciclooxigenasa-2 (COX-2), que es un   factor   limitante   en   la   biosintesis   de   las   prostaglandinas,   las   cuales   modulan normalmente la contractilidad vesical, obteniendose por tanto mas posibilidades de que el paciente en cuestion, tenga hiperactividad vesical.

Esto  es  sumamente  interesante  y  tendra  que  confirmarse  con  mas  trabajos  de investigacion   al   respecto.      En   este   mismo   tema   tendremos   tambien   aspectos interesantes en relacion con el oxido nitrico, que se estaran clarificando en los proximos

años.

Se   ha   demostrado   que   en  los   casos   en  los   cuales   la   obstruccion   urinaria infravesical origine hiperactividad vesical, sera la obstruccion parcial, la que ocasionara la  mayor  alteracion  de  la  funcion  vesical,  con  elevacion  de  la  presion  miccional  y aumento de la orina residual (RPM) asi como de los episodios de hiperactividad vesical.

 

 

••••   Hiperactividad   vesical,   en   pacientes   con   INCONTINENCIA   URINARIA   DE ESFUERZO (IOE), con INESTABILIDAD URETRAL

 

 

Investigadores  de  la  talla  de  Stamey,  Raz,  Webster,  Blaivas,  entre  otros,  han determinado  que  la  incidencia  de  hiperactividad  vesical,  en  mujeres  con  incontinencia urinaria va del 10% al 65%.

Cuando   estas    pacientes   son   sometidas   a   uretrocervicosuspension,   dicha hiperactividad  vesical,  podria  desaparecer  en  un  50%  a  80%  de  los  casos,  lo  cual implica  que  luego  de  cirugia  de  IOE,  los  pacientes  pueden  quedar  con  hiperactividad vesical en 20% a 50% de los casos.

Investigadores  como   Cardozo  y   Stanton  han   publicado  desde  el  año  1979, trabajos  de investigacion, donde estudian la hiperactividad vesical y su relacion con la incontinencia  urinaria  de  esfuerzo  y  con  la  inestabilidad  uretral  (Cardozo  y  col.  1979, Cardozo y Stanton,1980 Cardozo, 1992).

Un  45%  de  las  mujeres  con  hiperactividad  vesical,  presentan  incapacidad  de mantener una  presion  uretral  maxima  de  cierre,  por  lo  cual se  produce  una  relajacion uretral,  justo  antes  de  ocurrir  una  contraccion  no  inhibida  o  involuntaria  del  musculo detrusor (CNI).

Esto deberemos mantenerlo en nuestras mentes a la hora de someter a nuestras pacientes  a  tratamiento  medico,  en  particular,  con  medicamentos  alfa  estimulantes adrenergicos, como la fenilpropanolamina.

Tomando   en   cuenta   esta   caracteristica,   hay   grupos   de   investi-gadores   que


clasifican la hiperactividad vesical, en dos tipos,  uno aquel detrusor hiperactivo que no esta  precedido  por  una  relajacion  uretral  y  que  se  deberia  a  un  problema  miogenico puro  del  detrusor  y  el  otro  tipo,  donde  la  hiperactividad  del  detrusor  es  precedida  por una  relajacion  uretral  y  donde  se  cree  que  el  problema  pudiera  ser  uretral  o  por  el desencadenamiento    de    un    reflejo    miccional    prematuro.    Esto,    pudiera    tener repercusiones en el campo terapeutico.

 

 

••••• Hiperactividad vesical relacionada con CIRUGIA PELVIANA

Cualquier  cirugia  pelvica,  que  ocasione  trastornos  de  la  iner-vacion  periferica, podria ser un factor etiologico de hiperactividad vesical.   Una de las mas frecuentes es la  histerectomia  simple  con  ooforectomia  o  sin  ella,  debido  al  hecho  de  que  se interrumpen las  fibras  musculares  de la cupula vaginal,  que tienen intima relacion con todo  el  resto  de  la  musculatura  del  piso  pelvico  muscular,  que  sirve  de  soporte  a  la uretra  proximal  y  con  otras  fibras  musculares  del  diafragma  urogenital,  asi  como  la fascia   endopelvica   y   el   grupo   de   los   elevadores   del   ano.     Esto   ocasiona   una inestabilidad  organica  y  funcional,  aparte  de  afectar  las  fibras  neurologicas  aferentes vesicales que llevan al final a la aparicion de hiperactividad vesical.

La  histerectomia  radical  llevada  por  su  diseccion  mas  extensa  puede  ocasionar denervacion vesical con la presencia de vejigas hipoactivas detectadas por la presencia de residuos urinarios altos (RPM) asi como a trazados cistometricos caracteristicos.

La sobrecorreccion de los pacientes con incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE)

pueden llevar a un status  obstructivo de la paciente con la aparicion de hiperactividad vesical,   episodio  de  retencion  urinaria  e   incontinencia   de  dos   origenes,   una  por hiperactividad  y  otra  por  rebosamiento.    Esto  sin  contar,  que  en  ocasiones  dichas pacientes  presentan  contractilidad  vesical  disminuida,  con  lo  cual  pueden  presentar HVCD, cuadros cistometrico-clinico definido por Blaivas hace unos años atras.

En  definitiva,  esta  es  una  de  las  situaciones  mas  embarazosas  tanto  para  el urologo o ginecologo conductores del caso, como para el paciente y sus familiares.

La  etiologia de la disfuncion  miccional posterior  a cirugia  pelvica  es  sin  ninguna

duda  debida  a  multiples  causas:  causas  inflamatorias  por  la  cirugia  en  si,  factores mecanicos   de   soporte   de   la   vejiga   urinaria,   afectacion   neurologica   local,   causas inherentes al alcance de la patologia tumoral en el area vesical y perivesical, sin dejar de mencionar las patologias preexistentes que trastornan la esfera miccional, antes de la  cirugia  pelviana  en  si,  como  el  crecimiento  prostatico  benigno,  y  la  incontinencia urinaria en la mujer.

 

 

•••••• Hiperactividad vesical, relacionada con PROBLEMAS PSICOLCGICOS

Como  sabemos  por  estudios  de  investigacion  realizados  desde  hace  decadas hasta  hoy,  la  prevalencia  de  los  desordenes  psiquiatricos  entre  pacientes  etiquetados como "no psiquiatricos' es  alta y  ademas  no son  siquiera reportados  (Shepherd y  col.

1960),   por   tanto   podrian   perfectamente   coincidir   los   problemas   psicologicos   con

problemas de funcionamiento del sistema urinario inferior.


Donde   podremos   inferir   que   los   factores   psicologicos   podrian   condicionar sindromes urinarios, es en casos de hiperactividad vesical, en pacientes femeninas con sindrome  uretral,  en  pacientes  femeninas  con  crisis  de  retencion  urinaria,  llegando inclusive a la retencion aguda de orina y en casos de urgencia urinaria de tipo sensitiva (Cardozo).

Sintomas como frecuencia urinaria, urgencia, nocturia, incon-tinencia de urgencia y  grados  variables  de  obstruccion  urinaria,  se  asocian,  de  manera  muchas  veces definitiva con trastornos  en la esfera  psicologica  del paciente,  tan comunes  en la vida diaria (Krane y col. 1979).

No  nos  olvidemos  del  trabajo  de  Jeffcoate  y  col,  (1966)  donde  se  analizaba  la incontinencia de urgencia en las mujeres y donde encontro que el 61% de las mujeres analizadas, que sumaban 246, con incontinencia urinaria de urgencia, tenian trastornos obsesivos o crisis depresivas.

La  hiperactividad  vesical  esta  mas  asociada  con  crisis  neuroticas,  depresivas  y ansiosas que en otras patologias urinarias.

Si  nos  referimos  a  la  calidad  de  vida  (QOL),  veremos  al  final  de  este  capitulo como  se  demuestra  que  los  pacientes  con  hiperactividad  vesical  y  urgencia  sensorial tienen  bastante  deteriorada  su  calidad  de  vida  por  culpa  de  la  sintomatologia  urinaria "hiperactiva", porque afecta no solo su estado emocional, sino su interrelacion social y mas aun su interrelacion de pareja.

Cuando la hiperactividad tiene como etiologia un  disturbio psicologico,  sera  mas dificil de tratar con los  medios sencillos de tratamiento, por lo que su presencia tendra para el paciente un factor pronostico sombrio.

Tratar exitosamente la hiperactividad vesical, ocasionara una mejoria instantanea en el paciente, tanto en su esfera psicologica, como en su esfera urinaria.

Una de las conclusiones de este libro, como muchos otros investigadores, es que:

 

 

"Todo   paciente   con   hiperactividad   vesical   que   no   veamos   reaccionar positiva  y rapidamente  al  tratamiento convencional,  se le  deberia  someter  a  una historia   clinica   detallada,   haciendo   hincapie   en   cuestionarios   de   valoración psicológica, de valoración de su estado mental-funcional, para pesquisar posibles trastornos psicológicos, que ameriten no sólo un reenfoque del tratamiento, sino la interconsulta con un especialista del area psicológica”.

 

 

Numerosos  investigadores  han  relacionado  los  trastornos  psico-somaticos  y  de comportamiento con la hiperactividad vesical. Se sabe que pacientes con sindromes de urgencia  urinaria  tienen  un  nivel  de  estres  y  ansiedad  que  no  necesariamente  se relacionan con la severidad de los sintomas (Frewen, 1978; Hunt,1996 y Moore, 1990).

Aun  cuando  no  hay  un  acuerdo  entre  los  investigadores,  para  determinar  con precision,   si   el   factor   psicologico   pudiera   estar   relacionado   con   episodios   de hiperactividad vesical, se sospecha que pudieran ser los "disparadores" de episodios de urgencia urinaria, con su correspondiente incontinencia urinaria, mas aun, cuando estas


pacientes  han  mejorado  en  muchos  casos  con  terapia  de  reeducacion  vesical,  y  con recomendaciones  de  conductas  determinadas,  e  inclusive  con  el  bioofeedback,  con resultados muchas veces irregulares, y no consistentes.

Medicos de la talla de Krane y Siroky en Boston, entre otros, han mencionado la relacion que tiene el status psicologico del paciente, con las disfunciones miccionales, y asi vemos como por ejemplo se habla de sindrome psicogeno de frecuencia-urgencia, o disfuncion miccional psicogena.

Mosso y Pellicani, en 1882, describieron en la Real Academia Nacional Lincci en Roma-Italia,  la  asociacion  entre  estimulos  psicologicos  y  las  presiones  intravesicales aumentadas, con la aparicion de contracciones del musculo detrusor.

En el sindrome de urgencia-frecuencia urinaria, de causa psicologica, veremos en dichos pacientes, frecuencia urinaria, urgencia e incontinencia de urgencia, lo cual como vemos, son la triada caracteristica de la hiperactividad vesical, objeto de nuestro libro.

Tambien podrian presentar tenesmo vesical,  disuria,  y  molestias  dolorosas  en la

zona hipogastrica y/o en la zona perineal.

Lo    que    se    ha    podido    demostrar,    es    que    los    pacientes    que    tienen predominantemente  ansiedad,  son  los  que  tendran  este  sindrome  de  hiperactividad vesical, pero los pacientes con rasgos histericos, y tendencias depresivas, tendran mas bien predisposicion a la retencion urinaria.

A pesar de lo que se ha dicho, es importante someter a estos pacientes a estudio urologico  completo,  por  cuanto  muchas  veces,  escondido  bajo  la  posible  etiologia psicologica,  tendremos  patologias  de  la  mas   variada  naturaleza  que  deberan  ser descartadas,  por  lo  cual  recomiendo,  no  dejarse  llevar  por  impresiones  iniciales,  que inclusive pudieran ser correctas, sino que es  util someter al paciente a examenes  que nos den la plena seguridad de la etiologia psicologica en su sindrome de hiperactividad vesical.

El  hecho  que  de  un  15%  a  25%  de  mujeres  con  hiperactividad  vesical,  tuvieron antecedentes  de  orinarse  en  la  cama  en  su  infancia  y  un  20%  a  25%,  presentaban como  antecedentes  sindrome  de  colon  irritable,  podria  todavia   mas,  confundir  la etiologia,  porque  como  sabemos,  las  dos  entidades  mencionadas,  pudieran  tener  de base,  factores  neurologicos  en  el  caso  de  la  enuresis  diurna-nocturna,  o  deberse  a factores  psicologicos-psicosomaticos,  en  el caso  de  los  sindromes  de  colon  irritable  o de enuresis nocturna.

En nuestra experiencia personal,  son  muchos  los  casos  que hemos  tenido en la practica clinica diaria, de pacientes con cuadros neuroticos, psicoticos o con sindromes depresivos     severos,     que     tienen     una     constelacion     de     sintomas     urinarios, preferentemente de llena-miento vesical, que podrian acompañarse de contracciones no inhibidas, urgencia miccional, e incontinencia urinaria, es decir de hiperactividad vesical.

 

 

••••••• Hiperactividad vesical, relacionada a HIPERSENSIBILIDAD VESICAL

Desde  un punto  de vista teorico,  la actividad aferente  incrementada  por estados inflamatorios,  podria  inducir  la  hiperactividad  vesical,  siempre  y  cuando  la  urgencia


sensitiva, que lleve a una posible incontinencia de urgencia, se diagnostique, luego de excluir la urgencia motora.

Asi   veremos   entonces   que   podria   originarse   hipersensibilidad   vesical   en infecciones urinarias, en tratamientos con radioterapia externa (en sus primeras fases), en cuadros de cistitis intersticial, en pacientes sometidos a quimioterapia intravesical por cancer  de  vejiga,  en  mujeres  con  sindromes  uretrales  con  vaginosis  bacteriana,  y  en casos con presencia de carcinoma in situ.

 

 

Sindrome uretral

En relacion con las  mujeres  con sindrome uretral,  el cual consiste  en  un cuadro clinico   que  se   presenta   en   mujeres   en   edad   sexual   activa,   con   disuria  intensa, acompañada de frecuencia urinaria, urgencia, nocturia, y en ocasiones incontinencia de urgencia,  con  molestias  dolorosas  vaginales,  perineales  y/o  lumbares,  con  exacer- bacion  sintomatica,  al  tener  relaciones  intimas  y  que  se  caracteriza  por  presentar examenes  de  orina  simple,  practicamente  normales  y  examenes  de  urocultivo  o  bien esteriles  (negativos)  o  bien  con  menos  de  105   UFCxcc  y  que  en  muchas  ocasiones tendran asociados trastornos psicologicos-emocionales  en su entorno familiar o social, asi como parejas afectadas por trastornos infecciosos uretroprostaticos, y en ocasiones estara  asociada  a  la  presencia  de  infecciones  vaginales  por  microorganismos  tipo Chlamydia  trachomatis,   Mycoplasma   hominis,   Ureaplasma   urealyticum,   Mobiluncus curtisii y Gardnerella vaginalis, entre otros.

Lo  expuesto  previamente,  hace  que  pensemos  que  posiblemente  el  criterio  de Kass, en vigencia desde 1956, en relacion a que las infecciones urinarias significativas son  las  que  tienen  mas  de  105   UFC  xcc,  podria  no  ser  adaptable  para  este  tipo  de pacientes, donde usualmente presentan contajes de 102, 103, 10UFC xcc.

Pues  bien  estas  pacientes  tendran  caracteristicas  urodinamicas  comunes  como son:  aumento  de  la  presion  de  cierre  uretral,  inestabilidad  uretral,  flujo  urinario  con morfologia     alterada     (aplanada),     relajacion     incompleta     del     esfinter     externo (rabdoesfinter)  y  con  hiperactividad  vesical  en  aproximadamente  25%  al  30%  de  los casos.

Inclusive   se   ha   demostrado   en   recientes   trabajos   de   investigacion   que   los sintomas irritativos urinarios bajos que se ven en los pacientes portadores de prostatitis cronica de mas de 5 años de evolucion, podrian deberse a inestabilidad o hiperactividad del  detrusor  (Al-Shukri  y  col.  1997).    Por  tanto  esto  abre  una  posibilidad  terapeutica mas,  para  el  gran  dilema  que  representa  el  tratamiento  de  pacientes  con  prostatitis cronica.

Luego de haber visto las etiologias mas frecuentes generadoras de hiperactividad vesical podriamos  plasmar en un grafico la inter-accion que podrian tener todos  estos elementos sobre el control de la contractilidad vesical y por ende sus repercusiones en el tratamiento de este estado de hiperactividad vesical.

 

 

G. Evaluacion del paciente con vejiga hiperactiva


1. Historia Clinica·lnterrogatorio

En  lo  referente  a  la  historia  clinica  de  pacientes  con  hiperactividad  vesical,  esta debera  tomar  en  cuenta,  todos  aquellos  factores  de  riesgo  que  se  mencionan  para sintomas  urinarios como la incontinencia y por tanto debemos investigar antecedentes de  enferme-dades  agudas  y  cronicas,  antecedentes  de  accidentes  cerebrovasculares en   sus   diferentes   etapas   de   recuperacion,   porque   como   veremos   en   capitulos posteriores,  se  asocian  mucho  con  estados  de  hiperactividad  vesical  (Jensen  y  col.

1994).

Debemos   conocer   la   capacidad   cognoscitiva   del   paciente,   asi   como   de   su capacidad   e  independencia   fisica.     Es   importante   conocer  si   recibe   tratamientos farmacologicos  o  de  otro  tipo  (quimioterapia,  radioterapia),  que  puedan  condicionar hiperactividad vesical.

En    este    punto    es    importante    destacar    que    algunos    farmacos    podrian desencadenar episodios de hiperactividad vesical por causas diversas, asi tenemos los diureticos,   dando   un   efecto   de   llenamiento   vesical   que   podria   desencadenar contracciones no inhibidas del detrusor, el litio, que altera el transporte de sodio dentro de las celulas, causando un aumento de la produccion de orina, asi como un aumento de la ingesta  de liquidos,  con lo cual se originan  micciones  de grandes  cantidades  de orina.   Farmacos  como  antidepresivos  de frecuente  uso  en  todo  el  mundo,  ocasionan disminucion de la fuerza contractil de la vejiga, con lo cual podrian originarse volumenes de  orina  residual,  que  en  ciertas  circunstancias  podrian  desembocar  en  urgencia  e incontinencia de urgencia, asi como a incontinencia por rebosamiento.

Igualmente  los  farmacos  antihistaminicos  ocasionan  disminucion  de  la  actividad vesical.     Los  neurolepticos  pueden  ocasionar  disminucion  no  solo  de  la  urgencia miccional,  sino tambien de la capacidad de percibir el  momento  de  orinar,  con lo cual pueden originarse episodios de incontinencia por rebosamiento.

Drogas antiparkinsonianas (levodopa, carbidopa), producen relajacion vesical, con la  consiguiente  aparicion  de  incontinencia  urinaria  por  rebosamiento.    Farmacos  tipo sedantes y tranquilizantes ocasionan un efecto depresivo sobre la actividad vesical, asi como sobre el estado de alerta que todo ser humano debe tener en su estado de vigilia.

Los    ancianos,    son    el    grupo    etareo    mas    afectado    por    la    interaccion medicamentosa, bien sea por falta de concientizacion de los farmacos que ha tomado en el curso del dia, como por el consumo de numerosos farmacos al mismo momento, por  lo  cual  se  hace  muy  probable  que  ocurran  efectos  indeseables  sobre  el  sistema urinario inferior y especificamente sobre la continencia urinaria.

Debemos  pesquisar, condiciones relacionadas con el sexo,  por ejemplo, estados de deprivacion estrogenica en etapas menopausicas.

Es importante saber si el paciente ha tenido trastornos urinarios desde su infancia, o bien si ha tenido antecedentes  familiares  de disfuncion miccional urinaria o de otras anomalias de incidencia familiar (enuresis, trastornos miccionales, riñones poliquisticos, extrofia vesical, epispadia o hipospadia, reflujo vesicorrenal, sindrome de Prunne Belly, agenesia  renal,  valvas  de  uretra  posterior  en  el  varon,  anillo  estenotico  uretral  distal


femenino,  sindrome  de  Hinman  (vejiga  neurogenica  no  neurogenica),  litiasis  urinaria familiar,   entre   otras,   porque   todas   estas   patologias   pueden   alertarnos   sobre   la posibilidad de que se presente en el paciente investigado.

Es  muy  importante  conocer  el  estado  psicologico  del  paciente  y  de  su  entorno familiar y  social inmediato,  porque no son  pocos  los  casos  en los  que dichos  factores psicologicos  seran  los  causantes  del  agravamiento  de  la  sintomatologia  urinaria  bien sea  de  llenamiento  o  de  vaciamiento,  o  que  sea  el  causante  de  que  un  determinado esquema de tratamiento, exitoso en la mayoria de los pacientes, no nos de el resultado esperado.

Es  tambien  importante  preguntar  sobre  los  antecedentes  quirurgicos  del  area pelviana,  del  area  retroperitoneal,  y  sobre  todo  del  area  medular  toraco-lumbo-sacra. Inclusive averiguar si ha presentado enfermedades congenitas medulares o del sistema urinario inferior, que vayan asociados a estados de hiperactividad vesical.

Son  muchas  las  ocasiones  que  gracias  a  un  interrogatorio  preciso  y  detallado, podremos  orientar  un  diagnostico  por  el  camino  justo,  sin  requerir  de  examenes costosos  y  sofisticados,  que  consumen  tiempo  y  dedicacion  de  pacientes,  personal paramedico y personal medico, ademas de los encargados en cada familia afectada.

Importante   es   precisar   en   relacion   con   la   sintomatologia,   la   duracion   y caracteristicas  de  los  sintomas  que  presente  el  paciente.    No  nos  olvidemos  que  la gradacion de cada sintoma en particular, dirigira nuestros esfuerzos terapeuticos, hacia el renglon que ocasione mas molestia al paciente.

Es necesario preguntar las circunstancias que rodean la aparicion de determinado sintoma (desencadenantes).

Dentro  de  las  preguntas  no  debemos  pasar  por  alto  el  tipo  de  alimentacion  que tiene  el  paciente  interrogado  (irritantes  urinarios,  liquidos  que  determinen  un  patron miccional  exacerbado,  como  por  ejemplo  las  bebidas  con  cafeina  (cafe-te-chocolate), bebidas  alcoholicas  u  otros  liquidos  diureticos,  ademas  de  conocer  la  cantidad  de liquidos ingeridos diariamente por el paciente.

Conocer  si  nuestro  paciente  ha  tenido  necesidad  del  uso  de  pañales  o  de cualquier otro tipo de proteccion para combatir la sintomatologia urinaria.

Para   concluir   en   la   historia   clinica   resulta   de   suma   importancia   averiguar, cualquier  tipo  de  antecedente  que  de  una  u  otra  manera,  tenga  que  ver  con  los trastornos  urinarios  del  paciente,  porque  en  el  caso  que  nos  atañe  referente  a  la hiperactividad vesical, muchas seran las ocasiones que con el interrogatorio solamente, haremos  no  solo  el  diagnostico  del  caso,  sino  que  orientaremos  adecuadamente  la terapeutica a seguir (Norris y Staskin 1996).

En conclusion en la evaluacion de un paciente con hiperactividad vesical debemos perseguir los siguientes objetivos:

 

 

a.   Tratar de precisar las etiologias determinantes de hiperactividad vesical, que sean transitorias y por ende reversibles.

b.   Tratar de precisar etiologias curables de hiperactividad vesical.


c.   Tratar   de   precisar   enfermedades   graves,   coincidiendo   con   la   hiperactividad vesical.

d.   Tratar de precisar causas neurológicas de hiperactividad  vesical.

e.   Tratar de esquematizar las opciones terapeuticas contra la hiperactividad vesical.

f.   Tratar  de  conseguir  que  dicha  evaluación  y  posteriormente  su  tratamiento  sean eficaces y lo mas económicas posibles.

 

 

2. Slntomatologia

Pacientes    que   exhiban   frecuencia   urinaria,    nocturia,    urgencia   urinaria    e incontinencia de urgencia, podrian presentar hiperactividad vesical.

Existen  cuatro  componentes  fisiopatológicos  involucrados  en  el  origen  de  los sintomas   urinarios   bajos,   tanto   de   vaciamiento   como   de   llenamiento   vesical. Usualmente se combinan de manera que no podemos explicar la sintomatologia urinaria basados  unicamente  en  un solo componente,  aspecto  este que  explica y  sustenta los tratamien-tos  combinados  para  eliminar  o  mejorar  sustancialmente  la  sintomatologia urinaria molesta que altera la calidad de vida de nuestros pacientes urológicos.   Estos cuatro componentes son:

 

 

a.       Componente del musculo detrusor "per se".

Tanto   por   su   hiperactividad   (vejiga   hiperactiva),   como   por   su   hipoactividad (contractilidad    deficiente),    asi    como   tambien    por    la    afectación    misma    de   la microestructura  del  musculo  detrusor  por  la  presencia  de  una  serie  de  factores  como son   la   edad,   enfermedades   que   afectan   la   vejiga   urinaria   (ej.   enfermedades neurológicas),   trata-mientos   urológicos   recibidos   entre   los   que   se   cuentan   la quimioterapia  intravesical  por  cancer,  o  la  radioterapia  por  la  presencia  de  cancer prostatico o vesical, entre otros factores.

Inclusive en ocasiones hay una mezcla de las dos condiciones mencionadas con anterioridad, como es el caso del sindrome de hiper-actividad vesical con contractilidad deficiente (HVCD) (Blaivas).

 

 

b.      Componente obstructlvo "organlco-estatlco"

Causado  por  la  obstrucción  de  la  salida  vesical  (SVO),  es  decir  afectación  el cuello  vesical,  usualmente  por  crecimiento  o  aumento  de  volumen  de  la  glandula prostatica, que afecta la eficacia de dicha salida vesical.

 

 

c.       Componente obstructlvo "dlnamlco-funclonal"

Causado  por  el  aumento  del  tono  de  la  musculatura  lisa  (hiper-tonia  muscular lisa), contenida en el estroma prostatico, en la capsula prostatica, en el cuello vesical y en la uretra prostatica, por aumento de la actividad alfa-1-adrenergica.

En  muchas  ocasiones  los  pacientes  pueden  tener  una  mezcla  de  componentes, usualmente   de   los   componentes   organico-estatico   y   dinamico-funcional,   reforzado tambien por el componente biopsicosocial.


 

d.      Componente "biopsicosocial"

Causado  por  la  relacion  directa  que  puede  potencialmente  produ-cirse  entre  la tension-ansiedad   de   la   vida   moderna   con   nuestro   sistema   nervioso   de   relacion (neurovegetativo),   que   puede   evidenciarse   a   traves   de   sintomas   urinarios   de llenamiento-irritativos,  como  estados  de  hiperactividad  vesical  y  en  raros  casos  por sintomas de vaciamiento obstructivos, caracteristicos de una salida vesical obstructiva, usual-mente por hipertonia del piso pelvico muscular en ocasiones unido a discinergias funcionales-conductuales  del  cuello  vesical  (esfinter  interno).    Se  produce  un  circulo vicioso   que   comienza   por   el   estres   del   quehacer   diario,   unido   a   cambios   del comportamiento   tanto   del   piso   pelvico   muscular,   como   del   sinergismo   detruso- esfinteriano  del  esfin-ter  interno,  que  lleva  al  paciente  a  tener  sintomas  urinarios molestos,  que  ocasiona  la  sensacion  de  no  sentirse  bien,  y  esto  lleva  de  manera indefectible a una calidad de vida deteriorada (QoL).

Los sintomas urinarios tanto de llenamiento (irritativos) como   los de vaciamiento (obstructivos),  pueden  estar  relacionados  con  estados  de  hiperactividad  de  la  vejiga, con  la  aparicion  de  contracciones  no  inhibidas  del  musculo  vesical  y  con  un  cortejo sintomatico  caracte-ristico  como  son  la  frecuencia  urinaria,  la  nocturia,  la  urgencia urinaria y la incontinencia de urgencia tanto diurna como nocturna.

Son  numerosas  las  entidades  que  originan  esta  condicion  hiper-activa  vesical. Entre esas condiciones que ocasionan hiperactividad vesical tenemos la salida vesical obstructiva  usualmente  de  origen  prostatico;  la  obstruccion  urinaria  infravesical  por condiciones  congenitas  tipo  valvas  de  uretra  posterior  en  el  nino,  o  las  estenosis uretrales    penobulbares    en    el    varon    adulto;    las    discinergias-disfunciones    o incoordinaciones  del  esfinter  interno  (cuello  vesical),  que  al  tener  que  relajarse  para permitir  el  vaciamiento  urinario  vesical,  permanecera  cerrado  o  semicerrado,  con  lo quese  estaria  originando  un  estado  de  hiperpresion  en  la  vejiga  que  lleva  a  cambios microestructurales  vesicales  y  con  ello  a  la  hiperactividad  y  a  los  sintomas  urinarios; tenemos  tambien  el  envejecimiento  de  la  vejiga  (vejiga  de  senectud),  con  cambios histopatologicos propios del musculo detrusor que llevan a la hiperactividad; estados de irritabilidad de la mucosa vesical, como los podemos ver en las infecciones urinarias, en la  cistitis  intersticial;  en  el  sindrome  uretral  femenino,  usualmente  coincidiendo  cen  la practica clinica diaria, con el sindrome de vaginosis bacteriana; en las cistitis producidas por  los  tratamientos  de  radioterapia  (cistitis  actinica);  en  patologias  oncologicas  que desarrollan  sintomatologia  irritativa,  como  sucede  con  el  carcinoma  in  situ  de  vejiga (Tis),   en   el  cancer   de   celulas   transicionales   de  vejiga,   en   el   cancer  de  celulas escamosas, sobre todo relacionado a pacientes con infecciones vesicales cronicas, con sondas cronicas a permanencia; en el cancer prosta-tico, asi como pacientes sometidos a  cirugia  vesico-prostatica;  y  en  pacientes  sometidos  a  tratamientos  de  quimioterapia intravesical por cancer de vejiga; y en pacientes en etapas terminales del sindrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), ocasionaran al final un estado de hiperactividad del musculo detrusor.


 

Los pacientes tienen en general,  una mala percepcion de su salud urinaria, sobre  todo  en  cuanto  a  la  frecuencia  urinaria  se  refiere,  porque  muchas  veces consideran  que  es  sinonimo  de  salud,  orinar  bastantes  veces  al  dia  (creencia popular muy difundida).

 

 

Es increible, la cantidad de medicos generales y especialistas que no conocen la verdadera definicion de urgencia, frecuencia e incontinencia urinaria.   Si la conocieran, muchos  pacientes  serian  evaluados  y  tratados  precozmente,  mejorando  entonces  su calidad de vida, ya bastante deteriorada por la sintomatologia urinaria.

Para  no  equivocarnos  en  el  enfoque  de  los  sintomas,  y  dar  con  el  diagnostico preciso,  es  imprescindible  hacer  uso  de  todos  los  argumentos  que  esten  a  nuestro alcance, tales como estudios urodinamicos, videoendoscopia, ecosonografia urologica, pruebas    bacteriologicas    especiales    (patrones    de    localizacion    bacteriana),    para pesquisar vaginosis  bacterianas  y  prostatitis  cronica  bacterianas  o  abacterianas,  entre

otras.

Se deben utilizar  metodos  actuales  de determinacion citologica urinaria,  como el BTA test o el NMP22, para investigar la presencia de cancer in situ de vejiga (Tis), que de  ser  positivos,  incitaria  a  la  realizacion  de  uretrocistoscopia,  para  la  constatacion definitiva de dicha entidad oncologica.

Debemos aclarar que el NMP22 (nuclear matrix protein tumor markers), es un test urinario  aun  mas  predictivo  que  la  propia  citologia,  porque  mejora  la  precision  en  la deteccion  de  recurrencia  tumoral  vesical  y  ya  se  sabe  que  en  pacientes  con  mas  de

10,0 U/ml, indica alto riesgo de recurrencia y debemos intensificar nuestra busqueda a traves  de  todas  las  pruebas  que  esten  a  nuestro  alcance,  y  si  el  resultado  da  igual  o menos de 10,0 U/ml, indica bajo riesgo de recurrencia, por lo cual debemos escoger el seguimiento usual que conocemos para pacientes con cancer de vejiga.

Debido  a  que  los  sindromes  obstructivos  de  la  salida  vesical,  asi  como  los pacientes con incontinencia urinaria de esfuerzo,  o con calculos vesicales o ureterales (en  ureteres  pelvianos  y/o  yuxta-vesicales),  o  con  sindromes  de  prostatitis,  asi  como pacientes  seniles  con  episodios  de incontinencia  urinaria,  pudieran  tener los  sintomas caracteristicos de la hiperactividad vesical, deberemos entonces tener, un alto indice de sospecha,  asi  como  realizar los  examenes  que  esten  mas  indicados,  para llegar  a  un diagnostico  preciso.    Por  otro  lado  sabemos  por  experiencia  que  la  relacion  entre sintomas  urinarios  y  variables  urodinamicas  es  incierta,  por  lo  cual  necesitaremos aparte de los hallazgos objetivos y subjetivos, mucha intuicion.

 

 

Frecuencia urinaria

Es  uno  de  los  tres  sintomas  mas  frecuentes  en  pacientes  con  hiperactividad vesical, en union de la urgencia y de la incontinencia de urgencia.

Debemos considerar en su analisis, el numero de micciones del paciente en el dia

y en la noche, volumen orinado, la presencia de urgencia urinaria concomitante con la


frecuencia,  la  presencia  de  episodios  de  incontinencia  urinaria  concomitante  con  la frecuencia,  al  liquido  ingerido  por  el  paciente  y  a  su  relacion  con  los  episodios  de frecuencia,  y  sobre  todas  las  cosas,  a  los  habitos  personales  de  cada  paciente  en referencia  a  la  costumbre  de  orinar,  que  muchas  veces  tiene  raices  familiares  y  por ende son habitos "aprehendidos".

Si  analizamos  la  frecuencia  urinaria,  tomando  en  cuenta  todos  los  parametros arriba   señalados,   tendremos   un   mejor   enfoque   y   por   ende   llegaremos   mejor   al diagnostico   de   las   causas   que   la   originan,   bien   sean   infecciosas,   conductuales, medicamentosas, neurologicas, o por enfermedades determinadas.

 

 

Incontinencia urinaria

En relacion con la incontinencia urinaria, es un sintoma y a la vez un signo, el cual es  muy  poco  considerado  por  los  pacientes,  porque  por  tradicion  es  bien  conocido  el hecho  de  que  hombres  y  sobre  todo  mujeres  por  encima  de  los  40  años,  pueden presentar episodios de incontinencia urinaria, de manera, que es tal la incidencia, que muchas veces por desconocimiento de su significado, se toma como "algo natural" y no se acude al medico para su tratamiento (Blaivas y Sand 1993).

La  incontinencia  urinaria,  puede  ser  un  sintoma,  que  sacamos  de  la  historia medica de nuestros  pacientes,  pero tambien puede ser un  signo,  obtenido  durante  el examen clinico, a traves de ciertas maniobras de provocacion, o tambien puede ser una condicion, que la obtenemos del estudio urodinamico.

La   prevalencia   de   la   incontinencia   urinaria,   varia   dependiendo   de   ciertas circunstancias que rodeen al paciente, como por ejemplo, edad, condicion neurologica, si esta o no recluido en instituciones tipo ancianatos, si esta capacitado para valerse por si  mismo,  del  pais  de  procedencia,  de  su  origen  etnico,  y  de  acuerdo  con  el  tipo  de incontinencia.

A  tal  respecto  mencionaremos  los  factores  que  juegan  un  rol  esencial  en  la continencia  urinaria.   Los  factores  involucrados  en  la  estabilidad del  musculo  detrusor son:  tener  un  control  adecuado  del  sistema  nervioso  central,  normalidad  total  del sistema nervioso periferico, distensibilidad de la pared muscular vesical, y que no haya ni estimulos intrinsecos ni estimulos extrinsecos vesicales.

Los  factores  presentes  en  la  funcionalidad  de  los  aparatos  esfin-terianos,  se dividen  en  factores  pasivos  como  la  mucosa  uretrovesical,  la  musculatura  estriada,  la musculatura   lisa,   las   fibras   colagenas,   las   fibras   elasticas,   y   el   plexo   vascular submucoso normal y factores dinamicos involucrados en la continencia urinaria como el poder soportar los esfuerzos fisicos, la movilidad del eje uretral, las presiones vesicales, una correcta transmision de las presiones abdo-minales sobre la vejiga, una adecuada contraccion de la musculatura estriada voluntaria, y una contraccion refleja adecuada de dicha musculatura estriada.

Dentro de los factores no urologicos involucrados en la conti-nencia urinaria, estan el   tener   una   funcion   cognoscitiva   normal   del   paciente,   un   estado   psicologico satisfactorio,  un  status  funcional  normal,  que  no  haya  aspectos  ambientales  adversos


para  la  continencia  urinaria  de  los  pacientes  y  que  el  entorno  familiar  sea  el  mas adecuado.

Como refiere Payne,  la prevalencia  de la incontinencia urinaria depende del tipo de poblacion que este siendo encuestada.   A pesar de que se ve en todos los estratos de  la  poblacion  y  en  todas  las  edades,  son  las  mujeres  y  los  ancianos  quienes  mas presentan incontinencia urinaria.

Si  tuvieramos  que  especificar  en  la  mujer  y  el  hombre,  el  tipo  de  incontinencia urinaria mas frecuente, diriamos que en el caso de la mujer, aproximadamente el 30% tiene incontinencia mixta, el 50% tiene incontinencia de esfuerzo (IOE), y el 20% tiene incontinencia de urgencia.

En el caso de los hombres, el 20% tiene incontinencia urinaria mixta, el 10% tiene incontinencia de esfuerzo (IOE) y el 70% tiene incontinencia de urgencia.

Podemos  inferir  entonces  que  la  incidencia  de  la  hiperactividad  vesical,  se  vera

sobre la base de la prevalencia de la incontinencia de urgencia.

 

 

Causas de incontinencia de urgencia

Si  la  urgencia  es  de  tipo  motora  (hiperactividad  vesical)  podemos  tener  causas idiopaticas, en las que desconocemos su verdadero origen, causas psicosomaticas, ya mencionadas    con    anterioridad,    causas    por    una    salida    vesical    comprometida (obstructiva),  bien  sea  funcional  u  organicamente  y  causas  de  origen  neurologico, donde tendremos entonces hiperreflexia del detrusor.

Si la urgencia es de tipo sensitiva podremos tener causas como la litiasis vesical, infecciones   urinarias   bajas   (cistitis,   uretritis,   vaginosis   bacteriana-sindrome   uretral, prostatitis,  en  todas  sus  variantes),  cistitis  intersticial  y  causas  como  cancer  vesical, cancer prostatico e inestabilidad uretral.

En el meeting de la Asociacion Americana de Urologia (AUA), desarrollado en San Diego-California,  1998,  se  presento  un  trabajo  de  investigacion  japones,  en  el  que  se demostro  la  autopercepcion  de  la  incontinencia  urinaria  en  una  poblacion  de  3  500 personas de 40 a 75 años, a traves de un cuestionario de incontinencia urinaria de 23 preguntas.   Solo el 3% habia consultado a un medico, un 25% considero el sintoma de la incontinencia como una enfermedad y un 38% considero que dicha condicion podria ser  curativa,  con  tratamiento  apropiado.    Sin  embargo  un  63%  considero  la  perdida involuntaria  de orina,  como  algo inevitable,  debido  a la edad,  un  63% considero  a los episodios  de  incontinencia  como  algo  embarazoso  y  54%  rechazo  buscar  tratamiento con un medico.

Estas  cifras  obligan  a  reflexionar  sobre  la  necesidad  de  crear  conciencia  del problema a nivel de la colectividad, en niveles diferentes de la sociedad.

Antes   de   seguir,   es   importante   recalcar   la   definicion   de   ciertos   tipos   de incontinencia urinaria, que seran de utilidad para la lectura del presente libro.

 

 

Incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE), es la perdida involuntaria   de orina, cuando la presion intravesical supera la maxima presion uretral, pero en ausencia de actividad


del  detrusor,  objetivamente  demostrable  y  con  repercusiones  higienicas  y  sociales  de grado variable.

 

 

Incontinencia  urinaria  por  rebosamiento,  es  aquella  perdida  urinaria  asociada  con una vejiga sobredistendida, por la orina contenida en su interior, con alteraciones de la sensibilidad propioceptiva y nociceptiva.

 

 

Incontinencia    urinaria    mixta,    es    aquella   perdida   de    orina   que   combina   la sintomatologia  de  una  vejiga  hiperactiva,  con  la  sintomatologia  y  circunstancias  que demuestran una incontinencia de esfuerzo.

 

 

Comparando   las   caracteristicas   de   la   incontinencia   de   urgencia,   con   las caracteristicas de la incontinencia de esfuerzo tenemos los siguientes:

 

 

Incontinencia de urgencia            Incontinencia de esfuerzo (IOE)

 

 

No puede ser predecible                              Es predecible

Podria no ser evitada                                    Podria ser evitada

Podria ocasionar grandes                            Ocasiona perdida de pequeñas perdidas urinarias                                                      cantidades de orina Afecta intensamente el aspecto                  Grados variables de afectación emocional del paciente                                             emocional

Produce intenso aislamiento                       El impacto social y familiar es social y familiar                                                          manejable

 

Urgencia urinaria

Blaivas menciona una definicion bastante interesante que dice:

"Es la urgencia precipitada para orinar, asociada a la sensacion de que la miccion es inminente, o que la incontinencia urinaria pueda ocurrir en cualquier momento", esto ultimo   ocasiona   una   condicion   que   se   denomina   "defensive   voiding"   y   que   la pudieramos  traducir,  como   "la  inhibicion  de  una  miccion  inminente"  y  que  no  es  otra cosa, que el acto consciente de evitar un episodio de incontinencia urinaria, con todas las   implicaciones   emocionales,   sociales   y   personales,   que   eso   conlleva  para  los pacientes afectados.

La  urgencia,  tiene  enormes  implicaciones  en  la  calidad  de  vida  del  paciente afectado, por lo cual, el poder eliminar este sintoma, sera sin duda alguna, una de las metas del tratamiento medico de la hiperactividad vesical.

Por  otro  lado,  hace  unos  años  atras,  era  inevitable  pensar,  que  si  el  paciente

presentaba urgencia urinaria, podria ser debida a hiperactividad vesical, o inestabilidad del  detrusor,  como  se  describia  anteriormente.    Pues  bien,  esta  aseveracion  podria estar equivocada.

Cantor  y  Abrams,  demostraron  desde  el  año  1980  y  1983  que  el  55%  de  las


mujeres con incontinencia de urgencia y el 70% de mujeres que se quejan de urgencia urinaria,  no  tenian  ningun  tipo  de  evidencia  de  inestabilidad  del  detrusor,  llamada actualmente hiperactividad vesical (8ae y col. 1998).

En un estudio de investigacion llevado a cabo en 8oston, se demostro que de 210 casos  estudiados  de  hombres  con  sintomatologia  urinaria  de  urgencia,  solo  85  casos tenian hiperactividad vesical y 125 no la tenian.

Por otra parte, se concluyo que los casos que tenian hiperactividad vesical, y no lo demostraran  a  traves  de  una  presion  elevada  de  contractilidad  vesical,  era  porque podrian  tener  una  entidad  recientemente  descrita  que  se  denomina  HVCD,  es  decir pacientes  que  presentan  al  mismo  tiempo,  hiperactividad  vesical,  con  contractilidad vesical deficiente.

Esto nos debe alertar, de que no solo debemos buscar los sintomas cardinales del diagnostico  de  hiperactividad  vesical,  porque  en  ocasiones  tendremos  hiperactividad vesical,    pero    solapada    por    otras    condiciones    patologicas,    como    la    descrita anteriormente.

 

 

Nocturia

En relacion con la nocturia, un grupo de investigadores de Nueva York, analizan a

194 pacientes escogidos al azar, con 129 mujeres y 65 hombres, entre 17 y 94 años.

La   etiologia   de   la   nocturia   fue   clasificada   como   poliuria   nocturna   (PN), hiperactividad   nocturna   del   detrusor   (HND)   y   mixta   (PN+HND)   y   la   poliuria   fue clasificada separadamente (Weiss y col. 1997, 1998).

Las conclusiones del estudio fueron que la etiologia de la nocturia es multifactorial y que con mucha probabilidad, no se relacionan con la condicion urologica subyacente. La sobreproduccion de orina en la noche, es un componente muy significativo en mas del 70% de los casos, la mayoria de los cuales tambien tienen hiperactividad nocturna del detrusor  (HND).

La  nocturia  no  tiene  la  misma  significacion  en  todos  los  pacientes.  Resulta sorprendente saber que del 90% de las mujeres que se levantan 1 o 2 veces por noche, menos  del  4%  lo  consideran  un  problema.   Cuando  se  levantan  mas  de  2  veces  por noche, mas del 80% lo consideran un problema, pero menos del 40% lo consideran de verdad, un problema importante, como para buscar ayuda.

La importancia de la nocturia,  radica  en que  afecta profundamente la calidad de vida del paciente, al interrumpirle el sueño, ocasionandole problemas secundarios en la esfera  nerviosa,  sobre  todo  en  las  edades  seniles,  donde  podria  provocar  accidentes por  caidas,  con  repercusion  en  el  sistema  esqueletico,  que  afectarian  aun  mas,  la  ya deteriorada calidad de vida.

Las   tres   categorias   de   las   nocturias   son:   la   poliuria   nocturna   (PN),   la hiperactividad nocturna del detrusor (HND) y la nocturia mixta (PN+HND).

Entre las causas de la poliuria nocturna (PN) se mencionan: insuficiencia cardiaca congestiva  (ICC),  diabetes  mellitus,  diabetes  insipida,  insuficiencia  venosa,  ingesta excesiva  de  sal,  ingesta  liquida  excesiva,  sobre  todo  en  la  segunda  mitad  del  dia,


insuficiencia renal cronica,  sindrome nefrotico,  hipoalbuminemia,  ingesta de diureticos, sobre todo en la tarde.

Entre  las  causas  de  la  hiperactividad  nocturna  del  detrusor  (HND),  la  cual  nos atañe directamente en este libro, tenemos: calculos vesicales, sindromes de ansiedad, entidades oncologicas como el cancer de vejiga, cancer de prostata y cancer de uretra, sindromes  inflamatorios  vesicales  como  la  cistitis  bacteriana,  la  cistitis  intersticial,  la cistitis    tuberculosa,    la    cual    esta    llamativamente    incrementandose    en    paises subdesarrollados   e   incluso   en   paises   desarrollados,   y   la   cistitis   postradioterapia (actinica).

Tambien  la  produce  una  salida  vesical  obstructiva (SVO)  de  etiologias  variadas, disfunciones   miccionales   aprehendidas,   causas   de   tipo   farmacologicas,   como   las xantinas  (teofilina  y  cafeina)  y  los  beta  bloqueadores.    Las  entidades  inflamatorias prostaticas como las prostatitis agudas, cronicas o los abscesos prostaticos, los calculos ubicados en el tercio distal ureteral, la amiloidosis vesical, y la endometriosis vesical, asi como  las  comunicaciones  anomalas  de  la  vejiga  con  el  sistema  intestinal  (fistula enterovesicales), podrian producir hiperactividad nocturna del musculo detrusor.

Lo     importante   de   este   tema,   bien   sea   la   nocturia,   parte   fundamental   del diagnostico  clinico  de  la  hiperactividad  vesical,  como  la  hiperactividad  nocturna  del detrusor  "per  se",  pueden  ser  tratados  con  farmacos  tipo  tolterozine  o  cloruro  de oxibutinina,   con   excelentes   resultados   clinicos,   lo   cual   ayudara   enormemente   al paciente,  en especial al  anciano,  que cree que  la alteracion de su sueño,  forma parte fundamental de su vejez, por tanto su tratamiento y mejoria lo reconfortara bastante.

 

 

3. Vejiga hiperactiva y calidad de vida  (QOL)

La calidad de vida relacionada con la salud, se define como un concepto que toma en cuenta las percepciones de cada individuo, a los efectos que una condicion de salud o  de  enfermedad  determinada,  tiene  sobre  el,  incluyendo  sus  posibles  tratamientos  y sus consecuencias sobre su calidad de vida diaria (Jackson, 1997).

Abrams  (Dallas  1999)  del  Bristol  Urological  Institute,  señala  que  calidad  de  vida (QoL)  podria  considerarse  un  estado  completo  de  bienestar  fisico,  mental  y  social, muchas veces ajeno a la presencia o no de una enfermedad coexistente.

Testa  y  col.  (1996)  definen  el  concepto  calidad  de  vida  de  la  manera  siguiente: aspectos   fisicos,   psicologicos   o   sociales   relacionados   con   la   salud   y   que   son influenciados  por  la  experiencia  de  la  persona,  sus  creencias,  sus  expectativas  y  sus percepciones, colectivamente denominada "percepcion de salud".

La  Organizacion  Mundial  de  la  Salud  (WHO)  en  su  protocolo  de  estudio  sobre calidad  de  vida,  la  define  como:  las  percepciones  individuales  del  cada  persona,  en relacion a su posicion en la vida, en el contexto de la cultura y del sistema de valores en la cual  esa persona vive,  en relacion  a sus  metas,  expectativas,  estandares  de vida y preo-cupaciones que podria tener.

Es sin duda alguna, una extraordinaria definicion, por lo cual vemos que facil seria equivocarnos,  si  trataramos  de  homologar  o  igualar  a  todos  los  integrantes  de  una


comunidad,  población  o  nación  en  un  cuestionario  de  calidad  de  vida,  porque  por  la definición, nos percatamos que es algo "netamente individual de cada ser humano", sin embargo como todos los cuestionarios, serviran para darnos una orientación sobre algo que  esta  tomando  el  lugar  de  primera  fila  que  siempre  ha  debido  tener,  como  es  la calidad de vida de cada ser humano, este o no enfermo (Norton 1997).

 

 

¿Qué aspectos toma en cuenta el concepto calidad de vida (QoL)?

Al  valorar  a  un  paciente  en  relación  con  su  calidad  de  vida,  debemos  hacerlo  a traves de cuestionarios tales como el Psychosocial Adjustment to Illnes Scale o el Short Form  36,  o  el  Nottingham  Health  Profile,  o  el  Incontinence  Distress  and  Incontinence Impact Inventory o el Sikness Impact Profile (SIP), el King's Health Questionnaire (UK), Euro  QoL,  ICI-Q  Long  Form,  o  ICI-Q  Short  Form  y  que  en  general  valoraran  las siguientes funciones:

 

 

a.   Función emocional (episodios de ansiedad, preocupación, y/o depresión)

b.   Función  fisica,  poder  movilizarse  y  trasladarse,  cuidarse  por  si  mismo  y  poder realizar ejercicios fisicos.

c.   Función  social  (en  sus  diferentes  aspectos,  como  son  el  social,  el  intimo  y  las actividades de ocio tan utiles en la vida moderna).

d.   Poder   llevar   a   cabo   una   actividad   determinada,   bien   sea,   como   empleo determinado, como actividades del hogar, o actividades adquisitivas.

e.   La presencia o ausencia de molestias o sintomas dolorosos. f.   Calidad de sueño del paciente,

g.   Sintomas especificos que determina la hiperactividad vesical.

 

 

No hay duda, de que debemos enfocar el aspecto "calidad de vida" no sólo para las enfermedades oncológicas, sino para todas aquellas enfermedades que de alguna u otra forma, pueden repercutir en el desenvolvimiento de nuestra vida diaria (Lenderking y col. 1996).

Cuando  un  paciente  tiene  vejiga  hiperactiva,  puede  tener  sintomas  molestos  de llenamiento vesical, entre los cuales la frecuencia urinaria, es el mas preocupante, junto con  la  urgencia  urinaria,  y  esta  muchas  veces,  puede  desembocar  en  un  episodio  de franca incon-tinencia urinaria, con lo cual se afecta enormemente la calidad de vida del paciente,   en  sus   aspectos   sociales,   hogareños,   psicológicos,   laborales   e  intimos. Abrams (Dallas 1999) mencionaba un reporte de los alcances de la incontinencia en la vida  de  una  mujer  y  daba  cifras  preocupantes  en  cuanto  a  que  aproximadamente  un

60% de mujeres con incontinencia urinaria evitan salir de su casa, un 45% evitan usar transportes publicos, y un 40% evitan realizar actividad sexual.

Esta descrito que de un 15% a un 30% de las mujeres, tomando en cuenta todas las  edades,  pudieran  estar  afectadas  de  incontinencia urinaria y  eso afectar las  areas sociales, emocionales, ocupacionales, e intimas (Thomas, 1980).

Hay  factores  que  resultan  inclusive  mas  importantes  que  la  propia  incontinencia


urinaria,  por  muy  intensa  que  esta  sea  y  son  los  que  en  realidad,  convierten  a  la incontinencia  en  un  tremendo  problema  para  el  paciente.   Factores  como  la  edad,  la clase social, la intensidad de participacion en la vida social de la comunidad, la cultura a la que pertenezca, las causas de la incontinencia, el tiempo que tenga con los sintomas urinarios y la coexistencia con otras enfermedades que pueda tener el paciente.

Si queremos "entrar" dentro del problema de cada paciente, para poderlo ayudar mejor, sera indispensable considerar cada uno de los factores arriba senalados.

La incontinencia urinaria, puede afectar la esfera intima, psicologica, ocupacional y social del paciente, llevando a una reduccion de su "contacto social" y en ocasiones a reducir  su  "contacto  intimo",  presentando  trastornos  psicologicos  de  rango  variable, alteraciones   en  los   patrones   de  sueno  y   a  evitar  como  persona,   todas   aquellas circunstancias  que  puedan  ocasionar  una  contraccion  no  inhibida  del  detrusor  (eNI), como  por  ejemplo  levantar  pesos,  correr,  hacer  aerobics,  bailar,  o  a  realizar  inclusive oficios   del   hogar   y   otras   acti-vidades   del   quehacer   diario,   que   desencadenen hiperactividad vesical y en consecuencia incontinencia urinaria.

A pesar de lo  que hemos  visto  en relacion con  el impacto que la sintomatologia urinaria  vista  en  la  hiperactividad  vesical  tiene  sobre  la  calidad  de  vida  de  cada paciente,  mas  de  un  50%  de  las  pacientes  femeninas  incontinentes  urinarias,  nunca acuden a una consulta medica especializada.

En  este  aspecto,  los  sintomas  urinarios  se  han  erigido  en  el  aspecto  mas importante a tomar en cuenta en enfermedades  como las  prostatitis, en el crecimiento de  la  glandula  prostatica  denominado  HPB  o  ePB,  y  en  pacientes  con  incontinencia urinaria, a pesar de que estos ultimos eran tratados de una manera superficial, sin las consideraciones hacia el campo de la calidad de vida que pudieran tener los pacientes que padecen por ejemplo enfermedades tumorales.

En  el  Massachussets  General  Hospital  en  Boston,  en  conjunto  con  la  Escuela Medica de Harvard y la Escuela de Salud Publica de Harvard en Boston, revisaron los aspectos relacionados con la calidad de vida de pacientes con incontinencia urinaria de urgencia.

Entre otras conclusiones, demostraron que el impacto de la incontinencia urinaria no esta solamente en funcion de la severidad de la misma, sino tambien en la habilidad del individuo de solventar dicha condicion.

Una   de   las   grandes   preocupaciones   de   estos   individuos,   es   evitar   que   su

comunidad sepa de su trastorno.   Esto hara que desarrolle elaborados mecanismos de conducta,  para  poder  "manejar"  su  situacion  y  su  condicion  de  hiperactividad  vesical, para que no los descubran.   Orinan frecuentemente, precisan la ubicacion de los banos en su area de trabajo o de diversion, toman mucha menos cantidad de liquidos que lo recomendado, e inclusive se visten con ropas oscuras, para que en caso de una perdida involuntaria de orina, se logre ver menos, con la ayuda incluso de toallas sanitarias.

Todo  esto  nos  sugiere  de  manera  urgente,  la  necesidad  de  nuevos  scores  de medicion del impacto de la incontinencia urinaria de urgencia, sobre la calidad de vida del paciente.


A  tal  respecto,  se  han  creado  cuestionarios  de  sintomas  para  mujeres  con incontinencia urinaria como el I-QoL (Incontinence Quality of Life), desarrollado desde el año  1996  por  Wagner  y  col.,  de  la  Universidad  de  Washington-Seattle  y  el  cual  ha demostrado ser util y practico.   Estos cuestionarios valoran los aspectos subjetivos que sufre el paciente al tener hiperactividad vesical.

Las  percepciones  del  paciente  en  cuanto  a  su  estado  de  salud  en  general,  son perseguidas  por  estos  cuestionarios,  para  finalmente  demostrar    que    la    urgencia urinaria    y    la    incontinencia    de    urgencia  -ambos  sintomas  caracteristicos  de  la hiperactividad  del  detrusor-  originan  en  los  pacientes  problemas  emocionales,  y  una actividad social y recreativa deteriorada, asi como trastornos de su funcion sexual.

Los  cuestionarios  no  solo  valoran  el  grado  de  afectacion  del  paciente  con  su status de disfuncion miccional, sino que valoran la evolucion de la hiperactividad y nos ayudan en evaluar los resultados de cualquier modalidad del tratamiento.   Sin embargo es de suma urgencia, crear un cuestionario que tenga aplicabilidad en todas las areas geograficas  para  poder  correlacionar  todos  los  grupos  de  trabajo  en  esta  area,  sin impedimentos ni diferencias conceptuales.

Inclusive se estan haciendo todos los esfuerzos posibles para crear un sistema de gradacion para pacientes con inestabilidad o hiperactividad vesical, para asi tener otro factor mas a considerar en esta patologia tan frecuente.

Es tan importante el aspecto del deterioro de la calidad de vida del paciente con hiperactividad vesical,  a traves  de las  molestias  urinarias, que desde el punto de vista estadistico,  se  considera  que  tener  una  vejiga  hiperactiva,  tiene  un  impacto  negativo mayor  que  si  el  paciente  tuviera  por  ejemplo  diabetes  mellitus  tipo  II,  o  episodios  de isquemia  miocardica, o inclusive accidentes cerebrovasculares,  que no dejen secuelas locomotoras,   tomando   en  cuenta,   factores   como  el  status   fisico  del  individuo,   la posibilidad de interaccion social (con su familia, con su pareja y con su comunidad), las limitaciones   emocionales   que   ocasione   la   enfermedad   sobre   cada   individuo,   la autopercepcion general de su salud, por parte de cada paciente, los dolores o molestias corporales,   las   limitaciones   fisicas   que   pueda   ocasionar   la   enfermedad   sobre   el individuo, la sensacion de goce y vitalidad que pueda sentir el paciente y por ultimo la nocion de salud mental que dicha enfermedad, pueda ocasionar en el paciente.

Algo  de  suma  importancia  en  estos  tiempos,  son  los  costos  ocasionados  por  la hiperactividad vesical,  los cuales son enormes, con consultas  especializadas,  estudios urodinamicos,  tratamientos  costosos  desde  el  punto  de  vista  medico,  sin  hablar  de tratamientos  alternativos,  como  terapias  de  estimulacion  electrica  del  piso  perineal,  o aditamentos  externos  para pacientes con incontinencia urinaria, sesiones  de ejercicios para  el  refortalecimiento  de  los  grupos  muscu-lares  involucrados  en  la  continencia urinaria,  con  ejercicios  de  Kegel,   dirigidos  y   monitoreados  con  electromiografia  y electroestimulacion, llegando hasta tratamientos de tipo quirurgico.

Todo  esto  ocasiona,  sin  duda  alguna,  altos  costos  que  influyen  tambien  en  la "calidad de vida emocional" que pueda tener el paciente, por lo cual se hace necesario abaratar los costos y enfocar de una manera mas completa y sensata, a los pacientes


que presentan hiperactividad vesical.

Se   hace   indispensable,   en   nuestra   sociedad,   una   mejor   y   mas   completa informacion del problema, sobre todo en poblaciones por arriba de los 40 anos, sin dejar de  mencionar,  que  un  episodio  de  incontinencia,  sea  cual  fuere  la  edad,  es  digno  de atencion, porque pudiera enmascarar problemas urinarios de diversa indole, entre otros la hiperactividad vesical.

 

 

4. Diario miccional

Lo que hace unos anos atras se consideraba de poca importancia, hoy en dia es considerado  muy  util  en  la  practica  urologica  diaria  (Abrams  1996).    Sirve  para  dos propositos, uno, mostrar el compor-tamiento del paciente, que en ocasiones, al unirlo a la entrevista, nos servira para detectar causas prevenibles de incontinencia urinaria, lo que llevara a diagnosticos mas precisos y a esquemas de tratamiento mas adecuados, y   en   segundo   lugar,   se   utiliza   para   monitorear   o   seguir   los   resultados   de   los tratamientos,  porque  de  una  manera  bastante  precisa,  quedan  anotados  todos  los eventos que han tenido lugar en la vida diaria del paciente con respecto a su actividad miccional.

Lo adecuado seria llevarlo a cabo por espacio de dos  semanas,  porque durante este tiempo podemos descubrir patrones miccionales variables que son de gran ayuda para el medico tratante.

Asi   vemos   como   a   los   pacientes   con   sintomatologia   urinaria   molesta,   con

incontinencia  urinaria,  se  le  debe  entregar  un  formato  de  diario  vesical,  en  el  que  el paciente, sea varon o hembra, pueda durante una semana, anotar en un diario todos los acontecimientos  urinarios,  que  de  alguna  u  otra  manera,  mejoraran  la  posibilidad  de realizar un preciso diagnostico, con las obvias repercusiones positivas en el tratamiento.

En estos diarios el paciente debe llenar aspectos como volumen orinado, liquidos ingeridos, frecuencia urinaria, nocturia, episodios de incontinencia, cantidad aproximada de  orina  perdida,  y  que  acontecimientos  rodearon  la  perdida  involuntaria  de  orina. Tambien  es  importante,  el  numero  de  panales  que  el  paciente  usa  por  dia,  y  si  el paciente tiene o no la sensacion de una fuerte y  subita urgencia para orinar.   El diario vesical debe ser de tamano pequeno, completo, no confuso y facil de llevar.

Deben  separarse  los  acontecimientos  que  rodearon  los  eventos  urinarios,  que suceden  en  el  dia,  de  aquellos  que  suceden  en  la  noche,  sobre  todo  en  poblaciones mayores de 60 anos, para poder determinar la presencia o no de poliuria nocturna.

El  diario  vesical  debe  realizarse  por  lo  menos  durante  15  dias,  para  cubrir cualquier  tipo  de  actividad  que  realice  el  paciente,  tanto  en  su  trabajo,  como  en  sus periodos de descanso.

El  objetivo  que  cumple  el  diario  vesical,  es  dejar  claro  de  manera  precisa  y

objetiva, los sintomas del paciente, para poder ser comparados en el curso de cualquier tipo  de  tratamiento  que  reciba  el  paciente.    En  si,  es  una  referencia  excelente  para establecer compa-raciones en el curso del tiempo.

La atencion que preste el paciente al diario  miccional durante la fase  de estudio


del urologo o urodinamista, hara que el paciente mejore, en ocasiones, sustancialmente su  hiperactividad  vesical;  la  verdadera  trascendencia  del  diario  miccional  es  que  se convierta  en  una  guia  terapeutica  para   el  comportamiento   miccional  anormal  del paciente.

Al revisar estos diarios, nos daremos perfecta cuenta, en la mayoria de los casos, lo que presenta el paciente, pues en mi experiencia, es el diario vesical y la entrevista del paciente, lo que permite el diagnostico preciso del paciente portador de disfuncion del sistema urinario inferior.

 

 

5. Examen fislco

Muchas  veces  podremos  hacer  el  diagnostico  con  un  detallado  examen  fisico. Empecemos por recomendar:

 

I. Examen abdomlnopelvlco, examinando el area genital y el area perineorrectal, con   especulo   vaginal   y   con   la   paciente   acostada,   sentada   y   de   pie,   podremos conseguirnos con patologias como las descritas a continuacion:

 

 

a.   Flaccidez de los grupos musculares anteriores y anterolaterales del abdomen, con hipotonia  que  pudiera  presentar  a  nivel  del  resto  de  la  musculatura  de  dicho paciente (piso pelvico).  Debemos notar la presencia de una vejiga distendida, que nos  pueda  orientar  hacia una vejiga de caracteristicas  hiporre-flexicas,  como  las vejigas de los diabeticos de larga data, o vejigas neurogenicas y la cual pueda ser la causa de la incon-tinencia urinaria que presenta el paciente (incontinencia por rebosamiento).

b.   Presencia o no de prolapsos ginecologicos, tipo cistocele, rectocele, enterocele, o histerocele.   Examen rectal en el varon para descartar alteraciones de la glandula prostatica (ver  Capitulo VIII).   Con el examen rectal en el varon y  en la hembra, descartaremos   tambien   patologias   anorrectales.     En   una   palabra   debemos descartar  cualquier  disfuncion  del  piso  pelvico  muscular.  (Se  recomienda  ir  al Capitulo  VII  de  este  libro  para  profundizar  sobre  la  evaluacion  del  piso  pelvico muscular al examen fisico, lo cual considero de suma importancia para el correcto enfoque terapeutico de pacientes con hiperactividad vesical y disfuncion del piso pelvico muscular concomitante).

c.   Alteracion  del  estado  de  trofismo  de  los  tejidos  genitales  en  la  mujer,  es  decir, señales  objetivas  de alteracion  de la calidad de los  tejidos  vaginales,  la  mayoria de    las    veces,    ocasionada    por    hipoestrogenismo    bien    sea    espontaneo (menopausia), o secun-dario a tratamientos quirurgicos de castracion ginecologica (histerectomia total).

El estado de trofismo de los tejidos vagino-uretro-trigonales, es importante dentro de los factores que ayudan a la continencia urinaria de una mujer, porque le da la vascularidad y el sello a los tejidos  (submucosa  y mucosa) de las vias urinarias, ubicados  en  el  trigono  vesical,  cuello  vesical,  uretra  proximal  y  distal,  meato


uretral,   y   la   musculatura   pubococcigea,   ademas   por   supuesto   de   las   vias ginecologicas.  En todos estos sitios recordemos que hay receptores estrogenicos que son determinantes en el estado de trofismo tisular antes mencionado y en la eficacia de dichas estructuras.   Esto tendra sus implicaciones en lo que se refiere a tratamientos hormonales en la hiperactividad vesical.

Este   hallazgo   puede   explicar   episodios   de   incontinencia   urinaria,   asi   como episodios  de  infeccion  urinaria,  muchas  veces  no  demostrado  en  examenes convencionales  de  cultivo  y  sedimento  urinario.    Puede  tambien  explicar,  una sintomatologia urinaria vaga y  molesta, que puede confundirse en ocasiones con hiper-actividad vesical.

Esta alteracion del trofismo se vera confirmada por dos cosas, la primera por una videoendoscopia urinaria y la segunda por la mejoria que tendra el paciente, con el   tratamiento   sustitutivo   hormonal,   al   cabo   de   pocos   meses   de   haberse comenzado.

d.   Alteraciones  o  no,  del  meato  uretral  en  el  hombre  y  en  la  mujer  de  todas  las edades, preferentemente en la edad senil.

e.   Cicatrices  que  evidencien  que  el  paciente  haya  sido  sometido  a  cirugias,  tanto

abdominales  como  pelvianas,  como  en  la  columna  vertebral  y  en  la  region sacrococcigea, asi como en el area genital del paciente.  Por lo cual es importante buscarlas, porque nos podrian ayudar de manera considerable.

f.   Realizar   medicion   de   los   angulos   de   continencia,   uretrovesical   anterior   y

uretrovesical  posterior,  por inferencia  del  anterior y  por  supuesto constatado  por examenes  radiologicos  del  tipo  de  la  cistografia  miccional  con  placas  oblicuas miccionales, de la cual hablaremos mas adelante.

Es   importante   ademas   realizar   calibracion   uretral   femenina,   para   descartar

procesos  de  tipo  organico  de  obstruccion,  que  pudieran  ayudar  al  diagnostico  y ulterior tratamiento.

Debemos  descartar  la  posible  presencia  de  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo (IOE),  al  pedirle  a la paciente con  la vejiga llena,  que  realice esfuerzos  tipo tos, estornudos, pujar, caminar o saltar.

No creemos util el Test de Bonny-Marshall, por cuanto es confuso de interpretar, sobre todo,  cuando no realizamos  una correcta  elevacion de los  fondos  de saco vaginales laterales, sino que mas bien comprimimos la parte central vaginal y con ello la uretra, dando resultados erroneos.

g.   Descartar  la  presencia  de  hernias  abdominales  o  inguinales,  que  por  inferencia podrian  significar  disfunciones  miccionales  sea  por  vejigas  hiporreflexicas,  o  por una salida vesical obstructiva.

 

 

II. Examen neurológico

Con  la  determinacion  de  reflejos,  observacion  de  la  marcha,  reflejo  aquileano, reflejo bulbocavernoso, sensibilidad abdomino-pelvica, perineal, genital y examen de la columna  lumbo-sacro-coccigea,  los  cuales  nos  aportan  datos  para  considerar  una


posible etiologia neurologica en el paciente afectado por hiperactividad vesical.

Un buen examen neurologico comienza con la presencia del paciente en nuestra sala de entrevista, porque su porte y manera de caminar pueden indicarnos la presencia de trastornos neurologicos.   Debemos fijarnos  en su conversacion, en su coordinacion motora, en sus rasgos faciales, porque nos pueden indicar patologias neurologicas, que podrian repercutir en la esfera urinaria.

Debemos  evaluar  el  tono  esfinteriano  y  el  control  esfinteriano,  al  introducir  un dedo examinador en el ano-recto del paciente y  pedirle que apriete el dedo.   Esto nos evidencia  una  debilidad  o  inca-pacidad  del  esfinter  a  contraerse  energicamente  y  de manera voluntaria y  por supuesto a relajarse de igual manera, lo que nos traducira de ser anormal la respuesta, una afeccion neurologica.

El reflejo bulbocavernoso lo chequearemos al pellizcar el glande o el clitoris y con un  dedo  introducido  en  el  ano-recto  comprobaremos  la  contractilidad  o  no  del  piso pelvico muscular (musculos bulbo-cavernosos) y del rabdoesfinter.

Otra manera de provocarlo es al colocar una sonda de Foley y traccionar el balon contra el cuello vesical, esto provoca la contraccion de la musculatura bulbocavernosa. Nos   valora  la  integridad  del  arco  reflejo  sacro  82-83-84.     8i   no   esta  presente, podriamos  tener  una  lesion  neurologica,  es  decir  tendremos  una  lesion  completa  de motoneurona  inferior,  pero hay  que  puntualizar  que  de  un  20%  a  un  30%  de  mujeres normales, no presentan dicho reflejo.

No nos olvidemos de la prueba del hisopo o prueba del Q-tips, el cual nos valora el grado de movilidad uretral y el angulo uretro-vesical anterior y esto nos ayudara en el diagnostico de una posible IOE (tipo II).

La  incontinencia  urinaria  de  origen  neurologico,  como  parte  fundamental  de  un sindrome de hiperactividad vesical, puede presen-tarse y a su vez ser confundida como una  insuficiencia  esfinteriana  tipo  III,  enmascarada  como  si  fuera  una  incontinencia urinaria  de  esfuerzo  (IOE),  como  una  hiperactividad  vesical  (hiperreflexia),  que  como sabemos   tiene   toda   la   sintomatologia   de   las   vejigas   hiperactivas   de   causas   no neurologicas,  y  por  ultimo  podria  presentarse  como  una  vejiga  hipoactiva,  con  la consiguiente    incontinencia    por    rebosamiento,    al    presentar    residuos    urinarios sumamente elevados.

No nos olvidemos  entonces  que los cuatro aspectos fundamen-tales  del examen neurologico en nuestros pacientes con hiperactividad vesical son:

a)   condicion mental del paciente;

b)   condicion sensitiva;

c)   condicion motora del paciente;

d)   condicion de sus reflejos.

 

 

Recordemos  que  hay  puntos  especificos  de  nuestra  anatomia  que  nos  indican dermatomos  especificos  de  valoracion  sensitiva.   En  orden  de  arriba  hacia  abajo,  las tetillas y/o pezones valoraran T4-T5, la region umbilical valorara T10, la base del pene, la  parte  superior  del  escroto  y  los  labios  mayores  valoraran  L1,  la  parte  media  del


escroto con los labios menores valoraran L1-L2, region anterior de la rodilla valorara L3, la planta del pie y region lateral del pie valorara S1, y la zona de la piel perianal y  del perine valorara el segmento S3-S4-S5.

Si  vieramos  en  el  examen  fisico  que  realizamos,  que  hay  un  posible  substrato neurologico  en  nuestro  paciente,  es  fundamental  complementarnos  con  la  opinion autorizada de un neurologo, porque sera de gran ayuda para el paciente.

 

 

6. Examen de orina

Cualquier sintoma urinario, por concepto, puede atribuirse a un proceso infeccioso dentro del sistema urinario.     En el caso que nos atañe, de la vejiga hiperactiva, con su sintomatologia caracteristica de urgencia,  frecuencia,  nocturia,  e incontinencia urinaria de   urgencia,   podria   confundirse   facilmente   con   sindromes   urinarios   vesicales, caracterizados   por   inflamacion   de  la   misma,   o  bien   con   patologias   que  originan hipersensibilidad vesical y una distensibilidad reducida de la vejiga.

Debemos utilizar metodos de determinacion citologica urinaria, como el BTA test o el NMP22, para pesquisar la posible presencia de cancer in situ de vejiga o cancer de celulas  transicionales  de  vejiga  (Tis),  que  pudiera  dar  la  misma  sintomatologia  arriba descrita,  asi  como  la  determinacion  del  PSA  total,  libre  y  libre  total,  porque  tambien casos de cancer prostatico podrian estar responsabilizados por dicha sintomatologia.

Se   hace   indispensable   por   tanto,   realizar   examenes   de   orina   simple   con determinacion del sedimento urinario y  urocultivo, asi como examenes  mas completos como  por  ejemplo  la  pesquisa  bacteriologica  o  microbiologica  del  aparato  genital masculino y femenino (Carmona).

No  nos  olvidemos  que  el  hallazgo  de  hematuria  microscopica,  al  igual  que  la presencia de piuria, puede en algunos casos ser ocasionada por entidades nosologicas como la cistitis intersticial, la cistitis actinica (por radioterapia), y enfermedades cronicas de las vias urinarias como la TBC genitourinaria.

Si  vemos  que  los  analisis  urinarios  denotan  hematuria,  bacteriuria  moderada  y mucina   abundantes,   con   urocultivo   negativo,   es   importante   descartar   patologias inflamatorias/obstructivas, de posible larga data, como por ejemplo calculos urinarios y los sindromes de prostatitis.

 

 

7. Estudios radiológicos

Si consideramos  la  hiperactividad vesical,  como  un comporta-miento anormal  de la vejiga en su fase de llenado vesical, podemos en cierta forma, asociarla a trastornos neurogenicos de la vejiga, por lo cual estan indicados estudios de imagenes del sistema urinario  superior   e  inferior,   como  son  la   urografia  de   eliminacion,   la  cual  puede evidenciar  repercusiones  de  dilatacion  del  sistema  colector  renal,  o  bien  la  ecografia renal, inocua e igualmente efectiva.

Sin  embargo  es  importante  mencionar,  que  es  muy  raro  ver  en  pacientes  con vejigas  hiperactivas,  dilatacion  del  sistema  urinario  superior,  es  decir  hidronefrosis  u otros grados de ectasia renal.


Bien  sea  con  la  urografia  de  eliminacion  o  con  la  ecografia,  debemos  descartar obstruccion  del  sistema  urinario  superior  e  inferior,  sobre  todo  de  la  salida  vesical, porque tendra repercusiones en la posible etiologia de la hiperactividad vesical.

Es importante confirmar la presencia de residuo urinario posmiccional  significativo

(RPM alto).

Sin  embargo  dejaremos  el  estudio  urografico  con  contraste,  solamente  para aquellos pacientes que tengan un alto indice de sospecha de dano del sistema urinario superior,  con  posibilidades  de  dilatacion  del  sistema  colector  y  en  pacientes  con episodios de infeccion urinaria superior, de dudosa etiologia.

Si existiera la posibilidad de que  el paciente presentara una posible  enfermedad neurologica, es necesario solicitar estudios de imagenes que nos puedan ayudar en el diagnostico de patologias vertebrales y/o medulares, por lo cual es esencial solicitar una placa  simple  para  determinar  anomalias  oseas  y  pedir  una  resonancia  magnetica nuclear (RMN).

Otro estudio de gran utilidad, sobre todo cuando lo unimos a una placa simple de abdomen,  es  la  ecosonografia  renal  y  vesical,  en  la  que  de  manera  no  invasiva, podemos  constatar  si  hay  o  no  repercusiones  dinamicas  de  obstruccion  del  sistema urinario  superior,  y  donde  podremos  constatar  la  presencia  de  patologias  renales  y vesicales, que podrian explicar la sintomatologia urinaria presente.

Actualmente  se  puede  constatar  el  grosor  de  la  pared  vesical,  a  traves  de ecosonografia pelvica y esto puede convertirse en un dato de gran importancia para el urologo que estudia el caso, sobre todo con implicaciones en los factores que podrian afectar la distensibilidad y compliance del musculo detrusor.

Por ultimo, debemos mencionar la cistografia miccional, la cual esta formalmente indicada en la poblacion infantil, que se presenta con episodios de fiebre, con dilatacion anormal del sistema urinario superior (hidronefrosis) y con infecciones urinarias.   Todo esto  para  descartar  patologias  obstructivas,  que  pudieran confundir  el  diag-nostico  de vejigas hiperactivas.

Por  supuesto,  en  las  poblaciones  adultas,  la  indicacion  es  menos  precisa  pero igualmente  necesaria  si  el  urologo,  cree  que  con  este  estudio,  pudieran  aclararse muchos aspectos de la sintomatologia del paciente.

 

 

8. Video·uretrocistoscopia (estudio endoscópico)

Hay varias situaciones  que sustentan la indicacion formal de la uretrocistoscopia en pacientes sometidos a estudio por vejigas hiperactivas.   Una de las indicaciones es como parte de un estudio global del paciente con hiperactividad vesical (HV).   Otra de las  indicaciones  formales  de la videoendoscopia  es  cuando  los  estudios  urodinamicos no han podido reproducir los eventos urinarios molestos, que fueron los que llevaron al paciente a la consulta especializada (sintomatologia hiperactiva vesical).

Otra de las indicaciones de la videoendoscopia es en aquellos casos de pacientes que habiendo mejorado con los tratamientos iniciales convencionales, vuelven a recaer inclusive   de   manera   severa,   con   sin-tomatologia   urinaria   de   llenamiento   y   de


vaciamiento.

Otra  indicacion  de  la  videoendoscopia  es  en  poblaciones  infantiles  que  tengan incontinencia de urgencia, frecuencia urinaria, urgencia y nocturia, que no mejoren con tratamientos  medicos  usuales,  y  que  presenten  cualquiera  de  las  patologias  que  a continuacion  mencionar,  y  asi  tenemos  que  la  enuresis  nocturna,  enuresis  diurna- nocturna, cistitis recurrentes, reflujo vesico-ureteral significativo y vejiga neurogenica no neurogenica  (sindrome  de  Hinman),  podrian  potencialmente  presentar  hiperactividad vesical.

Son  muchos  los  urologos  que  difieren  de  esta  indicacion,  pero  sin  embargo,  es necesario  practicarla,  por  cuanto  estudiaremos  mejor  el  caso,  sobre  todo  en  casos donde  su  realizacion  nos  dara  tanto  al  paciente  como  al  medico  tratante,  una  mayor confianza y seguridad en el enfoque terapeutico utilizado para cada caso.

En relacion con las patologias del adulto, tenemos que tanto el cancer vesical, el cancer prostatico como la cistitis intersticial, puede ocasionar todo el cortejo sintomatico que  acompaña a las  vejigas  hiperactivas,  por  lo  cual  es  importante  mencionar  que se debe  practicar  en  estos  pacientes,  pruebas  como  el  BTA  test,  o  el  NMP22,  para pesquisar  citologias  positivas,  que  nos  ayudarian  a  determinar  la  necesidad  o  no  de realizar   endoscopias,   en   pacientes   con   posibilidades   de   presentar   enfermedades neoproliferativas como el cancer de vejiga o cancer in situ de vejiga (Tis),  asi como el PSA total, libre y libre total, para pesquisar un posible cancer prostatico.

Podemos practicar endoscopia, en pacientes que tengan los criterios diagnosticos y  que  no tengan los  criterios  de exclusion de una cistitis  intersticial,  la cual se  debera practicar bajo anestesia, para lograr una distension vesical a su maxima capacidad.

Hay  un  diagnostico  que  tiene  mucha  vigencia  en  la  actualidad  y   es   el  de "vaginosis bacteriana-sindrome uretral", en las mujeres afectadas de sintomas urinarios irritativos bajos, en los cuales podemos ver los sintomas caracteristicos que presentan las  pacientes  con  vejigas  hiperactivas,  en  los  cuales  debemos  tener un  alto indice  de sospecha  clinica,  para  poder  llegar  al  diagnostico,  que  se  efectua  a  traves  de  la pesquisa bacteriologica ginecourologica y de la uretro-cistoscopia, al poder constatar en muchos  casos,  inflamaciones  del  area  del  cuello  vesical  y  del  trigono  vesical,  con  la presencia  de  lesiones  endoscopicas  caracteristicas  de  inflamacion  cronica  de  dichas areas, como son la presencia de un eritema leve, moderado o severo, la presencia de placas  de  fibrina  (cervico-trigonitis  fibrinosa),  o  la  presencia  de  quistes  en  las  areas antes mencionadas (cervicotrigonititis quistica) y de urocultivos negativos para infeccion urinaria,  con  sedimentos  urinarios  ligeramente  patologicos,  que  puedan  confundir  al medico que sigue el caso.

Por  otro  lado  la  videoendoscopia  urinaria  nos  permite  descartar  la  presencia  de obstruccion  endoscopica  de  la  salida  vesical  (SVO),  asi  como  la  presencia  de  litiasis vesical.  En  referencia  a  los  trastornos  obstructivos  hay  una  situacion  que  se  ve  con frecuencia en mujeres de la tercera edad y es presentar signos endoscopicos de vejiga de   esfuerzo,   con   trabeculaciones   finas   y   gruesas   y   con  estudios   flujometricos   y determinacion  de  residuo  urinario  posmiccional  (RPM),  muchas  veces  completamente


normales.

Esto  puede  tener  relacion  con  cambios  ocasionados  por  la  vejez,  sumados  a  la situacion de "evitar una miccion o defensive voiding", termino utilizado por Blaivas, para describir  la  manera  como  una  mujer  evita  orinarse,  lo  que  llevara  a  la  presencia  de signos endoscopicos de obstruccion (vejiga de esfuerzo), cuando en realidad no existe tal obstruccion.

 

 

9. Estudlo urodlnamlco (Uroneurologia)

"La urodinamica, es la rama de la urologia que estudia los factores fisiologicos y patologicos que estan involucrados en el almacenamiento, transporte y expulsion de la orina, desde el riñon hasta el exterior".

Sin embargo, su popularidad la ha alcanzado, en referencia al funcionamiento y a los  disturbios  del  sistema  urinario  inferior,  donde  cumple  una  destacada  labor  en determinar la manera como funciona el detrusor, en determinar y evaluar la calidad de la  fase  expulsiva  o  de  vaciamiento  urinario  por  parte  del  detrusor,  en  determinar  y evaluar  la  calidad  de  fase  de  almacenamiento  o  llenamiento  vesical,  en  determinar  la efectividad  de  la  salida  vesical  y  en  poder  precisar  con  bastante  exactitud  el  tipo  de trastorno neurologico que pudiera tener un paciente determinado (Griffith 1984).

No existe la menor duda, de que la uroneurologia, que estudia y diagnostica, los trastornos   neurologicos   que   afectan   los   circuitos   de   la   miccion,   en   su   fase   de almacenamiento y de vaciamiento urinario, es un argumento de tal valia, que dia a dia, se  hace  mas  indispensable,  para  poder  llegar  a  diagnosticos,  que  hasta  hace  pocos años no se lograban, e incluso no se conocian (Abrams 1983).

La urodinamica se ha sofisticado en su armamentario tecnologico, y por ende se ha afinado en sus diagnosticos, dando con ello una mejor ayuda a muchisimos casos, que  años  atras  eran  dejados  sin  diagnostico,  o  peor  aun,  se  les  hacian  diagnosticos muchas  veces  equivocados,    con  tratamientos  no  apropiados  y  por  ende  con  la  no mejoria clinica del paciente (Abrahamy 1997).

Es tal, el grado de ayuda que la urodinamica presta al urologo, que gracias a ella, podemos saber o inferir la evolucion que tendra un paciente con trastornos obstructivos de  la  salida  vesical  (SVO),  cuando  se  someta  a  cirugia  de  alivio  de  dicha  salida,  o cuando se someta a cualquier otra modalidad terapeutica, porque nos orienta sobre las repercusiones que esa obstruccion ha ocasionado sobre el musculo detrusor y por ende sobre la fase de almacenamiento y expulsivo vesical (Blaivas 1994).

Podremos  tambien  saber,  cual  sera  la  evolucion  de  una  paciente  operada  de incontinencia  urinaria  de  esfuerzo  (IOE),  porque  como  sabemos,  no  son  pocos  los casos  operados  que  tienen  problemas,  o  evolucionan  torpidamente,  y  es  porque  el medico ignoraba la presencia por ejemplo de un detrusor hiperactivo, o de un detrusor hipoactivo,  bastante  frecuente  en  la  practica  clinica  diaria,  o  de  una  entidad  que  se denomina  HVCD,  lo  cual  significa  hipercontractilidad  del  detrusor  con  contractilidad deficiente,    condicion    esta,    bastante    paradojica,    porque    la    vejiga    muestra    un comportamiento hiperactivo, pero las contracciones en si de dicho detrusor, son debiles


e ineficaces, frecuente en las edades postreras de la vida.

Esto  podria  explicar  numerosos  casos,  en  los  cuales  teniendo  el  paciente  un detrusor   hiperactivo,   en   lugar   de   tener   episodios   de   frecuencia   urinaria   y   de incontinencia   urinaria,   presenta   mas   bien,   episodios   de   retencion   urinaria,   con imposibilidad  de  orinar,  alter-nandolo  con  aislados  episodios  de  incontinencia  urinaria, que se deben a rebosamiento de orina y en ocasiones a las contracciones no inhibidas del musculo detrusor, con volumenes altos de residuo urinario (Blaivas 1994, 1997).

 

 

Los diagnosticos que hagamos a traves de la urodinamica, deberan siempre estar correlacionados con la sintomatologia del paciente y con los signos clinicos que obtengamos de el (Malone 1984).

El unico modo de llegar al diagnostico de una anomalia de comportamiento vesical  es  por  medio  de  un  alto  indice  de  sospecha  clinica  y  a  traves  de  la cistometria del estudio urodinamico.

 

 

A  pesar  de  que  se  ha  profundizado  mucho  en  los  aspectos  tecnologicos  de  los estudios urodinamicos, siguen siendo dos factores los mas importantes para realizar un diagnostico  acertado,  uno  razonar  cada  caso  en  particular  y  el  otro,  poder  reproducir, durante   la   cistometria,   los   eventos   urinarios   anormales,   a   traves,   inclusive,   de procedimientos  sencillos,  porque  son  muchos  los  urologos  que  se  les  dificulta  la adquisicion de equipos urodinamicos costosos y sofisticados.

 

 

En la urodinamica la logica, superara la sofisticacion tecnologica.  Esto sera la diferencia.

 

Lo  que  ha  demostrado  su  utilidad,  es  la  asociacion  de  la  cistometria  con  la determinacion  de  la  presion  del  detrusor  y  la  realizacion  simultanea  de  flujometria urinaria.

Inclusive  actualmente,  en  centros  altamente  sofisticados,  se  estan  realizando

simultaneamente  con  video-cistouretrografia,  para  complementar  la  visualizacion  del comportamiento  miccional  del  paciente,  con  los  hallazgos  que  se  obtengan  de  los estudios o investigacion urodinamica.

En  muchos  textos,  nos  encontraremos  con  la  indicacion  de  la  electromiografia

esfinteriana  (EMG),  pero  en  mi  experiencia  personal,  son  muy  escasos  los  casos clinicos que de verdad lo necesitan, y por otro lado, se puede inferir el comportamiento esfinteriano, con pruebas clinicas sencillas de consultorio, como el reflejo digital anal, el reflejo  bulbocavernoso,  el  reflejo  del  toque  o  pellizco  suprapubico,  o  el  reflejo  ano- cutaneo,  donde  todos  ellos  tienen  como  punto  comun,  que  evaluan  la  integridad neurologica del arco medular sacro  (82-83-84).

8aber como estan estos reflejos, nos porporciona una valiosa informacion acerca de la funcion del detrusor y del esfinter externo,  porque el nervio pudendo y  las fibras motoras parasimpaticas preganglionares se originan en estos niveles.


No  es  raro  conseguirnos  con  pacientes  femeninas  que  presentan  trastornos  del piso perineal y que se evidencia por prolapsos genitales, lo cual en muchas ocasiones se  acompaña  de  sintomatologia  urinaria  que  pudiera  confundirse  con  sindrome  de hiperactividad  vesical  y   por  ello   el   estudio   urodinamico   perseguira  los   siguientes objetivos:

a.   Determinar  la  etiologia  precisa  de  los  complejos  sintomaticos,  entre  los  cuales destacan el cuarteto sintomatico de las vejigas hiperactivas

b.   Descubrir sintomas que estaban "ocultos".

c.   Evaluar la función del detrusor,  bien sea hiperactivo,  normal o con contractilidad deficiente.

d.   Determinar  las  repercusiones  que  un  piso  pelvico  debil,  flaccido,  tenga  sobre  el perfil  cistometrico,  flujometrico  y  sobre  el  residuo  urinario  posmiccional  (RPM)  y por supuesto sobre la sintomatologia clinica del paciente.

e.   Identificar  "factores  de  riesgo"  urodinamico  que  desemboquen  en  nefropatias

obstructivas del sistema urinario superior (hiperactividad vesical con hiperreflexia y con un BLPP -punto de presión de fuga vesical-) mayor de 40 cm de agua.

 

Cistometria urinaria

Sólo este estudio,  podra diagnosticar la hiperactividad del musculo detrusor, que es la entidad nosológica que nos atañe (Hald y Bradley 1982).

Los   patrones   que   exhiba   la   hiperactividad,   en   el   trazado   cistometrico,   son

variables, como describiremos mas adelante (Potenziani y Martinez 1985).

Cualquier contracción fasica involuntaria del musculo detrusor (CNI), con cualquier presión,    que   este   asociada   a   sintomas    de    urgencia,    o   de   perdida   urinaria (incontinencia),  ocurriendo  mientras  el  paciente  trata  infructuosamente,  de  inhibir  la micción, debe ser etiquetada como hiperactividad vesical.

Todos  estos  eventos,  deben  buscarse  durante  la  practica  de  la  cistometria,  a traves  de  maniobras  provocativas,  que  ocasionen  uno  tras  otro,  los  eventos  de  la hiperactividad vesical (Dmochowski 1996).

No nos debemos conformar con una sola modalidad de cistometria, las debemos

agotar  todas,  porque  lo  que  esta  en  juego,  es  el  diagnóstico  preciso  y  por  ende  el tratamiento   apropiado   de   un   paciente,   que   de   otro   modo,   veria   frustadas   sus esperanzas de curarse.

La cistometria en decubito supino, o la cistometria de pie, por si solas, no pueden

diagnosticar todos los casos de hiperactividad vesical, por lo que debemos hacer uso de toda nuestra astucia y pericia clinica para, a traves de maniobras de provocación, poder "disparar", o desencadenar, un evento hiperactivo.

Entre  dichas  maniobras  tenemos,  llenamiento  vesical  rapido,  bien  sea  con  agua

(el medio preferido), o con dióxido de carbono, C02, el cual a pesar de que permite un estudio  rapido  y  a  bajo  costo,  no  es  fisiológico  y  tiene  la  fama  de  "desencadenar" hiperactividad  vesical,  inclusive  con  tasas  de  llenamiento  vesical  consideradas  como "fisiológicas".


Otras maniobras de provocacion son llenamiento vesical con agua fria, sacudir los talones, agacharse,  mojarse las  manos, toser, reirse, pujar, incorporarse en la camilla, trotar  o  marchar,  y  si  fuera  necesario  realizar  pequeños  saltos  en  el  soporte  de  la camilla, cambios de posicion del paciente, en la misma camilla de examen, o inclusive la retirada del cateter.

A  tal  efecto  es  importante,  a  traves  del  diario  vesical,  precisar  muy  bien  los eventos  que  rodean  el  inicio  de  la  sintomatologia  del  paciente,  cuando  tenga  ganas inminentes de orinar, o cuando presente episodios de incontinencia urinaria.

 

 

Como  algo  caracteristico,  los  eventos  precederan  en  pocos  segundos,  la ocurrencia de la sintomatologia, por tanto siempre afirmo que el diagnostico de la hiperactividad vesical comienza en el escritorio del medico, durante la entrevista inicial con el paciente.

 

 

Sabemos que aproximadamente el 45% de los casos de hiperactividad vesical, se podran diagnosticar con la cistometria supina y el 55% restante, con las  maniobras de provocacion.

Volviendo  al  tipo  de  medio  usado,  es  importante  mencionar  que  el  agua  o  la

solucion  salina,  son  medios  mas  "fisiologicos"  porque  se  asemejan  mas  a  la  orina,  y tienen mas habilidad para determinar con precision, la perdida de liquido relacionada a la   presion   de   ese   momento   y   poder   ademas   "demostrar"   visualmente   el   evento incontinente, sea cual fuere la cantidad de orina perdida.

Aun  cuando  no  es  nuestra  intencion  ahondar  en  los  detalles  de  la  cistometria, recomendamos sacarle el maximo provecho a la misma, con la determinacion de todos los datos  que podamos, entre ellos, apuntar la sensibilidad propioceptiva (sensaciones de llenado vesical), las cuales las mas importantes son, la primera sensacion de llenado vesical,  la  sensacion  de  urgencia,  y  la  sensacion  del  fuerte  deseo  de  orinar  y  la sensibilidad  nociceptiva  (molestia  y  dolor  con  el  llenamiento  vesical,  indiferente  de  su volumen).

Apuntar cualquier sintoma que refiera el paciente durante el examen, por ejemplo calor,  incomodidad  suprapubica,  ardor  vesical,  apuntar  en  que  momento  el  paciente presenta urgencia urinaria (ver la hoja de examen de estudio urodinamico del autor).

Debemos  anotar  la  capacidad  de  la  vejiga,  (capacidad  funcional,  que  es  el

volumen  orinado,  mas  el  volumen  residual-RPM)  y  debemos  anotar  los  momentos  en que se ha producido una contraccion no inhibida del musculo detrusor (eNI).

La fase de almacenamiento vesical se subdivide  a su vez  en tres  segmentos,  el primero revela una elevacion ligera de la presion, que se traduce en la respuesta de los componentes musculares y viscoelasticos de la pared vesical, ante el estiramiento de la misma por el llenamiento.

El  segundo  segmento  es  el  llamado  "tono  limbico"  que  define  la  compliance  o distensibilidad vesical.

El tercer segmento, representa una elevacion de la presion vesical, que nos indica


que el componente  o acomodacion viscoelastico de la pared vesical esta exhausto.

La fase de vaciamiento, se caracteriza por un aumento considerable de la presion del musculo detrusor, concomitante con una reduccion importante de la resistencia de la salida   vesical,   con   lo   cual   se   obtiene   un   vaciamiento   satisfactorio   de   la   vejiga (sinergismo).

Es  importante  aclarar  que  si  la  paciente  que  estamos  evaluando,  presenta  una gran   debilidad   central   vaginal   (cistocele   II-III   grado),   es   importante   reducir   dicho cistocele,  mientras  se  este  realizando  la  cistometria,  para  poder  obtener  resultados confiables y mas seguros, que nos permitan enfocar la terapeutica, de manera exitosa.

 

 

Modos de presentaclon de un trazado clstometrlco hlperactlvo

A   traves   de   la   cistometria,   podemos   observar   diferentes   modalidades   de hiperactividad vesical que se describen a continuacion:

a.Vejigas  que  se  comportan  de  una  manera  "estable"  cuando  tenemos  al  paciente  en posicion acostada, mostrando una distensibilidad normal, una sensibilidad normal, una  estabilidad  vesical  normal,  pero  que  cuando  cambiamos  su  postura  y  le pedimos   que   se   levante,   hay   un   subito   cambios   de   todos   los   parametros, observandose  entonces,  una  gran  elevacion  de  la  presion  intravesical,  ocurren contracciones  no  inhibidas  del  detrusor,  con  una  hiperactividad  "in  crescendo", fuga de orina a traves de la uretra, y subito aumento de la percepcion de llenado vesical,   con   sensibilidad   propioceptiva   y   nociceptiva   muy   cercanas.      Esta presentacion,   la  vemos   muy   frecuentemente   en   pacientes   con  incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE) y con la presencia de prolapsos  genitales de diversos grados.

 

 

b.   Vejiga  con  baja  distensibilidad  y  con  reducida  capacidad  funcional,  por  causas muy variadas, descritas con anterioridad, entre las cuales la mas importante es la que  observamos  en  pacientes  seniles,  por  alteracion  miogenica  del  musculo detrusor,   en   pacientes   con   antecedentes   de   radioterapia,   quimioterapia,   de infecciones  urinarias  cronicas,  de  origen  neurologico  usualmente  por  accidentes vasculares cerebrales o enfermedades desmielinizantes.   Se comporta como una vejiga hiperactiva,  por presentar una distensibilidad afectada de  manera intensa. Esta manera de presentacion de la vejiga hiperactiva, es bastante frecuente en la practica urologica diaria.

 

 

c.   Vejiga  de  reducida  capacidad  funcional  con  distensibilidad  normal  y  estabilidad normal.     Ocasionado   por   estados   de   hipersensibilidad,   con  todo  su   cortejo sintomatico,  como  la  urgencia  sensorial,  la  frecuencia  urinaria  y  la  incontinencia urinaria   de   urgencia.     Se   ve   en   casos   de   pacientes   portadores   de   cistitis intersticial,  infecciones  urinarias,  vejigas  actinicas  en  su  fase  inicial,  pacientes sometidos a quimioterapia intravesical.


d.   Vejiga con capacidad funcional normal, y distensibilidad normal, pero presentando hiperactividad  vesical  desencadenada  por  circunstancias  como  saltar,  levantar pesos,  toser,  que ocurren cuando la capacidad funcional vesical esta llegando  a su  nivel  maximo,  desencadenandose  una  contraccion  no  inhibida  del  musculo detrusor.    Es  usualmente  confundida  con  la  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo, pero la diferencia la dara el interrogatorio clinico y el estudio urodinamico.

 

 

e.   En  pacientes  femeninas  con  grandes  prolapsos  genitales,  tipo  cistocele,  que ocasionan sintomas  urinarios  atribuidos  al prolapso en si, cuando en realidad, lo podrian  estar ocasionando patologias  como la incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE),  la  hiperactividad  vesical,  las  cistitis  cronicas,  los  sindromes  uretrales  con vaginosis   bacterianas,   la   hiperactividad   vesical   con   contractilidad   deficiente (HVCD), las obstrucciones de la salida vesical, o los estados de hipersensibilidad vesical ocasionados por entidades como la cistitis intersticial entre otros.

 

 

f.   Contracciones    espontaneas    del    musculo   detrusor,    con   caracteristicas    de hiperactividad, que se suceden a repeticion, y que se producen en la medida que se va llenando la vejiga y se acerca a su capacidad funcional total.

 

 

¿Cemo  diferenciar  las  mujeres  portadoras  de  obstruccien  de  la  salida  vesical

(SVO) de aquellas con contractilidad vesical deficiente (HVCO)?

Cuando la presion maxima del detrusor (Pdet) esta por arriba de 20 cm de agua, con  una  Qmax  por  debajo  de  12  ml/seg,  estaremos  en  presencia  de  una  salida vesical obstructiva.

En cambio cuando tenga una presion maxima del detrusor (Pdet) por debajo de 20

cm de agua con una Qmax por debajo de 12 ml/seg tendra una HVCD.

 

 

Tendra  una  relacion  directa  con  la  accion  del  llenado  vesical,  de  manera  que  cuando este   se   suspende,   se   detienen   las   contracciones   no   inhibidas   del   musculo detrusor y se observara tambien una reduccion marcada en la presion intravesical. Usualmente estas contracciones son de origen neurologico.

 

 

En conclusion, son cuatro los aspectos que debemos enfocar en una cistometria de un paciente con hiperactividad vesical.

 

 

1.   Estabilidad del musculo detrusor

2.   Distensibilidad (compliance) del musculo detrusor

3.   Capacidad vesical (funcional y organica) del musculo  detrusor

4.   Sensibilidad propioceptiva y nociceptiva, durante el llenado vesical.

 

 

Los parametros fundamentales urodinamicos que seran de utilidad para valorar la mejoria de un paciente con hiperactividad vesical son:


a.   La primera sensacion de llenamiento (que debera aparecer mas tardiamente)

b.   La capacidad vesical (que debera aumentar)

c.   La presion miccional del detrusor (que debera disminuir).

 

 

Urodinamia ambulatoria

El   monitoreo   urodinamico   ambulatorio   utiliza   un   llenamiento   vesical   natural "fisiologico"  en  un  paciente  que  permanece  realizando  sus  actividades  diarias  sin interrupcion  y  que  de  presentar  los  sintomas  de  la  hiperactividad  vesical,  tendran  un seguimiento mas fidedigno.

Sin  embargo  tiene  sus  ventajas  y  sus  desventajas  y  en  este  ultimo  aspecto pueden ocurrir "artefactos de movimiento", "artefactos de substraccion",  que originaran una  impresion  equivocada  de  la  actividad  del   detrusor  y   podria  originar  tambien actividad rectal espontanea con incidencia de contracciones  no inhibidas vesicales,  en mujeres asintomaticas (Heslington 1997).

Requiere mas experiencia tecnica para su realizacion, requiere de mas tiempo por el  paciente  y  por  el  medico,  ademas  de  requerir  datos  muy  precisos  por  parte  del paciente que en muchas ocasiones no se pueden conseguir (Ernst 1995).

En  virtud  de  lo  antifisiologico  que  esta  considerada  la  practica  de  la  cistometria

convencional   en   el   consultorio,   se   esta   probando   con   esta   variante   del   estudio urodinamico  ambulatorio,  realizado  a  traves  de  todo  un  dia,  con  pequeños  cateteres uretrales  y  rectales,  que  recogen  la  informacion  a  traves  de  cintas  magneticas  o microproce-sadores.     Ha   demostrado   su   utilidad,   en   pacientes   que   habian   dado resultados normales en la cistometria convencional, pero que en realidad tenian vejigas hiperactivas, por lo cual se afirma que los estudios urodinamicos ambulatorios, son mas sensibles que la cistometria convencional (van Waalwijk y col. 1996, 1997).

 

 

Video-urodinamica

Es  la  union  de  los  estudios  imageneologicos  (fluoroscopia  intermitente),  con  la obtencion  grabada  de  los  eventos  que  se  producen  en  la  vejiga  durante  la  fase  de llenamiento  y  vaciamiento  vesical,  asi  como  de  las  maniobras  de  provocacion  que  se realicen para desencadenar un episodio de incontinencia urinaria.

Es la forma mas completa de investigacion funcional del sistema urinario inferior, cuando se enfoca en conjunto con todo el resto del interrogatorio y el examen fisico.

Es util para precisar el grado de competencia del cuello vesical, para determinar la anatomia  y  movilidad  de  la  uretra  proximal,  sobre  todo  en  casos  de  incontinencia urinaria  de  esfuerzo,  IOE,  donde  sabemos  que  ocurre  un  descenso  rotacional  de  la uretra proximal.   Podemos tambien precisar, cualquier patologia obstructiva de la salida vesical (SVO).

A   traves   de   esta   modalidad   de   estudio   podremos   diagnosticar   deficiencias esfinterianas  intrinsecas,  que  son  en  ocasiones  confun-didas  con  patologias   mas sencillas.


Perfil de presion uretral

Dos aspectos de este estudio merecen mencionarse.   El primero, demuestra que los perfiles de presion uretral se reducen linealmente con la edad, lo cual explica, que la incontinencia urinaria en la mujer, mas precisamente, la de esfuerzo, se incrementa con la edad (Sorenson 1986, 1992).

El  otro  aspecto,   ya  completamente   demostrado,   es   que  hay   una  "caida"  o reduccion  significativa  en  las  presiones  uretrales,  inmediatamente  antes  del  comienzo de un episodio de hiperactividad vesical.   Es decir, antes de producirse una contraccion no  inhibida  del  detrusor  (eNI),  manifestacion  de  la  hiperactividad  vesical,  se  produce una  caida  importante  de  las  presiones  de  cierre  uretral,  con  lo  cual  se  hara  mas propensa la incontinencia urinaria.

Existen test objetivos muy simples que nos ayudan en la evaluacion de la fase de almacenamiento vesical y la continencia del paciente.   Se conocen por sus  acronimos en ingles, para que el lector pueda ubicarlos rapidamente.

 

 

Test del punto de presion de fuga vesical (BLPP)

¿Qué es la BLPP?

Es la presion intravesical,  al momento de producirse por primera vez,  la fuga de orina de la uretra, alrededor del cateter.  Es decir, es la presion vesical que sobrepasa la resistencia uretral.   Esta presion se genera de una contraccion del detrusor que llega al limite de la capacidad viscoelastica de la vejiga, por tanto podemos decir que el BLPP, es la cuantificacion de la resistencia que presenta la uretra a las presiones  generadas por  el  musculo  detrusor  vesical  al  momento  de  su  fase  de  vaciamiento  (expulsivo urinario).

Fueron  McGuire  y  col.  en  1981,  al  estudiar  ninos  con  mielodisplasia  quienes  se dieron  cuenta  de  la  relacion  existente  entre  pre-siones  del  detrusor  al  momento  de ocurrir la fuga de orina y el dano o deterioro del sistema urinario superior (TUS).

Es  un  estudio  estatico  y  su  principal  objetivo  es  lo  concerniente  a  la  presion  de almacenamiento vesical.   Se realiza sin la presencia de pujo abdominal u otras fuerzas extravesicales.   Mide  de  manera  indirecta  la  presion  de  almacenamiento  vesical  y  su distensibilidad.   Tiene implicaciones en el funcionamiento del sistema urinario superior. Es un test que no evalua la continencia urinaria del paciente.

La importancia del test de BLPP, es que evalua la seguridad de las presiones de almacenamiento vesical, en lo concerniente al sistema urinario superior.

Existe una fuerte relacion entre BLPP y la posibilidad de deterioro renal.   McGuire y col. en 1981 demostraron que cuando el BLPP era igual o mayor de 40 cm de agua, los ninos con mielodisplasia tenian hidronefrosis y tenian reflujo vesicoureteral, y todos tuvieron dano renal.

Por tanto tener una presion de almacenamiento vesical alta, manifestada por una BLPP   alta,   podria  predecir   un   deterioro   del   sistema  urinario  superior,   de   alli   su importancia.


Test del punto de presion de fuga con maniobras de Valsalva (VLPP)

¿Qué es la VLPP?

"Es  la presion en la cual ocurre la fuga de orina,  cuando el  paciente realiza una serie  de  esfuerzos  o  maniobras  de  Valsalva,  por  lo  cual  se  concluye  entonces,  que representa la cantidad de presion abdominal requerida para inducir una fuga urinaria".

Es  un  test  dinamico,  que  mide  la  respuesta  del  cuello  vesical  y  de  la  uretra

proximal al pujo abdominal y  al esfuerzo, y por tanto, evalua la habilidad de obtener o mantener la continencia.

Por otro lado el test VLPP fue desarrollado para determinar el punto en el cual el

mecanismo  de  continencia  falla  y  la  fuga  ocurre  con  pujo  abdominal  u  otras  fuerzas externas.   Cuantifica  la  eficacia  en  la  cual  la  vejiga  y  la  uretra  proximal  mantienen  la continencia.

Cuando  el  paciente  presenta  un  trastorno  de  su  funcionamiento  vesical,  o  ha

perdido  su  soporte  uretral,  o  han  recibido  un  dano  vesicouretral,  la  habilidad  de compensar con el cierre vesical en momentos de maximo llenamiento urinario vesical se pierde o se disminuye francamente.

El  VLPP  se  usa  para  ninos  con  incontinencia,  por  vejigas  neurogenicas  o  por

extrofia vesical, asi como tambien se usa para evaluar la eficacia de las inyecciones de colageno, en el tratamiento de la incontinencia.

Se  usa  tambien  en  mujeres  con  IOE  (incontinencia  urinaria  de  esfuerzo),  y  en hombres  con  incontinencia  urinaria  despues  de  prostatectomias  radicales  por  cancer prostatico.

El VLPP diferencia los tipos II (incontinencia clasica o genuina de esfuerzo), de los tipo III (deficiencia intrinseca esfinteriana).

En pacientes con IOE clasica los rangos de VLPP van de 50 a 100 cm de agua,

en cambio los pacientes con deficiencia intrinseca esfinteriana, el VLPP cae por debajo de 60 cm de agua.

Un VLPP entre 0 y 60 cm de agua, nos indica casi con seguridad la presencia de una incontinencia tipo III por deficiencia esfinteriana intrinseca (ISD), un VLPP entre 60 y  90  cm  de  agua,  nos  indica  una  incontinencia  urinaria  tipo  II  por  hipermovilidad uretrocervical,  muy  frecuente  en  nuestras  consultas  o  tipo  III  (ISD)  y  por  ultimo,  un VLPP por arriba de 90 cm de agua, nos indica inequivocamente una incontinencia tipo II, inclusive tipo I, pero nunca un tipo III, con deficiencia uretral intrinseca.

 

 

Limitaciones del Test VLPP

En pacientes con trastornos cognoscitivos, por los efectos obstructivos del propio cateter del estudio, por la presencia de prolapsos genitales grado III o IV, en pacientes con   antecedentes   de   cirugias   o   tratamientos   con   radioterapia   o   traumatismos importantes de la zona hipogastrica, o pelvica, tienen limitaciones para la aplicabilidad del test y por ultimo, el test no puede precisar el momento de la fuga urinaria.

 

 

Objetivos del manejo de los trastornos urodinámicos


1.   Cuidar  el  sistema  urinario  superior,  o  si  fuera  el  caso,  mejorarlo  para  evitar  la insuficiencia renal.

2.   Evitar  o  controlar  los  episodios  infecciosos  urinarios,  tanto  del  sistema  urinario inferior (cistitis), como del superior (pielonefritis).

3.   Lograr un vaciamiento urinario satisfactorio (eficaz), con baja presion intravesical

4.   Evitar,   la   sobredistension   de   la   vejiga,   por   causas   variadas   (vaciamiento defectuoso, o incoordinacion vesicoesfinteriana).

5.   Mejorar   el   almacenaje   urinario,   para   prevenir   o   disminuir   los   episodios   de incontinencia urinaria.

6.   Tener control adecuado de todas las funciones corporales.

7.   No utilizar, o en ultimo caso, utilizar lo menos posible, cateteres y estomas.

8.   Alcanzar la aceptacion personal del problema.

9.   Alcanzar la aceptacion social del problema.

10.   Aceptar el tratamiento y adaptarse a el, de manera espontanea.

11.   Lograr la independencia total del individuo, en el manejo de su problema urinario.

Tratar en lo posible de no depender de nadie para llevar a cabo sus tratamientos urinarios.

 


Capitulo VII

Piso pelvico muscular

 

 

Consiste de musculos, ligamentos y fascias, que conforman un soporte de varias capas o estratos, ubicado en la pelvis inferior.  Falta mucho por conocer, en relacion con la  interaccion  que  el  piso  pelvico  tiene  con  la  esfera  miccional,  sin  embargo,  en  los ultimos  años  se  esta  incrementando  el  numero  de  trabajos  de  investigacion  que  le otorgan una importancia fundamental al piso pelvico muscular, tanto en lo referente a la genesis de los trastornos miccionales, como en lo referente a su tratamiento y a la tasa de exito del mismo.

Se  ha  denominado  tambien  diafragma  urogenital,  diafragma  pelvico  y  su  mayor constituyente es el complejo muscular del elevador del ano, el cual forma un "soporte" que va desde la superficie interna de la region anterior del pubis, hasta la parte posterior de las espinas isquiaticas.

El  complejo  muscular  del  elevador  del  ano  lo  integran  a  su  vez  tres  grupos musculares   que   son:   el   grupo   pubococcigeo,   el   grupo   ileococcigeo   y   el   grupo isqueococcigeo.     Las   fibras   inferomediales   del  grupo   muscular   pubococcigeo,   se denomina tambien puborrectal.

Debemos   mencionar   tambien   que   las   condensaciones   tanto   de   la   fascia endopelvica  como  de  ciertas  partes  del  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano, forman ligamentos que tienen una importante funcion de soporte de uretra, base vesical, y  region  anterior  vaginal.    Estas  estructuras  son:  los  ligamentos  pubouretrales,  los ligamentos uretropelvicos y la fascia pubocervical.

La  vejiga  y  la  uretra,  forman  una  unidad  funcional,  con  interacciones  bastante complejas,  y  con  ellas  el  piso  pelvico  muscular  juega  un  rol  importante  (Mundy  y Thomas 1984).

El   cuello   vesical   y   la   uretra   proximal   en   la   mujer   y   la   uretra   prostatica   y

membranosa en el hombre, son bordeados por la fascia tendinosa de la pelvis, la cual sabemos es una estructura de tejido conjuntivo denso, que se extiende desde el borde inferior  de  la  sinfisis  pubica  a  la  espina  isquiatica;  el  cuello  vesical  se  une  a  esta estructura   conjuntiva   a   traves   del   denominado   musculo   pubovesical,   considerado extension directa del musculo detrusor.

La vagina por su parte, esta adherida fuertemente a los musculos elevadores del ano, justo por debajo del arco tendinoso de la fascia pelvica.  Esta union esta localizada en la zona de la uretra proximal, extendiendose por arriba hasta la vejiga.

El   tejido   conjuntivo   de   la   pared   vaginal   contiene   fibras   colagenas,   fibras

musculares  lisas,  fibras  elasticas,  que  se  entremezclan  con  el  musculo  del  elevador anal.

A  traves  del  musculo  pubovesical,  la  uretra  esta  en  contacto  con  el  musculo elevador anal.

Al  respecto,   Delancey   publico  en   1992   un  trabajo   que  considero   de   suma


importancia,  para  el  tema  que  nos  atañe.   Efectivamente,  el  trabajo  nos  muestra,  los niveles de soporte de la vagina en su tercio superior y medio.

En el nivel I, la fascia endopelvica suspende la vagina en su porción superior asi como el utero, de las paredes pelvicas laterales, a traves de los ligamentos cardinales y de  los  ligamentos  uterosacros,  estas  fibras  del  nivel  I  alcanzan  el  sacro  por  una trayectoria vertical y posterior.

En el nivel II, la vagina esta sostenida por el arco tendinoso de la fascia pelvica, y la fascia superior del grupo muscular de los elevadores del ano.

En  nivel III,  la zona  mas  distal  de la vagina  esta  directamente  sostenida  por las

estructuras circundantes.

Si recordamos del trabajo de Brodel en 1912, anatomista y dibujante, donde dibuj6 el diafragma urogenital femenino,  de una  manera admirable,  nos  daremos  cuenta que eran una serie de fibras  musculares que rodeaban la uretra en toda su longitud, como era  en  el  caso  de  la  uretra  proximal  en  la  mujer,  donde  habia  una  densidad  mas importante  de  dichas  fibras,  logrando  una  funcionalidad  como  un  verdadero  esfinter  y donde en un punto se fusionaban con la   vagina.   Esto ha sido confirmado en trabajos recientes de De Lancey y Oelrich (1988,1980).

Tanto fibras pubouretrales, fibras del bulbocavernoso, fibras pubococcigeas, fibras musculares rodeando la vagina, fibras del musculo pubovesical que hace que la uretra este  en  contacto  con  el  musculo  elevador  anal,  llegando  a  la  fascia  de  Denonvilliers, rodean y suspenden fisiológicamente la uretra en la unión del tercio superior con los dos tercios  inferiores,  que  llegan  al  grupo  de  los  elevadores  del  ano  y  a  la   pared  pelvica lateral,   motivo   por   el   cual   todo   tipo   de   cirugia   (histerectomia,   procedimientos colorrectales,   vesicales)   o   factores   de   deterioro   anatomico-funcional,   por   motivos obstetricos,  que  alteren  ese  equilibrio,  originaran  sin  duda  alguna,  disfuncionalidad  de dicho piso pelvico muscular y por ende ocasionaran tambien trastornos urinarios como hiperactividad vesical, incontinencia urinaria de urgencia, de esfuerzo (IOE) o trastornos defecatorios en diferentes grados.

Esta es  la explicación fundamental,  de por que  una  mujer  que se somete  a  una histerectomia  podria  presentar  posteriormente  una  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo con componentes de hiperactividad vesical (Wall 1994).   La vejiga de dichas pacientes, primeramente  pierde  un  soporte  posterior  fundamental,  para  el  equilibrio  anatómico- funcional,  y  por  ende  altera  sus  ejes,  sobre  todo  el  eje  uretrovesical  posterior  y  en consecuencia  se  altera  el  eje  uretrovesical  anterior,  este  ultimo,  en  menor  grado,  y  al seccionar  la  cupula  vaginal,  se  estaria  interrumpiendo  la  "continuidad"  muscular  de  la que hablabamos anteriormente que conllevaria a una debilidad o deficiencia del soporte muscular en la "continencia" que debe tener dicho paciente.

Ademas  la  alteración  anatómica  del  piso  pelvico  lleva  a  disfuncionalidad  del mismo,  lo  que  lleva  a  cambios  miogenicos  o  neurogenicos  en  el  comportamiento vesical, llevando esto a un comportamiento hiperactivo de la vejiga (Boone y col. 1999).

Esto explica, por que cuando sometemos la musculatura de los elevadores anales

a contracciones repetidas, usualmente por electroestimulación pelvica, la uretra cambia


su posicion y su funcionalidad.

Esta es la base de la fisioterapia muscular del piso pelvico muscular, y es la causa que  motivo  la  clasificacion  de  la  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo  (IOE)  del  autor, porque  se  toma  en  cuenta  el  status  del  piso  pelvico  muscular  y  de  los  elevadores anales, con la presencia o no de prolapso genital, tipo rectocele (ver Capitulo II).

Por otro lado, considero que este factor debera siempre ser tomado en cuenta a la hora de realizar cirugias de incontinencia urinaria de esfuerzo en la mujer y en el mismo tiempo  quirurgico  reparar  o  reforzar  quirurgicamente  tanto  la  pared  vaginal  anterior como  la  pared  vaginal  posterior,  porque  la  transmision  de  presiones  se  hara  mucho mejor cuando todo  el compartimiento vaginal  esta tonico,  lograndose al final un  mejor resultado  quirurgico  de  la  cura  de  incontinencia  urinaria,  sobre  todo  a  largo  plazo, considerando por supuesto que la cirugia es solo una parte de la terapeutica correcta, porque   toda   paciente   debe   tambien   ser   sometida   a   terapias   conductuales   y   a fisioterapia  o  fortalecimiento  del  piso  pelvico  muscular,  cualquiera  fuera  la  modalidad utilizada.

El piso pelvico  muscular es  uno de los  mas  importantes  aspectos  por  medio del cual  se  puede  alcanzar  el  control  voluntario   de  la   miccion,   tanto  en  la  fase  de almacenamiento, como en la fase de vaciamiento y podra retardar, iniciar o interrumpir un acto miccional normal.

Esta accion del piso pelvico, lograda por la musculatura estriada-roja-voluntaria, a traves de su contraccion o relajacion voluntaria, puede afectar, las descargas axonales aferentes/eferentes   y    el   inicio   del   reflejo   neuronal   de   las   vias    neurologicas, comprometidas en el control del detrusor y de la uretra, tanto a nivel periferico, como a nivel medular y del sistema nervioso central.

Sin  duda  alguna,  el  piso  pelvico,  tiene  su  participacion  en  los  episodios  de hiperactividad del musculo detrusor.   Esto lo podemos ver por el solo hecho de que en la  propia  definicion  de  vejiga  hiper-activa  dice,  que  "es  la  contraccion  vesical  ocurrida espontaneamente, o por maniobras provocatorias, mientras el paciente trata de inhibir la miccion",  es  decir,  que  a  pesar  de  que  el  paciente trata  de  suprimir las  contracciones involuntarias (CNI), no lo puede lograr.

"Tratar de inhibir o suprimir la miccion" se podra lograr a traves de la musculatura del piso pelvico.

La disfuncion del piso pelvico muscular en la mujer, puede facilitar la aparicion de

entidades  medicas  como  la  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo  (IOE),  la  incontinencia fecal,  disfunciones  de  la  esfera sexual,  sindrome de relajacion  pelvica  y  sindrome  del elevador del ano y vejiga hiperactiva (Wallace 1994).

En referencia al dolor pelviano cronico femenino,  muchas veces  este es la unica

manifestacion de un comportamiento hiperactivo o inestable de la vejiga urinaria.

Muchas  veces,  estos  trastornos  no  se  consultan  y  por  tanto,  no  son  tratados medicamente, ocasionando un deterioro de la calidad de vida de dichos pacientes.

Esto  puede  prevenirse  a  traves  de  la  educacion  medica  continua  en  diferentes

niveles  de la sociedad,  y  en todos  los  medios  de comunicacion,  y  a traves  de charlas


medicas  que  hagan  llegar  a  la  comunidad  medica  y  no  medica,  la  trascendencia  del problema.  Tambien puede prevenirse, a traves de los chequeos medicos periódicos y a traves  de  la  practica  de  ejercicios  fisicos  especificos,  para  que  no se convierta  en un problema dificil de corregir.

Sabemos que el piso pelvico tiene tres funciones bastante importantes, como son: soporte,  esfinteriana  y  sexual.    La  "función  de  soporte"  de  los  6rganos  pelvianos, proporciona soporte y tonicidad a las paredes vaginales, aspecto muy importante en la genesis   y   tratamiento   de   la   incontinencia   urinaria   de   esfuerzo,   que   en   un   gran porcentaje  se  asocia  a  estados  de  hiperactividad  del  detrusor  y  a  trastornos  del  piso pelviano.

La  otra  función  del  piso  pelviano  es  la  "función  esfinteriana",  porque  el  piso pelviano   contribuye   al   mantenimiento   de   la   continencia,   al   aumentar   la   presión intrauretral  y  estabilizar  las  fascias  endopelvicas  de  soporte  durante  la  contracción muscular.

El  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano,  es  responsable  de  los  cambios anatómicos  de  la  uretra  (elongación  y  elevación),  por  debajo  de  la  sinfisis  del  pubis, durante la contracción voluntaria.  Por otro lado, gracias a los estudios de Gosling y col.

1981), se demostr6 que las fibras estriadas musculares de los elevadores del ano, son

de  respuesta  rapida,  tipo  II,  que  se  contraen  rapida  y  fuertemente  y  por  un  periodo breve, en cambio las fibras del rabdoesfinter uretral son tipo I, de respuesta lenta, que se contaren mas lentamente pero por un tiempo prolongado (tono muscular sostenido).

Los musculos que conforman el piso pelvico, se relajan para el acto defecatorio y

se contraen para el control de los flatos existentes en las vias intestinales.

En  trabajos  de  investigación  se  ha  demostrado  que  el  tener  un  piso  pelvico funcionando  bien,  estabiliza  la  uretra  proximal,  mejora  la  sintomatologia  tanto  de vaciamiento urinario, como de llenamiento vesical, esta ultima, presente en los estados de  hiperactividad  del  detrusor.    Por  lo  cual  hoy  se  sabe  que  tener  un  piso  pelvico muscular  normal,  es  indispensable  para  corregir  posibles  estados  de  hiperactividad vesical que podria presentarse en nuestros pacientes.

La musculatura del piso pelvico, tiene la habilidad de retardar la micción a traves de la inhibición refleja del  musculo detrusor,  lo que esta representado por el asa 4 de Bradley, en los circuitos de la micción.

La ultima función conocida del piso pelvico, es sobre la "función sexual" donde se

produce la contracción de la musculatura perivaginal, durante la relación sexual.

No hay duda que los ejercicios para refortalecer el piso pelvico, mejoran la función neuromuscular  del  mismo,  lo  que  puede  tener  repercusiones  en  pacientes  portadores de hiperactividad vesical.   Esto sera tratado a fondo en el capitulo de tratamiento de la hiperactividad vesical.

Las  disfunciones  del  piso  pelvico  en  la  mujer,  estan  agrupadas  en  4  categorias que  son:  disfunción  por  desuso,  disfunción  de  soporte,  disfunción  hipertónica  llamado sindrome del elevador del ano, y disfunción por incoordinación.

Esta   ultima   disfunción  tiene,   sin   duda   alguna,   relación  con  los   estados   de


hiperactividad  del  detrusor,  porque  la  coordinacion  y  reeducacion  de  los  musculos adecuados en el piso pelvico, que se puede lograr con la tecnica de biofeedback, con o sin estimulacion electrica del piso pelvico (EEPP), ayudara al final a aquellos pacientes que  presentan contracciones  no  inhibidas  del  detrusor  con  discinergia  esfinteriana  del rabdoesfinter,  logrando  luego  de  dicho  entrenamiento,  una  coordinacion  mejor,  una reduccion  o  desaparicion  de  la  sinto-matologia  y  por  ende  una  calidad  de  vida  mas adecuada.

Brevemente quisiera mencionar la afectacion que la edad y los embarazos tienen sobre el piso pelvico muscular.

Los   partos   vaginales   ocasionan   cambios   histomorfologicos   en   la   estructura muscular   de   dicha   zona   (variacion   del   diametro   de   la   fibra   muscular,   fibrosis   y alteraciones  en  la  posicion  de  los  nucleos),  y  ocasionan denervacion del  piso  pelvico. En consecuencia debemos tener muy en cuenta estos factores a la hora de considerar el enfoque de una paciente con trastornos  miccionales  y  con trastornos  asociados  del piso pelvico, que han pasado o por varios partos, y/o  por trabajos de parto prolongados. La multiparidad, produce una elongacion y ampliacion del introito vaginal, ampliandolo y afectando  la  funcion  del  grupo  muscular  puborrectal,  en  relacion  a  la  modificacion mecanica que produce sobre el perine.

Ademas  el  estiramiento  circunferencial  que  se  produce  durante  el  paso  del  feto por el canal del parto, elonga de tal manera las fibras musculares del piso pelvico, que en  ocasiones  no  volveran  jamas  a  tener  su  previa  forma  y  tonicidad,  lo  que  puede originar un defecto central de la pared vaginal superior, con debilidad marcada.

Los defectos de soporte de la uretra en la mujer, afectando su capacidad funcional de  cierre  y  con  ello  su  habilidad  de  "contraer"  la  orina,  se  suman  a  los  cambios ocasionados   por   la   deprivacion   estrogenica   producto   de   la   menopausia   o   de   la castracion  quirurgica,  que  afecta  la  uretra  proximal  y  la  musculatura  lisa  estrogeno- dependiente,  llevando  a  trastornos  troficos,  en  muchas  ocasiones  irreversibles.   Todo esto puede unirse al hecho de que las lesiones  del nervio pudendo durante los  partos pueden, en conjunto con los prolapsos genitales, ocasionar la debilidad o perdida de la tonicidad  musculofascial  necesaria  en  dicha  zona,  y  afectar  la  contraccion  refleja  el rabdoesfinter    periuretral    durante    las    circunstancias    que    elevan    las    presiones intraabdominales en dichas pacientes, como son la tos, los estornudos o la practica de aerobics.

En   un   estudio   de   Mallet   y   col.   en   1994,   aclaran   que   los   cambios   en   la neurofisiologia del piso pelvico muscular, ocurren con el tiempo y no con el antecedente de multiparidad.

El proceso de "denervacion-reinervacion" ocurre incluso en el primer parto vaginal.

Ademas se ha comprobado en mujeres nuliparas con incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE),  que tienen anormalidades en el contenido y el tipo de fibras colagenas del piso pelvico muscular y en los soportes del cuello vesical (Keane y col. 1992).

La  mayor  parte  de  hombres  y  mujeres  con  vejiga  hiperactiva,  cistitis  intersticial,

dolores  pelvicos  cronicos,  colon espastico  o irritable,  cuadros  de constipacion cronica,


incontinencia  fecal  en  grados   variables,   pueden  tener  disfuncion  del  piso  pelvico muscular (Whitmore-Stone-Kim).

Por   otro   lado,   el   prolapso   genital   en   pacientes   femeninas   puede   causar incontinencia  urinaria  pero  tambien  puede  ocultarla.     La  incontinencia  urinaria,  en mujeres con prolapso se produce por hiperactividad vesical por "obstruccion uretral", por la angulacion del eje uretral que ocasiona el prolapso en si y tambien se puede producir por  hipermovilidad  uretral  (descenso  rotacional  de  cuello  vesical  y  uretra  proximal), alejando estas estructuras de las zonas mas importantes de transmision efectiva de las presiones  intraabdominales  e intrapelvicas,  para  lograr  la continencia.   Ambas  causas pueden revertirse con la cirugia (Labasky y Leach 1990).

Por tanto es importante "reducir" el prolapso genital, al examinar estas pacientes, porque  estariamos  enfocando  el  caso,  tal  cual  es,  lo  que  redundara  en  un  mejor enfoque  terapeutico.   Inclusive  examenes  como  el  estudio  urodinamico  y  los  estudios endoscopicos, deben realizarse con aditamentos vaginales, que reduzcan el prolapso al momento  del  examen.   Al  respecto  para  reducir  dichos  prolapsos  podemos  introducir pesarios vaginales para tal fin y cuando valoremos el grado de prolapso, por supuesto debemos retirar el pesario vaginal.

Desde un punto de vista general, tenemos sintomas de lasitud o procidencia de la mucosa  vaginal,  sensacion  de  peso  intravaginal,  trastornos  en  el  coito,  incontinencia urinaria, frecuencia urinaria, urgencia urinaria, trastornos  en la defecacion, usualmente manifestadas como impactacion fecal o falta de propulsion del "bolo fecal" al momento de llegar al recto-ano, incomodidades al deambular,  molestias  o dolores hipogastricos, irritacion de la mucosa vaginal.

Una  vez  que  las  mujeres  han  parido,  tienen  lasitud  y  debili-tamiento  del  piso pelvico muscular y en muchos casos no tienen sintomas, lo cual se denomina prolapso asintomatico.   Entre  un  40%  y  un  50%  de  las  mujeres  que  han  parido,  tienen  grados diversos de prolapso genital.   De este porcentaje, solamente de un 10% a un 25% son sintomaticas.    Un  20%  de  todas  las  mujeres  que  esperan  por  la  realizacion  de  una cirugia  ginecologica  importante  tienen  prolapso  genital,  y  cuando  dichas  pacientes pertenecen a edades seniles, el porcentaje asciende a casi un 60% (Cardozo)

Mas de las 3/4 partes de mujeres con grados variables de prolapso genital, tienen celularidad  muscular  disminuida y  un incre-mento de fibras  colagenas  del  piso  pelvico muscular,  en  comparacion  a  la  cuarta  parte  de  mujeres  normales  que  presentan  el mismo hallazgo.  Esto fue demostrado el año 1987 por Makinen y col.

Examenes  histoquimicos  de  la  musculatura  del  piso  pelvico,  han  demostrado cambios en la fibra muscular, que se denominan, "daños por denervacion" y se observa como un proceso degenerativo normal de la edad, pero que se incrementa tanto con los embarazos-partos,  como  con  la  presencia  de  prolapsos  genitales,  o  de  incontinencia urinaria de esfuerzo (Cardozo).

En un estudio neurofisiologico llevado a cabo por Allen y col. (1990) se demostro que el factor obstetrico que influencia el grado o intensidad de la denervacion del piso pelvico  era  la  duracion  del  pujo  o  esfuerzo  de  la  parturienta  en  la  segunda  etapa  del


parto y el tamaño del feto.   Por otro lado, los cambios  mecanicos de la fascia del piso pelvico  muscular  pueden  estar  tambien  involucrados  en  la  debilidad  muscular  y  en  la produccion de incontinencia urinaria consecutiva al parto (Landon y col. 1989).

El  examen  fisico  del  piso  pelvico  muscular,  donde  se  busca  usualmente  solo  la lasitud  musculofascial,  no  sera  suficiente  para  su  completa  valoracion.     Por  tanto debemos considerar al piso pelvico como uno de los componentes de un vasto sistema de  soporte  postural  integral,  el  cual  incluye  tanto  los  musculos  de  la  pelvis  superior, como los musculos de la espalda asi como el sistema genitourinario (Klutke y Brubaker

1997).

Es   fundamental   entonces,   el   examen   del   piso   pelvico   global   con   sus   tres compartimientos  como  son  el  compartimiento  anterior  (urinario),  el  compartimiento posterior  (colorrectal)  y  el  compartimiento  medio  (genital).   Mas  aun,  en  los  enfoques terapeuticos,  no debemos  efectuar el tratamiento  de  manera segmentaria,  sino global, porque  muchos  pacientes  tienen  mas  de  uno  de  los  compartimientos  mencionados afectados   con   sintomas   variados   para   cada   uno   de   ellos   (incontinencia   urinaria, incontinencia   fecal,   sintomasmiccionales   de   vaciamiento   o   de   llenamiento,   como frecuencia,  urgencia,  nocturia,  sintomatologia  de  colon  irritable,  y  molestias  dolorosas que pueden ser pelvicas, genitales o rectales.

Hay un sintoma en especial, que lo vemos con frecuencia en nuestras pacientes, y es la "falta de propulsion" del bolo fecal, una vez que este llega a la ampolla rectal, lo que origina sequedad del mismo, constipacion e impactacion fecal.

La denominada disfuncion del piso pelvico  muscular puede originarse o bien por

falta de soporte musculofascial (hipotonia muscular), como por hipertonia del mismo.

La  pelvis  superior  podemos  valorarla  cuando  el  paciente  examinado  presenta espasticidad o hipertonia de la musculatura del piso pelvico, ocasionara sintomatologia dolorosa-irritativa, debido a asimetrias posturales y/o a estados de debilidad o flaccidez muscular dinamica.

Con  el  paciente  de  pie  o  sentado  y  el  medico  examinador  detras,  podemos comprobar por palpacion la altura de las crestas iliacas y de las espinas iliacas postero- superiores para comprobar la simetria.   Posteriormente realizamos el test de la flexion, induciendo  al  paciente  a  flexionar  hacia  adelante  el  tronco.    En  este  momento,  el movimiento    del    hueso    innominado    se    evalua    palpando    las    espinas    iliacas posterosuperiores,  porque si  una  de  ellas  se  eleva  mas  que  la  otra,  o  bien  se  mueve mas rapidamente que la otra, indica el lado de la pelvis en el cual el hueso innominado demuestra disminucion de su incursion o movilizacion dinamica.

Ademas se debe examinar la articulacion sacroiliaca, para descubrir inflamacion, dolor a la palpacion.   Si se produce molestia en la palpacion debemos considerarlo un test positivo.

Posteriormente le pedimos al paciente acostarse para evaluar las espinas iliacas anterosuperiores y los tuberculos pubicos en cuanto a su altura, simetria y sensibilidad a la palpacion.   Si vemos  una alteracion en la simetria con sensibilidad a la palpacion nos esta indicando disfuncion sacroiliaca o bien la presencia de una fractura de la linea


innominada.

Si  hay  sensibilidad  de  la  sinfisis  pubica,  nos  esta  indicando  fractura  del  pubis  o pubis en bostezo.  Puede haber irritabilidad ligamentosa o irritabilidad de tejidos blandos circundantes.  Debemos valorar tambien la zona del ileopsoas, los rectos abdominales y los musculos iliacos para descubrir zonas dolorosas.  El area suprapubica debe tambien ser evaluada para precisar el grado de sensibilidad de la pared vesical anterior.

Pasando a los organos genitourinarios (compartimiento anterior y medio), tenemos pacientes  femeninas  con  disfuncion  del  piso  pelvico  muscular  que  presentan  ardor  y dispareunia. Investigar sensibilidad externa (genitales externos), con una gradacion del o al 4.

Es importante en el examen fisico que hagamos precisar los defectos del soporte pelvico  muscular,  evidenciado por los  prolapsos  genitales  que dan  una sintomatologia bastante  repetitiva  y   usual  como   por   ejemplo   presion  o   peso  vaginal;   sensacion desagradable al sentarse, como si se estuvieran sentando sobre algo; sentir que "algo se  les  va  a  salir  de  la  vagina  o  del  recto"  sobre  todo  en  posicion  de  pie  y  mas  aun cuando realiza algun tipo de actividad fisica (Bump y col. 1996).

Es importante mencionar que las pacientes que presentan cistocele, tienen grados variables de disfuncion miccional,  desde la imposibilidad de orinar con facilidad, sobre todo con cistoceles  de gran tamaño, y  tambien produciran sintomatologia "hiperactiva" caracteristica de hiperactividad vesical en un 1o% a 15% de los casos.

Hay una caracteristica digna de mencion en la diferenciacion de los prolapsos de cupula  vaginal  y  el  enterocele,  y  es  que  en  los  prolapsos  de  cupula  vaginal,  hay  un acortamiento de la pared posterior de la vagina, en cambio al estar en presencia de un enterocele,  la  longitud  de  la  pared  posterior  vaginal  esta  preservada.    Y  mas  aun, cuando  tengamos  un  enterocele,  el  abultamiento  de  la  pared  posterior  vaginal  se ubicara cerca del apex vaginal, en cambio en los rectoceles, el abultamiento de la pared posterior vaginal estara cercano al introito vaginal.

Como  hacemos  con  todas  nuestras  pacientes   con  incontinencia  urinaria,  es necesario precisar la hipermovilidad uretrovesical, con el paciente en posicion acostada, con  maniobras  de  Valsalva  o  sin  ellas.   Notar  si  hay  cistocele,  rectocele,  enterocele, histerocele con la paciente en posicion de pie y con un pie apoyado en un escabel.

 

 

Clasificacion de los prolapsos genitales

I   = Ligera hipermovilidad

II  = Moderada.  Se  desplaza  la  pared  vaginal  anterior  o  posterior  o  ambas,  al  introito vaginal, con maniobras de Valsalva (con el esfuerzo).

III = Severa.  Pared  vaginal  anterior,  posterior  o  ambas,  fuera  del  introito  vaginal,  con

maniobras de Valsalva (con el esfuerzo).

IV =   Grave. Prolapso genital completo, en reposo.

 

 

Durante   el   examen   digital,   se   valora   tambien   la   vejiga   para   saber   si   hay sensibilidad que nos indique estados inflamatorios del trigono vesical.


El estado de la musculatura del piso pelvico,  puede ser hipotonico o hipertonico. La musculatura hipotonica esta asociada a relajacion musculo-ligamentosa por lesiones, por elongacion extrema o por ruptura de los ligamentos pelvicos, bien sea por partos, o por  esfuerzos  cronicos.    Como  resultado  podemos  tener  pacientes  con  una  sinto- matologia  facilmente  confundible  con  hiperactividad  vesical,  porque  pueden  presentar frecuencia, urgencia, nocturia e incontinencia de urgencia.

La musculatura debe evaluarse individualmente.   El medico examinador presiona suavemente la pared vaginal lateral y  se le pide a la paciente que contraiga alrededor del  dedo  examinador,  o  bien  se  le  pide  que  trate  de  subir  o  elevar  el  piso  vaginal (ejercicios de Kegel).

Debemos  estar  muy  pendientes,  si  notamos  una  contraccion  simultanea  de  la musculatura abdominal, glutea o aductores, para evaluar la capacidad de aislamiento de la musculatura pubococcigea.

 

 

 

Clasificacion de las contracciones de Kegel

o   =   Incapacidad de aislar determinada musculatura, o no percibir la contraccion de la musculatura alrededor de nuestro dedo.

I    =   Notamos una suave contraccion alrededor de nuestro dedo, pero hay incapacidad

de retener el dedo del examinador.

II   =   Notamos   una   suave   contraccion,   pero   hay   incapacidad   de   sostener   dicha contraccion por 1 segundo.

III =   Moderada  contraccion.     El  paciente  si  es  capaz  de  sostener  la  contraccion

alrededor del dedo examinador por 3  segundos.

IV =   Hay  una  fuerte  contraccion  alrededor  del  dedo  examinador.    Y  sera  capaz  de sostener la contraccion alrededor del dedo examinador, por mas de 5 segundos.

 

Todo lo previamente mencionado se puede cuantificar con el uso de los modernos perineometros, de muy facil aplicacion en la actualidad.

Los   estados   de   hipertonia   estan   asociados   con   zonas   o   puntos   dolorosos musculo-fasciales,   y   usualmente  son  ocasionados   por   microtraumas   cronicos,   por posiciones  viciosas  y  esfuerzos  gravita-cionales,  que se  adoptan  en  nuestros  trabajos de  todos  los  dias,  o  bien  son  ocasionados  por  traumas  pelvicos  importantes,  por accidentes  tipo  caidas,  o  por  accidentes  de  transito,  que  ocasionen  dano  muscular importante del piso pelvico, o atrapamiento nervioso.   Pueden estar involucrados  en la genesis   de   los   estados   hipertonicos,   cuadros   infecciosos   sistemicos   (septicemia), deficits   nutricionales   importantes   (anorexia   nerviosa)   y   estados   importantes   de ansiedad.

Si   quisieramos   calificar   el   grado   de   hipertonia   debemos   introducir   el   dedo examinador  dentro  de  la  vagina  y  presionar  la  pared  vaginal  inferior,  tanto  a  nivel proximal,   como   distal   y   lateral,   pidiendole   al   paciente,   que   reporte   el   grado   de disconformidad, que podria ir desde la simple presion hasta el dolor severo.  Asi vemos como:


 

Clasificacion del grado de hipertonia

o   =   No hay presion o dolor con el examen digital.

I    =   Hay una leve y confortable presion con el examen digital. II   =   Existe molestia con la presion del examen digital.

III =   Hay  dolor  moderado  asociado  con  el  examen  digital,  y  estara  acentuado  si  le pedimos al paciente que haga ejercicios de Kegel.

IV =   Existe dolor severo con el examen digital y es tal el dolor que no esta capacitado para realizar los ejercicios de Kegel.

 

 

El  recto  se  debe  examinar  para  poder  identificar  lesiones  tumorales,  fisuras  o paquetes hemorroidales o entidades de etiologia infecciosa.

Debemos  valorar  el  tono  esfinteriano  tanto  externo  como  interno,  y  debemos

palpar  la  musculatura  puborrectal  y  de  los  elevadores  del  ano,  para  poder  definir  la presencia de estados de flaccidez, hipotonia o espasticidad e hipertonia sintomatica.

 

 

¿Como  podemos  evaluar  la  condicion  del  grupo  muscular  de los  elevadores  del ano?

Cuando al palpar el grupo muscular de los elevadores del ano, no los podemos palpar

= o

 

 

Cuando  al  palpar  el  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano,  los  palpamos  muy suaves                                                                                     = 1

 

 

Cuando  al  palpar  el  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano,  los  palpamos  debiles

= 2

 

 

Cuando al palpar el grupo muscular de los elevadores del ano, tienen un tono moderado

= 3

 

 

Cuando  al  palpar  el  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano,  tienen  un  tono  bueno

= 4

 

 

Cuando  al  palpar  el  grupo  muscular  de  los  elevadores  del  ano,  tienen  un  tono  fuerte

= 5

 

 

Esto lo podemos acompañar con un score que hagamos de la capacidad contractil que tiene dicho grupo muscular, en base a la duracion de una contraccion mantenida.

La importancia que tiene el grupo  muscular  de los  elevadores  del ano,  es  de tal grado,  que  en  la  genesis  de  la  incontinencia  urinaria  de  esfuerzo,  asi  como  en  los pacientes que tienen incontinencia urinaria de urgencia, con hiperactividad vesical o sin ella, su fortalecimiento a traves de sesiones de fisioterapia con electroestimulacion del


piso pelvico, con o sin biofeedback, ayudara enormemente a obtener resultados clinicos sorprendentes, y es por este motivo que debemos darle mas la importancia que merece, tanto  al  momento  del  examen  fisico,  como  al  momento  de  ofrecer  una  terapeutica completa.

Payne,  Director  del  Centro  de  Neurologia  del  Centro  Medico  de  la  Stanford University,  le  da  tambien  una  gran  importancia  al  "factor  grupo  muscular  elevador  del ano" en la obtencion de un manejo exitoso en pacientes con incontinencia de urgencia y asi como recomienda que la clave del exito en el manejo de estos pacientes, es tratar de  hacer  un  balance  perfecto  entre  la  severidad  de  los  sintomas  de  hiperactividad vesical  (a  traves  de  cuestionarios  de  sintomas,  o  el  diario  vesical)  y  la  fortaleza  del grupo muscular de los elevadores del ano.

No olvidemos que la correcion quirurgica de la incontinencia urinaria de esfuerzo, coexistente con hiperactividad vesical en un 30-40% de los casos, se puede curar hasta en un 70% de los casos con dicha correccion quirurgica, sobre todo, cuando hacemos concomi-tantemente  cura  de  prolapso  tiempo  anterior  y  posterior,  es  decir,  correccion anatomica  de  la  zona  del  piso  pelvico  muscular,  con  la  uretrocervicosuspension  de  la vejiga    urinaria,    porque    dicho    prolapso,    ocasiona    cambios    miogenicos    en    el comportamiento vesical, llevando a la hiperactividad (Boone, 1999).

Payne  (1999)  habla  de  una  clasificacion  de  la  hiperactividad  vesical,  donde  hay una  disfuncion  generalizada  o  difusa  del  sistema  urinario  inferior  y  donde  existe  una vejiga hiperactiva pura.

Pues  bien,  en  la  primera  de  ellas,  es  decir  en  la  disfuncion  difusa  del  sistema

urinario inferior habla de una trilogia de hallazgos que son: una deficiente contractilidad del   piso   pelvico   muscular,   una   deficiente   sensibilidad   propioceptiva   y   una   vejiga hiperactiva  y  como  vemos  nuevamente  le  da  una  importancia  mayuscula  al  estado  o tono funcional de los musculos que conforman el piso pelvico.

Entre  los  factores  mas  influyentes  para  el  deterioro  del  piso  pelvico  muscular (grupo muscular de los elevadores del ano), estan: partos vaginales multiples, trabajos de  parto  prolongados,  utilizacion  de  forceps  en  el  parto,  lesion  del  nervio  pudendo durante  los  partos  vaginales,  ancianidad,  deprivacion  estrogenica  posmenopausica  o poscastracion quirurgica, obesidad, habitos tabaquicos, antecedentes de histerectomia, antecedentes de constipacion cronica, antecedentes de enfermedades respiratorias con tos cronica, antecedentes de practicas deportivas de alto impacto fisico.

 


 

Capitulo VIII

Clasificacion general de la disfuncion neurogenica vesical

 

 

 

La intencion del autor en este punto, es mencionar las mas importantes y variadas clasificaciones  que  han  sido  publicadas   desde  hace  mas   de  20  años,   hasta  los momentos   actuales,   relacionadas   con   las   disfunciones   neurogenicas   de   la   vejiga urinaria,  para que el lector se de cuenta de la evolucion de dichas  clasificaciones  y  la utilidad de cada una de ellas.

La  Sociedad  Internacional  de   Continencia  (ICS)  (Wein  y   Barrett,   1987),   las clasificaron en tres grupos, tomando en cuenta la funcion del detrusor, la funcion uretral y  la  sensibilidad  del  paciente,  mas  que  tratar  de  determinar  el  sitio  de  la  lesion  o  del proceso de la enfermedad.

 

Detrusor

Uretra  

Sensibilidad

normal

normal

normal

hiperactivo

hiperactiva

hipersensible

hipoactivo

incompetente

hiposensible

 

Por otro lado, Amis y Blaivas en 1991, publicaron un trabajo donde relacionaban la disfuncion vesical, con la posible etiologia y a su vez, con los patrones miccionales que cada uno de ellos mostraba, y asi vemos:

 

TIPO

 

 

Hiperreflexia

ETIOLOGiA

 

 

Cerebral

PATRONES MICCIONALES

del detrusor

1.Idiopatica

Urgencia e incontinencia de urgencia

 

 

2.Lesion cortical cerebral

 

 

Medular

 

Urgencia,incontinencia de urgencia, o miccion refleja  normal

 

Lesion espinal suprasacra         Miccion refleja incoordinada debido a disciner gia detruso-esfinteriana

 

 

Arreflexia

 

del detrusor

Region del arco

Incontinencia por rebosamiento, pobre vaciam

 

reflejo sacro

requiriendo  maniobras de Crede


 

Existen  muchas  clasificaciones  de  los  trastornos  del funcionamiento  de  la vejiga urinaria, que han estado en boga, en los ultimos 25 anos y las cuales, considero utiles mencionarlas,  por  cuanto  el  analizarlas,  ayudara  al  lector  a  entender  cada  vez  mas, dichos  trastornos,  que  muchas  veces  se  presentan  de  manera  confusa  y  solamente aquel que ha leido y estudiado todas estas clasificaciones, tendra mas facilidades para llegar a un diagnostico certero y en menor tiempo.

Recordemos solamente a McLellan que, en 1939, publico en su trabajo de vejiga neurogenica la clasificacion  que durante  mas  de  60 anos  se utilizo en el  mundo de la medicina,   como   fue   el   de   vejiga   no-inhibida,   llamada   tambien,   vejiga   neurogena espastica  leve,  vejiga  neurogena  flaccida,  llamada  tambien  atonica,  vejiga  arrefleja  o autonoma, vejiga neurogena espastica completa, tambien llamada, refleja o automatica. A esta se le sumaba la vejiga neurogenica sensorial (Lapides 1967, 1990).

La  clasificacion  de  McLellan,  era  dificil  de  ubicar  en  los  trastornos  clinicos  del funcionamiento de la vejiga urinaria, por cuanto sabemos que podemos tener patrones mixtos de disfuncion vesical y uretral, que se hacen mas asequibles con la clasificacion antes mencio-nada de la Sociedad Internacional de Continencia (ICS).

Otra   clasificacion   existente,   tomaba   en   cuenta   el   nivel   del   dano   o   lesion neurologica   (Bors,  1957),  y  las  clasificaba  como  lesiones  de  motoneurona  superior  y lesiones   de  motoneurona  inferior,  que  posteriormente  modificaria  Hald  (1969),  en lesiones   supranucleares   y   lesiones   infranucleares,   pero  ambas   fueron   utiles   para pacientes  con  lesiones  de  la  medula  espinal,  usualmente  traumaticas,  pero  no  tenian gran precision topografica, cuando se trataba de enfermedades del sistema nervioso y tambien podian en ocasiones mezclarse las patologias y un mismo paciente podia tener caracteristicas de ambos tipos.

Al  mismo tiempo,  presentaba otra objecion y  era  que dichas  denominaciones  no precisaban si el que estaba afectado era el sistema nervioso parasimpatico o simpatico.

 

 

Clasificacion neurotopoqrafica de Hald-Bradley (1969)

I.   Lesiones supraespinales

II.   Lesiones espinales suprasacras

III.   Lesiones infrasacras

IV.   Neuropatias perifericas autonomicas

V.   Disfunciones musculares

 

 

Clasificacion de Gibbon (1976)

Gibbon en 1976, propuso una clasificacion neurotopografica, que era la siguiente: I.   Lesion suprasacra

a. Incompleta b. Completa

II.   Lesion sacra

a. Motora y sensorial b. Sensorial


c. Motora

III.   Lesiones mixtas

 

 

Esta clasificacion no tomaba en cuenta la interaccion continua que existe entre el musculo detrusor y el lisoesfinter y el rabdoesfinter.

Todas  ellas  con  sus  caracteristicas  particulares,  que  no  describiremos  en  esta monografia,   pero   que   de   algun   modo   tenian   su   correspondencia   con   las   otras clasificaciones.

La clasificacion denominada “neuroanatomica”, popularizada por Bradley en 1967,

se  dividia  en  desordenes  del  sistema  nervioso  central  y  desordenes  de  la  inervacion periferica de la vejiga urinaria.

A continuacion la mencionare mas precisamente, por cuanto fue esta clasificacion, la  que  acerco  al  medico  en  general  y  sobre  todo  al  urologo,  a  un  entendimiento  mas profundo  y  razonado  de  los  trastornos  neurourologicos  de  diversas  etiologias,  e  hizo posible el auge de la urodinamica en el mundo urologico, al disminuir la aridez del tema y hacerlo mas comprensible.

 

 

Clasificacion de Bradley (1967)

A. Desordenes del Sistema Nervioso Central

1.   Asa 0 circuit0 I =   Va del centro reflejo del detrusor, en el lobulo frontal, hasta el centro reflejo del detrusor en el tallo cerebral.

Enfermedades del cerebro afectan las interconexiones del centro de la miccion en el tallo cerebral,  hacia los  nucleos  corticales  y  subcorticales,  en el lobulo frontal, que se ocupan de la contrac-cion del musculo detrusor, afectaran este circuito.  Su afectacion produce clinicamente hiperreflexia del detrusor (hiperactividad vesical).

 

 

2.   Asa 0 circuit0 II =   Va del centro reflejo del detrusor en el tallo cerebral, hasta el centro  sacro  de  la  miccion,  en  la  columna  lumbosacra  (S2-S4).    Afectada  por enfermedades   de   la   medula   espinal,   que   afectan   la   coordinacion   detruso- esfinteriana.

Su  afectacion  produce  clinicamente  hiperreflexia  del  detrusor,  con  aumento  del volumen  de  orina  residual,  con  lo  que  el  paciente  puede  tener  hiperactividad vesical e infecciones urinarias.

 

 

3.   Asa 0 circuit0 III =   Va del centro sacro de la miccion, en la columna sacra (S2- S4)  hasta  el  componente  estriado  del  esfinter  uretral  externo  (rabdoesfinter). Afectada por enfermedades que dañan la sensibilidad vesical aferente.

Su  afectacion  produce  clinicamente  arreflexia  del  detrusor,  con  residuo  urinario

posmiccional (RPM) alto con infecciones urinarias.

 

 

4.   Asa 0 circuit0 IV =  Va del centro reflejo del detrusor en el lobulo frontal hasta el centro  sacro  de  la  miccion  (S2-S4).    Afectada  con  lesiones  tanto  cerebrales


(corticales), como de la medula espinal, por arriba del nivel del cono medular.

Su  afectacion  produce  clinicamente  esfinter  externo  hipoactivo  con  hiperreflexia vesical,  e  impide  la  inhibicion  refleja  del  acto  de  orinar,  en  caso  de  necesitarse. Es  decir,  este  paciente  no  puede  detener  el  chorro  urinario  una  vez  que  haya empezado, y le costara mucho coordinar el inicio de su miccion.

 

 

B.   Desordenes de la inervacion periferica de la vejiga urinaria

1.   Musculo detrusor

a. inervacion motora

b. inervacion sensorial

2.   Musculo liso uretral

a. inervacion motora

b. inervacion sensorial

3.   Musculo estriado periuretral

a. inervacion motora

b. inervacion sensorial.

 

 

En  1981,  Wein  hizo  una  clasificacion  de  las  disfunciones  miccionales,  que  a  mi entender es una de las mas claras y utiles, en lo que a enfoque terapeutico se refiere:

 

 

Clasificacion funcional de Wein (1981)

Problemas de:

I.   Almacenamiento  (clinicamente  al  no  poder  almacenar,  veremos  episodios  de incontinencia)

a.  Por     problemas     vesicales:     hiperreflexia,     inestabilidad     (hiperactividad)

ocasionaban incontinencia refleja o incontinencia de urgencia.

b.  Por  problemas  de  la  salida  vesical:  (incontinencia  de  esfuerzo)  por  descenso rotacional del cuello vesical y uretra proximal, fuera del influjo de las presiones intraabdominales.

 

 

Problemas  de:

II.   Vaciamiento  (clinicamente  al  no  poder  vaciar  la  orina,  vemos  episodios  de retencion urinaria de grados diversos)

a.  Por problemas vesicales: status de hipocontractilidad y/o arreflexia del detrusor. b.  Por problemas de la salida vesical: obstruccion mecanica o funcional.

 

 

Problemas de:

III.   Almacenamiento y  vaciamiento (patrones  clinicos  mixtos,  con retencion aguda de orina con episodios de incontinencia urinaria con residuo urinario posmiccional alto (RPM).

 

 

En   el   año   1990,   aparecio   un   trabajo   de   Bosch,   donde   presentaba   dos


clasificaciones  bastante  interesantes,  de  la  inestabilidad  del  detrusor  o  hiperactividad vesical, que las mencionare a continuación, debido a lo bien concebidas que estan:

 

 

Clasificación fisiopatológica de la hiperactividad vesical (Bosch)

1.   Desórdenes del reflejo miccional

a.  Aumento  de  la  actividad  aferente  periferica  llevando  a  un  aumento  de  la actividad eferente.

b.  Disminución de la inhibición de los centros suprasacros, llevando a un aumento de la actividad eferente

c.  Disminución de la inhibición de la periferia (piso pelvico y esfinteres uretrales)

llevando a un aumento de la actividad eferente

 

 

2.   Desórdenes de la neurotransmisión

a.  Cambio en el tipo de neurotransmisor involucrado

b.  Cambio en la cantidad de neurotransmisor involucrado c.  Aumento de la respuesta del musculo detrusor

- aumento en la densidad de receptores

- aumento en la afinidad de los receptores

 

 

3.   Desórdenes miogenicos

a.  Sincronización anormal de la actividad espontanea llevando a un aumento neto de la actividad

b.  Desórdenes bioquimicos intrinsecos de la musculatura lisa vesical c.  Inestabilidad de la membrana (supersensibilidad de dener-vación)

 

4.   Desórdenes psicológicos o de comportamiento

 

 

Clasificación de la vejiga hiperactiva por causas etiológicas

a.   Causada por obstrucción de la salida vesical (SVO) de indole diversa.

b.   Causada por estados de inmadurez neuroanatómica vesical (causa congenita)

c.   Causada por alteraciones del comportamiento vesical, en su relación con el medio ambiente circundante del paciente (psicosomaticas o psiquiatricas).

d.   Causada  por  cambios  vesicales  relacionadas  a  la  edad  del  paciente  (vejiga  de

senectud).

e.   Causada  por  entidades  nosológicas  que  afectan  el  comportamiento  del  piso pelvico muscular y de la uretra (conductuales).

f.   Causada por trastornos miogenicos del musculo detrusor

g.   Causada  por  estados  de  hipersensibilidad  de  diversa  etiologia  (inflamatorios, actinicos,  tumorales-carcinoma  in  situ  (Tis),  cancer  prostatico,  o  posteriores  a tratamientos   quirurgicos,   o   posteriores   a   tratamiento   quimioterapico,   o   en presencia de enfermedades como la cistitis intersticial.

h.   Causada por afecciones psicosomaticas


 

Sistema o clasificación funcional ampliada (Wein 1998)

Problemas de:

 

I.     Almacenamiento vesical A.   Por problemas vesicales a.  Hiperactividad vesical

- Contracciones involuntarias

- Enfermedades neurológicas suprasacras

- Obstrucción de la salida vesical

- Idiopatica

- Distensibilidad disminuida

- Enfermedad neurológica

- Fibrosis vesical

- Idiopatica

 

 

b.  Hipersensibilidad vesical

- Inflamatoria

- Infecciosa

- Neurológica

- Psicológica

- Idiopatica

 

 

B.Por problemas de la salida vesical

Incontinencia urinaria de esfuerzo (IOE)

Cuello vesical no funcional /uretra no funcional

 

 

Problemas de:

II. Vaciamiento vesical

A. Por problemas vesicales

- Neurológicos

- Miogenicos

- Psicogenicos

- Idiopaticos

B. Por problemas de la salida vesical

-Anatómicos

- obstrucción prostatica

- contractura del cuello vesical

- estrechez uretral

- compresión uretral

- Funcionales

- discinergia esfinter liso

- discinergia esfinter estriado


 

Quisiera referirme a una Clasificacion Funcional de la hiperactividad del detrusor, donde Fall y col., clasifican la hiperactividad vesical asi:

 

 

 

Clasificacion funcional de la hiperactividad vesical (Fall 1997)

1. Vejiga hiperactiva no inhibida

Se caracteriza por disminucion en la percepcion de la vejiga llena y en la perdida de la capacidad de inhibir voluntariamente el acto de la miccion.

El paciente experimenta un fuerte deseo de orinar, ya cuando practicamente tiene una contraccion sostenida del musculo detrusor y cuando ya se ha producido una relajacion  coordinada  del  aparato  esfinteriano  uretral,  lo  cual  hace  muy  dificil  el poder controlar la orina.

Se conoce como "miccion involuntaria coordinada"

 

 

2. Inestabilidad fasica del musculo detrusor

Se  caracteriza  por  presentar  incontinencia  de  urgencia  o  urgencia  miccional, presentan   tambien   sensibilidad   propioceptiva   normal   o   incrementada,   y   la presencia  de  contracciones  fasicas  del  musculo  detrusor,  las  cuales  ocurren  de manera  espontanea,  durante  la  fase  del  almacenamiento  urinario  o  del  llenado vesical,  o  porque  son  provocadas  por  maniobras  como  llenado  vesical  rapido,  o estimulacion externa de tipo mecanico.

Hay  en  estos  casos  una  coordinacion  detruso-esfinteriana  normal  y  el  paciente puede estar en capacidad de aguantar o retardar levemente su miccion.

 

3. Hiperreflexia medular o espinal del detrusor

Se  caracteriza  por  ocurrir  en  pacientes  que  presentan  lesiones  de  motoneurona superior   (Bors   1957),   y   donde   existe   un   deficit   neurologico,   mas   que   una disfuncion  vesical,  relacionada  directa-mente  con  el  lugar  de  la  lesion  y  a  la extension de la misma.

Existe  un  deterioro  del  "comando  voluntario"  de  la  miccion,  y  por  tanto  de  la capacidad  de  contraccion  del  musculo  detrusor  de  la  vejiga  urinaria,  ante  un estimulo externo de tipo mecanico.

Debido al hecho de que hay un dano entre las conexiones que van del nucleo del

detrusor  del  tallo  cerebral  y  los  diferentes  nucleos  del  detrusor,  situados  en diversos   puntos   de   la   medula   espinal,   las   contracciones   miccionales   son "insuficientemente mantenidas" e "incoordinadas", con lo que sin duda alguna se origina  una  condicion  llamada  discinergia  vesicoesfinteriana  o  incoordinacion detruso/esfinteriana,    con    altos    volumenes    de    orina    residual    RPM    alto, posibilidades  de  infeccion  urinaria,  y  episodios  no  controlados  de  incontinencia urinaria,  bien  sea  por  rebosamiento,  porque  la  incoordinacion  no  deja  que  el paciente tenga una "miccion eficaz", o porque existe siempre la posibi-lidad de un


episodio de hiperactividad del detrusor.

Este paciente tiene tambien un deterioro o perdida de la sensibilidad propioceptiva y en ocasiones tambien la sensibilidad nociceptiva, que como sabemos tienen dos rutas aferentes diferentes.

 

 

Existe   una   clasificacion,    que    muestra    una    excelente   correlacion    clinico- urodinamica,  de  acuerdo  al  sitio  de  la  lesion  neurologica,  de  los  hallazgos  clinicos  y urodinamicos que tengamos, sobre el musculo detrusor, sobre el esfinter interno (liso o lisoesfinter) y sobre el esfinter externo (estriado o rabdoesfinter), de los pacientes con lesiones neurologicas.

Por  ultimo  mencionare  una  clasificacion,  que  correlaciona  los  aspectos  clinicos hallados en el paciente con los hallazgos urodinamicos, a saber:

 

Clasificacion Clinico-Urodinamica

1.   Lesion infrasacral o cono medular

Efecto sobre la vejiga: arreflexica o hipoactiva

Efecto sobre el esfinter interno o lisoesfinter: coordinacion

Efecto sobre el esfinter externo o rabdoesfinter: denervacion o hipoactividad.

2.   Lesion medular suprasacral

Efecto sobre la vejiga: hiperreflexica o hiperactiva

Efecto sobre  el esfinter interno o lisoesfinter:  incoordinacion,  si la lesion esta  en

T6, o por arriba de T6.

Efecto sobre el esfinter externo o rabdoesfinter: incoordinacion

3.   Lesion suprapontina

Efecto sobre la vejiga: hiperreflexica o hiperactiva

Efecto sobre el esfinter interno o lisoesfinter: coordinacion

Efecto sobre el esfinter externo o rabdoesfinter: coordinacion

 

 

 

Clasificacion de Bors-Comarr (1971)

A.   Lesion sensitiva neuronal Incompleta, balanceada Completa, no balanceada

B.   Lesion motora neuronal

Balanceada

No balanceada

C.   Lesion sensitivo-motora neuronal

a.  Lesion neuronal motora superior

- completa, balanceada

- completa, no balanceada

- incompleta, balanceada

- incompleta, no balanceada


b. Lesion neuronal motora inferior

- completa, balanceada

- completa no balanceada

- incompleta, balanceada

- incompleta, no balanceada

 

c.  Lesion mixta

- neurona superior somatomotora, neurona inferior visceromotora

- neurona inferior somatomotora, neurona superior visceromotora

- neurona normal somatomotora, neurona inferior   visceromotora

 

 

 

El  termino  no  balanceado  se  refiere  a  la  existencia  de  un  residuo  urinario posmiccional  (RPM)  de  mas  del  20%  de  la  capacidad  vesical,  cuando  estamos  en presencia  de  lesiones  de  motoneurona  superior,  en  cambio  cuando  la  lesion  es  de motoneurona inferior, el termino no balanceado se refiere a la existencia de un residuo urinario posmiccional (RPM) por arriba del 10% de la capacidad vesical.

 

Clasiticaciin Neurotopogratica de Hald-Bradley (1982)

I.    Lesion suprasacral

II.   Lesion espinal o medular suprasacral

III.   Lesion infrasacral

IV.   Neuropatia autonomica periferica

V.   Lesion muscular

 

 

 

Claslflcaclon  de  Lapldes  (1970)  (modlflcaclon  de  una  claslflcaclon  de  McLellan-

1939)

I.  Vejiga neurogenica sensorial (diabetes mellitus-tabes dorsal)

II.   Vejiga paralitica motora (cirugia pelvica extensa o traumatismo)

III.   Vejiga  neurogenica  no  inhibida  (accidentes  cerebrovasculares,  tumor  o  lesion espinal, enfermedad de Parkinson, esclerosis multiple, entre otros)

IV.   Vejiga neurogenica refleja (traumatismo medular)

V.   Vejiga neurogenica autonoma (enfermedad o traumatismo medular sacro)

 

 

Claslflcaclon urodlnamlca de Krane-Slroky (1979)

I.   Hiperreflexia del detrusor Esfinteres coordinados Discinergia esfinteriana estriada Discinergia esfinteriana lisa Esfinter liso no relajado

II.   Arreflexia del detrusor


Esfinteres coordinados Esfinter estriado no relajado Esfinter estriado denervado Esfinter liso no relajado

 

 

Clasificacion de la Sociedad Internacional de Continencia (Abrams 1990)

I.   Fase de almacenamiento

Función vesical

a. Actividad del detrusor

- normal o estable

- hiperactivo

- inestable

- hiperreflexico b. Sensibilidad vesical

- normal

- aumentado o hipersensible

- reducida o hiposensible

- ausente c. Capacidad vesical

- normal

- alta

- baja d. Distensibilidad

- normal

- alta

- baja

 

 

II.   Fase de vaciamiento

Actividad del detrusor

- normal

- hipoactiva

- acontractil

Función uretral

- normal

- obstructiva

- hiperactiva

- mecanica

 

 


Capitulo IX

Patologias  neurológicas  con  afectación  de  la  funcionalidad  del musculo detrusor (disfunción del sistema urinario inferior)

 

 

Son  numerosas  las  patologias  neurológicas  que  afectan  de  un  modo  u  otro  la funcionalidad de la vejiga urinaria, bien sea en su fase de almacenamiento o de llenado vesical, o en su fase de vaciamiento urinario (Hald y Bradley 1982).

Es  un  tema  muy  importante,  tanto  para  el  urólogo,  como  para  el  medico  en general,  porque  muchas  patologias  neurológicas,  pueden  tener  repercusiones  en  la esfera urológica, alterando sustancialmente la calidad de vida del paciente.

A   continuación,  se  presenta una lista de lesiones  neurológicas  especificas,  que ocasionan, de acuerdo a su nivel de afectación, trastornos de la micción, bien sea en su fase de almacenamiento, o en su fase de vaciamiento, y en ocasiones en ambas fases.

 

 

1. Lesiones infrasacras

a. esclerosis multiple                          b. herpes zoster

c. lesiones a la medula espinal         d. agenesia del sacro e. estenosis del canal medular          f. trastornos del disco g. mielodisplasia                                    intervertebral

i. tabes dorsal                                     h. mielitis

k. diabetes mellitus                             j. cancer medular metastasico

(neuropatia periferica)                     l. tumores de la cauda equina

 

 

2. Lesiones medulares

a. mielitis transversal                               b. tumores medulares

c. espondilosis cervical                      d. estenosis canal medular e. aracnoiditis medular                       f.  tabes dorsal

g. estados disraficos                           h. mielopatia asociada a

HTLV-1 (HAM)

i.  polineuropatia desmielinizante      j.  esclerosis multiple inflamatoria

k. trastornos de la vascularización    l.  Sindrome medula anclada medula espinal                                  (Tethered cord)

 

 

3. Lesiones intracraneales

a. enfermedad cerebrovascular            b. esclerosis multiple c. enfermedad de Parkinson                 d. ataxia cerebelosa

e. demencia (Alzheimer)                       f.  traumatismo cerebral g. secuela de trauma                             h. secuela de encefalitis

craneo-encefalico

i.  enf. de Hungtington                           j.  paralisis cerebral


k. hidrocefalia cl normopresion             l.  sindrome de Shy-Drager m.insuficiencia cerebral cronica           n. disgenesia cerebral

n. malformaciones craneo-cervicales  o. siringobulbia

p. tumores primarios o secundarios     q. hematoma extradural, r.  epilepsia subdural o intracerebral    s. aneurismas y

malformaciones AV

t.  enfermedades inflamatorias             u. enfermedad de

(encefalitis-meningitis)                           Creutzfeldt-Jakob

 

 

 

Nos  parece  util  puntualizar  de  que  manera  una  disfuncion  del  sistema  urinario inferior puede afectar la funcionalidad del sistema urinario superior.

No  hay  duda  que  el  drenaje  urinario  del  sistema  urinario  superior  (ureteres  y

rinon),  puede  verse  afectado  cuando  hay  una  presion  intravesical  elevada  de  manera persistente,  bien sea por causas  organicas  o por causas funcionales, que son las  que nos atanen en este libro.

Tambien se puede obstaculizar la salida de orina que viene de los rinones, al estar

aumentada  la  resistencia  de  salida  ureteral  por  un  estiramiento  persistente  del  tunel ureteral  submucoso,  el  cual  como  sabemos,  fisiologicamente,  al  llenarse  la  vejiga,  se estira y se ocluye, para evitar la aparicion de reflujo vesico-ureteral, pero en el caso que nos compete, no se produce por mecanismos normales, sino mas bien, por patologias que  ocasionan  un  aumento  de  la  contractilidad  vesical,  como  por  ejemplo  en  la hiperactividad vesical y en las vejigas hiperreflexicas, ambas de etiologia variada.

Cuando  hay  presiones  intravesicales  aumentadas,  en  pacientes  con  retencion cronica de orina, veremos volumenes elevados de orina residual (RPM), que ocasionan presion  extrinseca  aumentada  sobre  las  paredes  ureterales  y  como  resultado  final obtenemos  un  drenaje  deficiente  del  sistema  urinario  superior,  con  la  posibilidad  de dano renal por estasis urinario en el sistema colector renal.

Debemos confirmar que hay conceptos  muy  bien establecidos como por ejemplo las fibras que llegan al centro de la miccion del tallo cerebral, provienen del cerebelo, de los ganglios basales, de la corteza cerebral, del talamo y del hipotalamo.

El cerebelo y los ganglios basales tienen efecto inhibitorio sobre las contracciones reflejas  vesicales.    La  porcion  superomedial  del  lobulo  frontal  y  el  genu  del  cuerpo calloso, de la corteza cerebral provee un efecto inhibitorio sobre la funcion vesical.   Las vias corticales regulan el control voluntario del reflejo miccional.

Lesiones  neurologicas  por  arriba  del  tallo  cerebral,  como  la  enfermedad  de Parkinson,  los  accidentes  vasculares  y  los  tumores  cerebrales  dan  como  resultado hiperactividad vesical e incontinencia urinaria de urgencia, con subitas ganas de orinar sin previas sensaciones de alerta sin posibilidad ni capacidad de controlarlo.

Enfermedades  o  lesiones  que  van  de  la  medula  sacra  al  tallo  cerebral  causan discinergia del esfinter interno (cuello vesical) o discinergia vesicoesfinteriana.

Pacientes  con  esclerosis  multiple,  tienen  hiperactividad  vesical  mas  discinergia


vesicoesfinteriana. Estos casos son potencialmente propensos a dano renal con reflujo, hidronefrosis,  litiasis  renal,  infecciones  renales  y  en  casos  avanzados,  insuficiencia renal.

En  las   lesiones   infrasacrales   no  es   común  ver  el  sistema  urinario  superior involucrado   en   el   problema   de   los   trastornos   miccionales   pero   en   la   lesiones intracraneales  o  por  arriba  del  tallo  cerebral  (suprapontinas),  es  muy  raro  ver  esto  y usualmente  sucede  cuando  de  manera  coincidencial,  el  paciente  presenta  tambien obstruccion  de  la  salida  vesical  (SVO)  por  motivos  variados,  entre  ellos  trastornos prostaticos o trastornos del cuello vesical que ya el paciente tenia con anterioridad.

En  las  lesiones  medulares,  vemos  con  frecuencia  la  aparicion  de  discinergia  o incoordinacion vesicoesfinteriana, que junto a la hiperactividad vesical origina presiones intravesicales elevadas de manera cronica y persistente, que llevan a dano del sistema urinario   superior,   por   lo   cual   es   importante   tratar   de   mantener   la   presion   de almacenamiento vesical, siempre por debajo de 40 cm de agua.

 

 

Podemos   predecir   los   hallazgos   clinicos   y   urodinamicos,   al   saber   la localización  de  las  lesiones  neurológicas.    Tambien  podemos,  con  base  en  los hallazgos   neurourológicos,   suponer   el   nivel   de   afectación   de   las   lesiones neurológicas del paciente.

 

 

A   continuacion,   mencionare   algunas   enfermedades   de   cada   area,   con   sus caracteristicas   clinicas   urinarias,   sus   caracteristicas   cistometricas,   asi   como   la afectacion o no, de la coordinacion detruso/esfinteriana (sinergismo), haciendo hincapie, por supuesto, en la hiperactividad vesical.

 

 

1. Enfermedades cerebrovasculares (trastornos vasculares cerebrales)

Originan  perdida  del  control  voluntario  del  acto  miccional,  es  decir,  el  paciente puede mostrar imposibilidad de iniciar volunta-riamente el acto miccional (Asa I), unido al   hallazgo   de   urgencia   urinaria,   e   incontinencia   de   urgencia,   por   una   franca hiperactividad  vesical,  por  la  lesion  neurologica  causada  por  el  ACV  (hiperreflexia  del detrusor) (Burney 1996).

No nos olvidemos que la regulacion cerebral del centro miccional del tallo cerebral es  inhibitorio  por  excelencia,  sobre  los  reflejos  espinales,  que  se  dirigen  al  area miccional, por lo cual cualquier afectacion de dicho eje, inducira a presentar una vejiga hiperactiva, con todo su sintomatologia habitual.

Sin  embargo,  la  causa  de  la  incontinencia  urinaria,  posterior  a  un  accidente vascular cerebral es multifactorial, y muchas veces sera la misma frecuencia y urgencia, la que contribuyan a la incontinencia, pero sin duda alguna, es la mas preocupante de las  manifestaciones  clinico-urologicas,  que presentan  los  pacientes  con  ACV.   Taub  y Wade, confieren a la incontinencia urinaria, como un signo ominoso y de mal pronostico, en los pacientes afectados de accidentes cerebrales vasculares.

En los  accidentes  vasculares  cerebrales,  el tamano de la lesion y  la localizacion


de la misma ocasionan diferentes patrones de afectacion de la miccion del paciente.

En la fase aguda, tenemos  retencion urinaria por arreflexia del musculo detrusor (shock cerebral).   La retencion urinaria no es ocasionada unicamente por trastornos en la  esfera  miccional,  sino  que  es  la  sumatoria  de  factores  entre  los  que  se  cuentan  la perdida de la conciencia del paciente, el deficit de movilidad, la imposibilidad de trasmitir los  deseos  de  orinar,  la  falta  de  respuesta  del  musculo  detrusor  a  la  sobredistension vesical.

Yokoyama  y  col.  (1998),  demostraron  que  hay  mas  del  50%  de  reduccion  en  la capacidad  vesical  en  experimentos  con  ratas,  cuando  se  les  ha  provocado  un  infarto cerebral.

Esto  se  suma  al  hecho,  de  que  en  muchos  casos,  los  accidentes  vasculares cerebrales son acontecimientos que suceden en edades posteriores a los 60 anos, por lo cual sumado a los efectos devastantes del ACV, estan los sintomas y el deterioro que ya el paciente tenia antes del ACV y que en muchos casos, nadie conocia, ocasionados por entidades como el crecimiento prostatico benigno (CPB) o por estados de afectacion neurologica central de etiologia diversa (entre otros, demencia).

Si se produce lesion neurologica en la motoneurona superior, el detrusor mostrara sin  duda  alguna,  hiperreflexia  (hiperactividad).   Podria  existir  cierta  tendencia  a  la discinergia o incoordinacion vesicoesfinteriana.   Todo lo antes  mencionado, se sucede en  la  fase  cronica  del  ACV,  es  decir  pasada  la  fase  aguda,  donde  usualmente  hay arreflexia del detrusor.

La vejiga se afecta de un 40% a un 60% luego de lesiones cerebrales unilaterales hemisfericas.      Cuando   hay   lesiones   neurologicas   ubicadas   en   el   lobulo   frontal (mediofrontal   bilateral)   y   dano   cortical   frontal,   tenemos   como   hallazgo   urologico, incontinencia de urgencia (por hiperactividad del detrusor) y tambien disminucion de la sensacion de llenado vesical, lo cual aumenta el deseo de orinar.

En lesiones corticales (lobulo frontal) se afecta la habilidad del paciente de poder suprimir las contracciones reflejas del musculo detrusor, con lo cual tenemos episodios de incontinencia urinaria, muchas veces del tipo de urgencia.

La  region  frontoparietal,  tiene  accion  sobre  el  control  voluntario  de  la  miccion  y

sobre   la   actividad   esfinteriana   externa   (rabdoesfinter).    Estos   pacientes   tienen afectacion de la sensibilidad propioceptiva (sensacion de llenamiento vesical), unido al hecho  de  que  se  les  dificulta  la  accion  de  suprimir   la  contraccion  refleja  del  detrusor (asa  IV  de  Bradley  o  asa  inhibitoria).     Presentan  tambien  una  falta  de  relajacion apropiada del piso pelvico o perineal, en union de la hipercontractilidad o hiperactividad vesical.

El   hallazgo   urodinamico    mas    frecuente   es    la    hiperreflexia   del    detrusor (hiperactividad vesical).  Cuando el ACV es de tipo hemorragico, lo que vemos con mas frecuencia   es    el   comportamiento   arreflexico    del   detrusor   con   comportamiento esfinteriano  distal  (rabdoesfinter) normal,  pero si  el  accidente cerebral vascular es  del tipo isquemico,  el  hallazgo  que  con  mas  frecuencia nos  conseguiremos  en  la  practica diaria,  sera  la  hiperreflexia  del  detrusor,  con  una  condicion  del  esfinter  externo  o


rabdoesfinter  que  se  denomina  AVeS,  acronimo  ingles  que  significa,  ausencia  del control   voluntario   del   esfinter   externo,    por    lo   cual   deberiamos    tratarlos    con sinergizadores   del   funcionamiento   vesicoesfinteriano   (alfa-uno   bloqueantes   adre- nergicos,  tipo  teratozyn,  doxazosin,  tamsulozin)  y  con  relajantes  de  la  hiperactividad vesical,  del  tipo  de  farmacos  musculotropicos,  como  la  oxibutina,  o  antimuscarinicos como el tolterodine.

Si tomamos en cuenta el tamaño del infarto cerebral, mientras mayor sea el area de  infarto  en  regiones  corticales  y  subcorticales,  mayor  sera  la  posibilidad  de  tener episodios  de  incontinencia  urinaria  de  urgencia.    Si  el  accidente  vascular  toca  otras areas, como el habla, se duplicara la posibilidad de incontinencia urinaria.

Si  el  infarto  cerebral  es  lo  suficientemente  grande  como  para  ocasionar  deficits motor severo, originara en cascada una serie de inconvenientes, que comienzan con la inmovilidad, periodos prolongados en cama, constipacion, aumento de las posibilidades de incon-tinencia urinaria y de infeccion urinaria, con todas sus consecuencias.

El  tiempo  transcurrido  desde  el  accidente  vascular,  ocasiona  cambios  en  el comportamiento  del  musculo  detrusor.    A  mas  tiempo  transcurrido,  menos  sintomas urinarios, como incontinencia de urgencia, frecuencia y urgencia.

eon la recuperacion de la actividad cognoscitiva y de la capacidad muscular, asi

como la mejoria de posibles dolores que pueda tener el paciente, y a la normalizacion de su actividad psiquica, con un menor disturbio emocional, al comprender y aceptar la enfermedad,  y  a  la  mejoria  del  nivel  del  sueño,  se  recupera  tambien  su  actividad urinaria y se tendra un mejor comportamiento vesical, con la consiguiente mejoria en la calidad de vida.

 

 

2. Enfermedad de Parkinson

Es  una  degeneracion  de  los  nucleos  pigmentados  de  la  sustancia  nigra.   Tiene una prevalencia del 0,1% de la poblacion general y ambos sexos se afectan por igual.

De  un  25%  a  un  75%  de  los  pacientes  con  enfermedad  de  Parkinson,  tienen disfuncion   miccional,   50%   tienen   urgencia-frecuencia   e   incontinencia   urinaria   de urgencia, 25% tienen una mezcla de sintomas irritativos-obstructivos hoy denominados sintomas de llenamiento o de vaciamiento vesical.   El hallazgo cistometrico mas comun es la hiperactividad vesical.

En relacion con el rabdoesfinter, este puede tener bradiquinesia, como parte de su rigidez  muscular  global;  tambien  puede  ser  pseudo-discinergico,  por  el  intento  del paciente  de  prevenir  un  episodio  de  incontinencia  dada  su  hiperactividad  vesical  y pueden presentar tambien un control voluntario deficiente.

Podria  ocasionar  hiperactividad  vesical de  base  neurologica  (hiperreflexia),  por perdida   de   la   inhibicion   sobre   el   centro   miccional   del   tallo   cerebral,   pero   muy esporadicamente, pudiera ocasionar arreflexia del detrusor (Dmochowsk 1995).

Hay que tener mucho cuidado en pacientes  que presentan hiperactividad vesical atribuida  a  dos  causas  coexistentes,  como son  la obstruccion  infravesical  por  motivos prostaticos  y  la  presencia  de  hiperactividad  de  causa  neurologica  (por  el  Parkinson),


porque una vez sometidos a cirugia de alivio de la salida vesical (RTUP), podrian tener incontinencia  urinaria  "de  novo"  en  alrededor  del  25%  de  los  casos,  siendo  este porcentaje menor en casos de no tener afectacion parkinsoniana.

Por  tanto  se  sugiere,  en  pacientes  parkinsonianos  con  salida  vesical  obstructiva (SVO)   por   crecimiento   prostatico   benigno   (CPB),   preferir   las   terapias   de   tipo farmacologico para tratar estos pacientes.

Es  muy  rara  la  presencia  de  incoordinacion  detrusor-esfinteriana.   Sin  embargo con  la  enfermedad  de  Parkinson,  hay  dos  aspectos  que  son  importantes  a  tomar  en cuenta,  uno  es  la  incoordinacion  muscular  caracteristica,  que  perjudicaria  la  exitosa rehabilitacion de estos pacientes y el segundo aspecto es que en numerosas ocasiones los farmacos antiparkinsonianos, presentan constituyentes anticoliner-gicos que podrian ocasionar una falla en la bomba muscular del detrusor y causar episodios de retencion urinaria.

Es importante por tanto mantenerse alerta con los volumenes de orina residual y con    los    hallazgos    cistometricos    de    estos    pacientes,    tomando    medicamentos antiparkinsonianos.

 

 

3. Tumores cerebrales

Podrian   ocasionar   trastornos   en   la   esfera   miccional,   sobre   todo   si   estan localizados en el lobulo frontal superomedial, especificamente en el lobulo paracentral. Presentan  frecuencia,  urgencia  urinaria  e  incontinencia  de  urgencia  por  hiperactividad vesical.   No se han descrito alteraciones del sinergismo vesicoesfinteriano.   Presentan una regresion hacia la miccion infantil, es decir con micciones reflejas.

 

 

4. Demencia

Se   define   como   el   deterioro   difuso   de   la   funcion   intelectual   del   individuo, manifestado  basicamente  por  deficits  en  la  memoria  y  posteriormente  cambios  en  el comportamiento del paciente.

Puede  ocasionar  hiperactividad  vesical  (hiperreflexia),  pero  en  ocasiones,  estos

pacientes podrian presentar hiporreflexia vesical.

Pueden presentar en contadas ocasiones, afectacion de la zona del rabdoesfinter, al igual que incoordinacion vesicoesfinteriana.

Una de las mayores causas de demencia es la enfermedad de Alzheimer, que en

su  tercera  etapa  o  etapa  terminal,  presenta  trastornos  de  su  control  tanto  intestinal como urinario, y  esta considerada la  mas  importante causa de demencia en el  mundo entero, dada su alta prevalencia (Thal 1998).

La  manera  como  se  presente  clinicamente  desde  el  punto  de  vista  urologico  la

enfermedad  de  Alzheimer  dependera  de  la  combinacion  de  factores  degenerativos neurologicos   corticales,   de   causas   neurologicas   puras,   o   de   causa   degenerativa vascular  y  menos  comun  son  las  causas  tipo  hematomas,  hidrocefalia,  convulsiones, infecciones  cronicas,  que  en  general  afectan  no  solo  la  organicidad  e  integridad  del sistema  nervioso  central,  sino  que  tambien  afectan  la  capacidad  cognoscitiva  del


paciente, fundamental en todos los aspectos que se refieran al control y coordinación de todo tipo de funciones vitales, que unan al paciente a su entorno fisico.

 

 

5. Esclerosis multiple

Es una enfermedad desmielinizante de areas circunscritas de materia blanca, del cerebro  y  de  la  medula  espinal  (SNC),  que  afecta  diferentes  niveles  neurológicos, causando interrupción de la continuidad en las vias neurológicas, y ocasiona problemas o trastornos clinicos  muy variables, en pacientes  que usualmente estan en las  edades mas productivas de sus vidas.

La   afectación   de   los   circuitos   neurourológicos   ocasiona  frecuen-cia  urinaria, urgencia e incontinencia de urgencia (hiperactividad vesical), tenesmo vesical y grados variables de residuo urinario (RPM).  Alrededor del 80% de los pacientes con esclerosis multiple tienen trastornos urinarios bajos durante su enfermedad (8arbalies y col. 1998).

Diez  por  ciento  de  los  pacientes  con  esclerosis  multiple  tiene  hiperactividad vesical,  al comienzo de su enfermedad y 95% la presenta durante los  estadios  finales de la enfermedad (Hinson y 8orne 1996).

En la esclerosis multiple, la hiperreflexia del detrusor, esta presente en 2/3 partes

de  los  pacientes  y  de  estos  la  mitad  (50%)  tiene  discinergia  vesicoesfinteriana  y  1/3 tiene arreflexia del detrusor.

La  disfunción  miccional  ocurre  en  un  10%  a  15%  de  los  pacientes,  junto  a  los trastornos neurológicos de inicio y como unico sintoma inicial, los sintomas urinarios se pueden ver en el 2% de los casos

Los   sintomas   urinarios   son   usualmente   progresivos,   es   decir   no   presentan remisiones, como otros sintomas de la enfermedad.

Ocasiona hiperactividad vesical, de causa neurológica (hiperre-flexia), en mas del

50%  de  los  casos;  discinergia  vesicoesfinteriana  en  mas  del  50%  de  los  casos  y  en menos del 20% de los casos podria existir hipocontractilidad del musculo detrusor.

Los    pacientes    asintomaticos    desde    el    punto    de    vista    urinario,    tienen anormalidades urodinamicas, en mas del 80% de los casos, lo cual resulta paradójico y por   lo   cual,   debemos   estar   alertas   y   evaluar   a   estos   pacientes   con   pruebas urodinamicas  (cistometria  y  flujometria)  y  con  pruebas  funcionales  renales,  aun  en ausencia de sintomatologia urinaria.

El hallazgo cistometrico mas comun es la hiperactividad vesical (hiperreflexia), con sinergismo vesicoesfinteriano,  seguido por la hiperactividad vesical (hiperreflexia) pero con incoordinación o discinergia vesicoesfinteriana.

Menos  del  5%  de  los  casos  puede  presentar  disminución  de  la  distensibilidad- compliance vesical,  una de las  caracteristicas  de  la hiperactividad vesical,  y  se podria acompañar  paradójicamente  de  arreflexia,  por  lo  cual  tendriamos  niveles  elevados  de orina residual (RPM alto).

 

 

6. Traumatismos de la medula espinal

Tenemos tres fases en los traumas de la medula espinal.   La primera, es la fase


aguda o de shock espinal, donde existe una arreflexia vesical y una total ausencia de la actividad   refleja   por   debajo   del   sitio   de   la   lesion   neurologica,   con   ausencia   de sensibilidad  propioceptiva  y   nociceptiva  vesical.  Cuando  esta  actividad  reaparece, pasamos a la segunda fase, y esto pudiera estar ocurriendo en tiempos muy variables, que van de 2 semanas a varios meses (lo usual son 3 meses).

La segunda fase es la llamada fase de recuperacion, donde como dijimos retorna la  actividad  refleja  y  donde  empezamos  a  definir  el  tipo  de  vejiga  neurogenica  que tendra  el  paciente.    La  combinacion  mas  frecuente  es  la  hiperreflexia  del  detrusor (estado  de  hiperac-tividad),  con  discinergia  vesicoesfinteriana  que  segun  Birder  y  col (1998) tiene relacion con el oxido nitrico y su secrecion alterada.

La  tercera  fase  es  la  fase  de  estabilidad  en  los  patrones  urodinamicos,  aun cuando  debemos   de  por  vida,   evaluar   periodicamente  a  estos   pacientes,   porque muchas  veces,  los  patrones  urodinamicos  cambian,  ocasionando  la  necesidad  de cambios en la terapia a seguir.

La  localizacion  de  la  lesion,  ocasiona  sintomas  urinarios  determinados,  como  lo vimos en la correlacion clinico-urodinamica.

En las lesiones suprasacras vemos hiperactividad del detrusor (hiperreflexia) con

discinergia vesicoesfinteriana.

Cuando  la  lesion  es  completa  vemos  micciones  reflejas,  sin  control  voluntario, reflejo que lo podemos producir con pelliscos del vientre del paciente u otros estimulos sobre la zona hipogastrica (agua fria, una palmada) y la sensibilidad esta abolida.

Pero cuando vemos lesiones incompletas de la medula espinal, el paciente tiene

grados  variables  de  sensibilidad  del  llenado  vesical (sensibilidad  propioceptiva)  y  esto ayuda a que el paciente pueda tener grados variables de control voluntario de la miccion y  pueda  tambien  dominar  parcialmente  la  funcionalidad  del  piso  pelvico  (musculatura estriada del piso perineal).

El hecho de presentar hiperactividad del detrusor combinado con incoordinacion o discinergia     detruso-esfinteriana,     podria     ocasionar     una     vejiga     de     esfuerzo (trabeculaciones), con reflujo vesicoureteral y  posible dano renal, si el problema no es solucionado rapidamente.   El paciente presenta de manera caracteristica incontinencia de urgencia, con residuo urinarios altos (base para el diagnostico).

Todas  estas  caracteristicas,  en  relacion  si  la  lesion  medular  es  completa  o incompleta, han sido descritas por autores de todas las latitudes, e inclusive como en el caso  de  Yalla,  describia,  inclusive  tres  tipos  de  discinergia  que  ocurrian  en  pacientes con lesiones suprasacrales medulares.   Lo que ha demostrado ser importante, no es la clasificacion a priori de los posibles hallazgos, sino realizar un cuidadoso examen clinico y urodinamico, para obtener toda la informacion que a la postre nos servira para darles al caso clinico, el enfoque y tratamientos adecuados.

En  las  lesiones  infrasacras,  se  ocasiona  un  debil  reflejo  contractil  del  detrusor, causando  orinas  residuales  altas,  pero  por  fallo  de  bomba  vesical.   En  muy  contadas ocasiones vemos incoordinacion vesicoesfinteriana (discinergia).

En  las  lesiones  del  cono  medular,  vemos  arreflexia  del  musculo  detrusor  y  la


actividad del esfinter externo (rabdoesfinter), esta ausente o disminuida.

En lesiones incompletas de la medula espinal y en lesiones no traumaticas, vemos con  frecuencia  hiperactividad  vesical  (hiperreflexia),  con  comportamiento  sinergico  o coordinado del esfinter externo (rabdoesfinter).

En  un  excelente  trabajo  de  investigacion,  Weiss  y  col.  (1996)  investigaron  la

posibilidad de recuperacion funcional vesical, despues de un traumatismo medular, con base  en  la  investigacion  de  la  preservacion  del  tracto  espinotalamico  y  la  columa posterior   medular.      Demostraron   la   correlacion   que   hay   entre   la   prueba   de   la sensibilidad  perineal  (por  agujas)  y  la  prueba  de  la  sensacion  de  posicion  del  dedo gordo del pie, tienen valor predictivo positivo con la recuperacion neurogenica funcional vesical.   Cuando ambas pruebas son positivas, es muy dificil que el paciente recupere su   funcionalismo   vesical,   con   lo   cual   se   estarian   evitando   falsas   esperanzas   y expectativas de curacion o mejoria, que pudieran suscitarse con el caso.

 

 

7. Trastornos vasculares de la medula espinal

Observados en la angiopatia diabetica, en aneurismas disecantes de la aorta, en enfermedades  del  colageno,  en  posoperatorios  de  cirugias  de  la  columna  vertebral, como por ejemplo hernias discales.

De acuerdo  con la  magnitud  del infarto  medular,  se podria  producir,  en caso de ser minimo, una mielitis arterioesclerotica y en el caso de ser un compromiso vascular extenso, se denominaria sindrome de la arteria espinal anterior.

Podemos observar arreflexia del detrusor en casos de infarto extenso y podemos

observar hiperactividad del detrusor (hiperreflexia) con discinergia vesicoesfinteriana, en el caso de ser un infarto limitado, mielitis transversa por ejemplo.

En la espondilosis cervical, podemos tener compresion de la medula espinal por la

degeneracion de uno o mas discos cervicales, y el paciente puede presentar frecuencia urinaria,  urgencia  e  incon-tinencia  urinaria  de  urgencia  (triada  de  la  hiperactividad vesical), con una funcionalidad normal del componente esfinteriano, lo que significa que habra  coordinacion  vesicoesfinteriana  y  solo  en  muy  raros  casos  podremos  observar incoordinacion vesicoesfinteriana.

Dentro de los trastornos tipo vasculitis medular tenemos la enfermedad de Behcet, la  cual  en  ocasiones  tiene  repercusiones  en  el  ambito  miccional  del  paciente,  con patrones  cistometricos  cambiantes  que  van  de  la  arreflexia  a  la  hiperactividad  vesical (hiperreflexia) (Porru y col. 1996).

El  sindrome  o  enfermedad  de  Behcet  es  una  vasculitis  sistemica  de  causa desconocida  con  compromiso  mucocutaneo,  ocular  y  musculo-esqueletico.     Puede involucrar   tambien   el   sistema   nervioso   central   (SNC),   el   sistema   cardiovascular, gastrointestinal  y  respiratorio.   Se  ve  unicamente  en  Turquia,  Iran  y  Japon.   Tambien puede  ocasionar  disfuncion  vesical  por  compromiso  vesical  y  esfinteriano  tanto  de  la fase de llenamiento como de la fase de vaciamiento.

El hallazgo mas frecuente desde el punto de vista urodinamico es la hiperactividad vesical con discinergia vesicoesfinteriana.


Otra caracteristica es que el patrón urodinamico puede cambiar en el curso de la enfermedad, porque se han visto casos de arreflexia que han pasado a hiperactividad- hiperreflexia,  porque  la  enfermedad  puede  afectar  indistintamente  el  cerebro  como  la medula      espinal,      en      sitios      diferentes,      con      la      consiguiente      afectación neurológica/miccional.

En  un  interesante  trabajo  de  investigación,  Ando  y  col.  en  1990  publicaron  la casuistica de las repercusiones sobre la función vesical y uretral en 114 pacientes con "desórdenes lumbares" incluyendo, prolapso del disco intervertebral, estenosis del canal lumbar,   espon-dilolisis   lumbar,   espondilolisis   deformante   lumbar,   osificación   del ligamento amarillo de la medula espinal lumbar.

Llamativamente 20% de los pacientes, tenia vejiga neurogenica preoperatoria, en

9%  encontraron  detrusor  normal  y  esfinter  hiper-activo,  en  36%  encontraron  detrusor normal y  esfinter hipoactivo,  detrusor hiperactivo  en  23%  de los  casos.   Consiguieron tambien resultados  dudosos  o  equivocos  en 32% de los  pacientes  y  refirieron que los pacientes  que  presentaron  vejiga  neurogenica  (20%),  tenian  de  manera  concomitante anormalidades  en  los  reflejos  tendinosos  de  los  miembros  inferiores,  disminución  del reflejo bulbocavernoso, y disturbios sensitivos en el area perineal.

 

 

8. Neuropatias perlferlcas

Afectan  el  funcionamiento  de  la  vejiga  urinaria  y  las  podemos  encontrar  en enfermedades metabólicas como la diabetes mellitus (Koo y col. 1998), las deficiencias vitaminicas (vitaminas Bo B12), por alcoholismo, por quimioterapia con cisplatinum por ejemplo,  por  enfermedades  infecciosas  tipo  herpes  zoster,  herpes  simple,  neurosifilis, SIDA, neuropatia de Guillain-Barre, en daños ocasionados por la cirugia radical de tipo ginecológico  o  anorrectal.    Por  afectación  de  las  raices  nerviosas,  o  por  desórdenes degenerativos (Shy-Dager o neuropatia sensorial congenita).

Los hallazgos urodinamicos tanto en la cistometria, como en los estudios de flujo- presión son bastante variados de acuerdo con la patologia que las origina (Sakakibara y col. 1998).

Como la intención de este libro es resaltar los estados hiper-activos del detrusor,

mencionare  de  las   patologias   arriba  descritas,   en  que  porcentaje  tendremos  ese hallazgo urodinamico.

Vemos como en la diabetes mellitus, podremos observar hiper-actividad vesical en

un 30% a 55% de los casos, sobre todo en sus fases iniciales, y tendran afectación de la sensibilidad propioceptiva y vejigas de gran capacidad funcional en mas del 60% de los casos, en fases avanzadas.   Un 20% presentan presiones  miccionales reducidas y un  10%  al  15%  de  los  pacientes,  pueden  presentar  vejigas  o  detrusores  arreflexicos. Estos  hallazgos  son  contrarios  a  lo  que  la  mayoria  de  los  medicos  pudiera  creer  en relación con la cistopatia diabetica, sin embargo en un estudio muy interesante llevado a cabo por los  doctores  Kaplan y  Blaivas,  se concluy6 lo antes  mencionado,  donde la hiper-actividad  vesical  es  el  hallazgo  urodinamico  mas  frecuente  (Kaplan  y  Blaivas,

1995).


El  herpes  zoster,  puede  ocasionar  una  gran  variedad  de  sintomas  y  hallazgos urodinamicos.  Puede ocasionar arreflexia del detrusor, pero tambien podrian ocasionar estados  de  hiperactividad  vesical  con  episodios  de  incontinencia  urinaria,  urgencia  y frecuencia urinaria.

El herpes simple puede ocasionar compromiso de las raices o segmentos sacros, con  lo  cual  habria  un  reflejo  bulbocavernoso  ausente,  un  tono  anal  disminuido  y arreflexia del detrusor en la prueba cistometrica.

El   SIDA,   produce   paraparesia   espastica-ataxica,   que   ocasiona   incontinencia urinaria, por inflamación de las vainas de mielina, en estos estadios de la enfermedad, presentan toda la sintomatologia de la hiperactividad vesical, ya conocida por ustedes.

La compresión de las raices sacras por discopatia lumbar, ocasiona hiperreflexia vesical en etapas precoces y arreflexia del detrusor en etapas tardias.

Aproximadamente  el  25%  de  los  pacientes  afectados  de  polirradiculoneuritis  o

enfermedad de Guillain Barre, tienen disturbios miccionales como dificultad miccional y retención  urinaria  como  producto  de  la  discinergia  vesicoesfinteriana,  pero  tambien pueden  presentar  hiperactividad  vesical  con  episodios  de  incontinencia  de  urgencia, frecuencia urinaria, urgencia y nocturia (Sakakibara y col. 1997).

Ademas pueden presentar alteraciones de la sensibilidad propio y nociceptiva del llenado vesical, lo que nos indicaria afectación neurológica de la inervación periferica de las  vias  parasimpaticas  y  somaticas.  Todos  estos  hallazgos  son  comunes  en  las polineuropatias desmielinizantes inflamatorias.

En la neurosifilis nos conseguimos hiperactividad vesical en aproximadamente del

2% al 4% de los casos.

En  la  enfermedad  de  Lyme,  en  los  estadios  2  y  3,  donde  la  infección  se  hace diseminada   y   persistente,   y   caracterizada  por   ser  una   enfermedad   multiorganica, producida   por   la   Borrelia   burgdorferi   ocasionara   en   mas   del   75%   de   los   casos hiperactividad vesical, con todo su cortejo sintomatico.

 

 

9. Mielopatias asociadas a virus humano T-linfotropico tipo 1 (HAM)

Ocasionan  disfunción  miccional  consistente  en  frecuencia  urinaria,  incontinencia de urgencia y en ocasiones dificultad para orinar (Komine y col. 1998).

La  sensación  de  llenado  vesical  junto  con  la  sensación  inminente  de  orinar permanece   intacta o ligeramente disminuida. En la mayoria de los pacientes se puede presentar hiperactividad vesical con contracciones no inhibidas,  pero llama la atención los  altos  volumenes  de  orina residual,  por lo cual  entre los  hallazgos  se  encontr6   en mas de 90% discinergia vesicoesfinteriana parcial o completa, y por ello la dificultad de orinar, mencionada al comienzo.

En conclusión, para ordenar lo ya mencionado, hay un sin numero de causas que originan   mielitis   transversa,   las   cuales   usualmente   originan   una  hipoactividad   del detrusor  con  dificultad  marcada  de  la  función  de  vaciamiento  urinario,  por  lo  cual estariamos   fuera   de   nuestro   objetivo   de   demostrar   patologias   neurológicas   con afectación  de  la  fase  de  almacenamiento,  pero  es  digno  de  mención,  como  parte  de


nuestro aprendizaje.   Entre las causas  mas frecuentes de mielitis transversa tenemos: etiologias  bacterianas,  secuelas  de  meningitis  bacteriana,  tuberculosis  espinal,  sifilis. De  causas  virales  tenemos:  la  parotiditis,  virus  de  Epstein-Barr,  la  rabia,  el  virus coxakie, la poliomielitis y el herpes zoster.  De causas nutricionales, las ya mencionadas deficiencias  de  vitamina  B12  y  vitamina  B6.   Causas  ideopaticas  y  causas  parasitarias difungicas, asi como de causas vasculares e inflamataorias.

Es util que siempre las tengamos en mente, cuando analicemos un paciente con afectación de su esfera miccional y tengamos diagnósticos neurológicos presentes.

 

 


Capitulo X

Trastornos urológicos en la población geriatrica

 

 

En  edades  ancianas,  es  muy  comun  la  hiperactividad  vesical,  por  cuanto  hay factores   organicos,   funcionales,   y   circunstanciales   de   cada   paciente,   que   asi   la condicionan (Chan y Ouslander 1990).

Cambios relacionados con la vejez afectan el sistema urinario inferior, el sistema nervioso central (SNC) y los mecanismos de control de la miccion.

El aumento del contenido de colageno en la microestructura del musculo detrusor,

el deterioro de la presion de cierre uretral,  sobre  todo en las  mujeres  y  cambios  en  el patron diurno de la excrecion urinaria, son algunos de esos cambios (Ouslander 1996).

La  causa  de  la  hiperactividad  vesical  en  la  vejez,  es  multifactorial  (Farrar  1984, Resnick 1996).

Los  trastornos  emocionales  del  paciente  senil,  en  muchas  ocasiones  repercuten en la modificacion y trastorno de la esfera urinaria, tanto en la fase de almacenamiento, como en la fase de vaciamiento urinario.

En la poblacion geriatrica femenina, se suman factores "vesicales", que afectan la

fase  de  almacenamiento  vesical,  a  los  factores  que  afectan  la  continencia  urinaria, desde  el  punto  de  vista  uretral,  por  cuanto  las  pacientes  femeninas  tendran  signos fisicos de deprivacion estrogenica, que como sabemos afectan la vagina, la uretra y el trigono   vesical,    con   la   correspondiente   "resequedad"   de   dichos    tejidos    y    la predisposicion a bacteriurias que pueden producir infecciones urinarias y posiblemente incontinencia de urgencia de tipo sensorial y por otro lado, esos factores pueden afectar directamente  el  "efecto  sellante"  de  la  mucosa  y  submucosa  uretral,  dando  como resultado final incontinencia urinaria en diversos grados (O'Donnell 1998).

En el hombre anciano, los factores vesicales arriba mencionados, se suman a los cambios  microestructurales  en  el  musculo  detrusor,  producidos  por  una  salida  vesical obstructiva,  sumado  a  cambios  microestructurales  que  produce  la  vejez  por  si  misma (vejiga senil), llevando a una disminucion de la distensibilidad-compliance con urgencia, frecuencia, incontinencia de urgencia y nocturia (Fultz y Herzog 1996).

Es muy importante diferenciar entre el envejecimiento normal de cualquier organo o  estructura  del  organismo  por  el  paso  de  los  años,  que  ocurre  en  todos  los  seres humanos,  y  los  cambios  clinicos  que  se  ven  por  la  sumatoria  del  envejecimiento  en conjunto con multiples enfermedades.

A pesar de que los sabios latinos de la antiguedad, consideraban que "la vejez por si misma era una enfermedad", nosotros desde un punto de vista didactico y fielmente cientifico, no podemos inferir, que los cambios organicos que ocurren, por la presencia de enfermedades de mayor incidencia en la vejez, sean responsabilidad de la vejez por si misma (Geirson y col. 1993).

Mencionare  los  cambios  que  se  observan  en  las  vias  urinarias  con  la  vejez, haciendo  mencion  de  factores  que  pueden  ocurrir   en  las  mujeres  y  en  los  hombres (Elbadawi y col. 1993).


 

Cambios estructurales urologicos con la vejez

 

1.   Aumento  del  contenido  de  colageno  en  la  microestructura  del  musculo detrusor

El colageno del musculo detrusor determina la elasticidad vesical, que permite a

su vez,  que las  paredes vesicales,  una vez alteradas  por la accion del esfuerzo, vuelvan a su estado anterior de normalidad, cuando ese esfuerzo desaparece. Para una funcion vesical normal (distensibilidad y contracti-lidad), se necesita un tejido  colageno  en  cantidad  y  localizacion  adecuada,  y  que  este  dispuesto  en forma de malla.  La alteracion de estos factores, produce una incidencia mayor de estados de hiperactividad vesical.

 

 

2.   Disminucion del contenido de elastina del musculo detrusor.

La cantidad de elastina que tiene el compartimiento intersticial, repercute sobre la distensibilidad   y   contractilidad   del   musculo   detrusor,   por   lo   cual,   ocasiona sintomas de hiperactividad vesical.

 

 

3.   Celulas  musculares  unidas  a  traves  de  protrusiones  o  saliencias  de  las uniones intercelulares, semejando una malla.

 

 

4.   Reduccion o perdida de las uniones celulares intermedias.

 

 

5.   Aumento de los espacios intercelulares musculares

Los   cambios   estructurales   3,   4   y   5,   ocasionan   hiperactividad   vesical,   con contracciones  no  inhibidas  y  el  cortejo  sintomatico  habitual  de  urgencia  urinaria, frecuencia urinaria, incontinencia de urgencia y nocturia.

 

 

6.   Degeneracion  significativa  de  las  celulas  musculares,  con  un  sarcoplasma alterado, con miofilamentos y nucleos alterados, con organelas desorganizadas y un sarcolema ramificado y engrosado.

 

 

7.   Degeneracion   de   los   nervios   intrinsecos   del   musculo   detrusor,   con alteraciones  de  las  terminaciones  axonales,  con  disminucion  importante  de  las vesiculas    simpaticas.    Las    mitocondrias    y    axolemas    presentan    lesiones estructurales  y  el  axolema  puede  estar  fragmentado  con  perdida  de  las  uniones neuroefectoras.

 

 

8.   Celulas   musculares   hipertroficas,   en   caso   de   presentar   salida   vesical obstructiva (SVO).

 

 

9.   Presion  maxima  de  cierre  uretral  disminuida,  lo  que  lleva  a  episodios  de incontinencia urinaria.


10.   Cambios en el patron diurno y nocturno de la excrecion urinaria.

 

 

11.   Disminucion  de  los  estrogenos  circulantes  en  la  mujer,  lo  que  produce cambios estructuraes en mucosa e intersticio vesical, en la uretra,  meato uretral, asi  como  en  la  musculatura  pubo-coccigea,  con  la  consecuente  posibilidad  de resequedad  y   resquebrajamiento  ocasionando  infecciones   urinarias,   debilidad musculofascial,   que   llevan   a   estados   de   hiperactividad   vesical   de   etiologia inflamatoria.  Los efectos especificos que la deprivacion estrogenica tiene sobre el sistema  urinario  inferior  son:   atrofia  del  epitelio  uretral,  descenso  o  prolapso  de organos pelvianos, disminucion de los niveles de glucogeno en el epitelio vaginal, lo  que  resulta  en  una  cantidad  reducida  de  nutrientes  para  el  metabolismo  del acido lactico en los lactobacilos normales de la vagina y un aumento del pH de las secreciones  vaginales,  y  ocasiona  tambien  menor  resistencia  a  las  adherencias bacte-rianas, que se producen sobre la mucosa vaginal.  Con la administracion de estrogenos  (terapia  sustitutiva  hormonal)  y  de  parasimpaticoliticos  o  farmacos musculotropicos     especiales     (oxibutinina)     o     antimuscarinicos     novedosos (tolterodina),  asi  como  de  esquemas  de  quimioprofilaxis  supresiva  prolongada  a baja dosis, la paciente mejorara notablemente.

 

 

12.   Concentracion  alterada  de  neurotransmisores  del  SNC,  lo  cual  lleva  a  una alteracion  de  la  conduccion  nerviosa,  con  repercusiones  en  la  esfera  miccional, que a su vez lleva al paciente a presentar una sintomatologia urinaria molesta.

 

 

13.   Alteraciones  del  trofismo  vesical,  producto  del  envejecimiento  humano,  asi como las alteraciones del sistema inmune (se torna menos efectivo), aumentan las posibilidades    de    presentar    infecciones    urinarias    sintomaticas    (bacteriuria asintomatica).

 

 

Todos  los  cambios  que  se  producen  a  nivel  del  musculo  liso  del  detrusor,  en  la poblacion  geriatrica  a  nivel  celular,  reciben  genericamente  el  nombre  de  "Patron  de desunion ".

Resumiendo, podriamos decir que hay un deterioro o disminucion de la capacidad vesical,  de  la  contractilidad  vesical  (contracciones  mas  debiles),  aun  en  presencia  de contracciones  no inhibidas,  como  parte de su hiperactividad vesical y  de la capacidad que  podria tener el  paciente  para posponer la  miccion,  ademas  la  presion  maxima de cierre uretral, como se dijo antes estara disminuida y tambien la longitud uretral estara reducida.

 

 

Factores que contribuyen a la presencia de sintomas urinarios en la ancianidad

Las circunstancias o factores, que tiene la poblacion geriatrica que contribuyen a que se presenten signos y sintomas urinarios, que deterioran la calidad de vida de dicha poblacion son:


1.   Factor   de  deterioro  en  las  actividades  cognoscitivas  generales  y  en  la sensibilidad propioceptiva y nociceptiva del musculo detrusor, que sin duda alguna  entorpecen  la  interpretacion  de  los  sintomas  urinarios.     Esto  lleva  a trastornos  en la esfera  miccional, tanto en su fase de almacenamiento, como en su fase de vaciamiento.

 

 

2.   La  poblacion  geriatrica  tiene  sin  duda  alguna  un  aumento  en  la  incidencia  de trastornos  del  aparato  locomotor  y  tambien  una  mayor  incidencia  en  el sedentarismo e inmovilidad que a su vez llevan a un aumento en la aparicion de fracturas oseas (cadera, entre otras), pero tambien se ve con inusitada frecuencia las fracturas espontaneas de vertebras toracolumbares, ayudadas  muchas veces por el sobrepeso del paciente y en el caso de las mujeres, por una osteoporosis posmenopausica, que no ha recibido la atencion y el tratamiento adecuados.

 

 

Tambien  veremos  con  mayor  insistencia  las  enfermedades  vasculares perifericas, bien sea de etiologia arterial o venosas o mixtas, y no debemos dejar de  mencionar  una  de las  enfermedades  mas  terribles,  en lo  que respecta  a sus consecuencias en la coordinacion locomotora del paciente, y se trata por supuesto de la enfermedad de Parkinson.

Todas  ellas  llevan  a  que  el  paciente  presente  muchas  dificultades  en realizar funciones, inicialmente sencillas, como el simple desplazamiento al cuarto de baño para realizar sus necesidades, lo que lleva en consecuencia a episodios de  constipacion  fecal,   impactacion  fecal  y   esto  esta  unido  al  desarrollo  de incontinencia  urinaria  e  infecciones  urinarias,  esta  ultima,  con  consecuencias negativas,  tanto  para  el  sistema  urinario  inferior,  como  para  el  sistema  urinario

superior.

Todo  esto  esta  muchas  veces  potenciado,  por  el  hecho  de  que  el paciente  senil,  no  le  gusta  tomar  cantidades  saludables  de  agua,  por  multiples razones, entre las cuales consideran que tomar agua, deteriorara aun mas, su ya deteriorada calidad  de vida  urinaria,  debido  a  que se  incrementara  la frecuencia urinaria, la urgencia, la nocturia y la posible incontinencia de urgencia.

 

 

3.   Una  de  las  enfermedades  que  mas  se  ha  profundizado  en  su  comprension  y tratamiento, en estos ultimos tiempos, ha sido la demencia senil, la cual sin duda alguna, ha estado siempre  infrareportada e infradiagnosticada.

La causa primordial que origina episodios  de incontinencia urinaria, en pacientes con demencia senil, es la hiperactividad vesical.

La demencia senil se define, como un estado de debilitamiento fundamentalmente intelectual  profundo,  global  y  progresivo,  de  evolucion  cronica,  que  afecta  las funciones   elementales   de   la   mente,   las   conductas   sociales,   el   juicio   y   el razonamiento, acompañado muchas veces, de un deterioro fisico, que llevara en lo referente al sistema urinario y mas especificamente en la esfera miccional, a un


descontrol del acto miccional por afectacion de su razonamiento inductivo, lo que sin  duda,  lleva  a  episodios  de  incontinencia  urinaria  y  en  general  a  una  variada signologia y sintomatologia referida a las vias urinarias bajas.

 

 

4.   En  edades  seniles,  se  ve  con  cierta  frecuencia  la  aparicion  de  enfermedades malignas  de  la  mucosa  vesical,  como  el  cancer  de  celulas  transicionales  de vejiga y el cancer in situ de vejiga y tambien el cancer de prostata en casos muy esporadicos.

Ambos  pueden  ocasionar  estados  de  hiperactividad  vesical,  que  muchas  veces son   confundidos   con   episodios   de   infecciones   urinarias   y   son   dejados   sin diagnostico, con las graves consecuencias que ello conlleva.

En el capitulo anterior referente a enfermedades que alteran el funcionamiento de la vejiga urinaria, pudimos ver muchas patologias que tienen su mayor incidencia en la tercera edad.

 

 

5.   Uno de los factores que se asocian con el desarrollo de sintomas urinarios en las poblaciones  geriatricas  es  el  uso  de  farmacos  como  diureticos,  en  el  caso  de enfermedades    cardiovasculares,    o    el    uso    de   hipnoticos,    psicotropicos    y ansioliticos,  que  pudieran  afectar  tanto el volumen  urinario como los  estados  de "alerta"  tanto  en  la  vigilia,  como  durante  el  sueño  y  con  ello  afectar,  ciertos aspectos del comportamiento urinario del paciente.

Debemos   tambien   estar   muy   pendientes   de   aquellos   pacientes   seniles   con tratamientos  para  cuadros  asmaticos,  porque  practicamente  todos  los  farmacos utilizados    para   el    mejoramiento   de   su   funcion   pulmonar,    pueden   tener repercusiones  importantes  en la esfera  miccional  y  pasar desapercibidos  para el medico tratante.

Los  medicamentos  que  pueden  alterar  el  funcionamiento  del  sistema  urinario inferior      son:      medicamentos      psicotropicos      (hipnoticos,      tranquilizantes, antidepresivos),     diureticos,     drogas     antihipertensivas     (beta     bloqueantes adrenergicos,   alfa   bloquean-tes   adrenergicos),   parasimpaticoliticos,   farmacos como narcoticos, antihistaminicos, levodopa, fenitoina, antiasmaticos.

 

 

6.   Por ultimo, no debemos dejar pasar, los antecedentes medicos, que haya podido tener   el   paciente,   porque   pudieran   tener   intima   relacion,   con   la   molesta sintomatologia  urinaria,  que  nos  este  describiendo.  Por  ejemplo,  antecedentes quirurgicos  pelvicos,  tanto  de  la  esfera  urinaria  propiamente  dicha,  como  de  la esfera ginecologica y de la esfera intestinal.

 

 

 

Es  importante  que  preguntemos  sobre  antecedentes  de  cirugia  neurologica  o traumatologica, sobre su columna vertebral o en otras partes del cuerpo, porque pueden ocasionar sintomatologia y disfuncion miccional.


El  haber  o  no  tenido  enfermedades  tumorales  en  riñon,  vejiga  y  uretra,  puede tener  relacion  con  sintomas  actuales  de  hiperactividad  vesical,  tanto  por  tratamientos quirurgicos recibidos como por tratamientos tipo radioterapia o quimioterapia.

Antecedentes  de  quimioterapia,  intravesical  o  endovenosa,  pudieran  afectar  la fase de almacenamiento vesical, por afectacion de la compliance-distensibilidad vesical, con  la  consecuente  aparicion  de  incontinencia  de  urgencia,  frecuencia,  urgencia  y nocturia.

Tratamientos   de  radioterapia,   en   areas   pelvicas,   pudiera   ocasionar   a  corto, mediano  y  largo  plazo,  alteraciones  estructurales  vesicales  que  estan  ligados  con  los aspectos  de  distensibilidad  y  elasticidad  de  la  vejiga,  ocasionando  en  consecuencia, sintomas urinarios compatibles con hiperactividad vesical, en mas del 50% de los casos (Parkin, 1988).

En general, todas aquellas entidades nosologicas, que de alguna manera pueden alterar las fases de la miccion, tanto de almacenamiento como de vaciamiento, desde el punto  de  vista  dinamico  o  desde  el  punto  de  vista  organico,  deben  ser  investigadas. Muchas veces, el descubrir estos detalles, hace mas facil el diagnostico y el tratamiento de estos pacientes, logrando al final una mejor calidad de vida para ellos.

La  intencion  de  este  libro,  no  es  ahondar  en  cada  uno  de  los  sintomas  que componen   el   diagnostico   de   las   vejigas   hiperactivas   en   edades   seniles,   pero   la incontinencia urinaria que se ve en las poblaciones geriatricas, es de tal magnitud, que trataremos de dar un bosquejo breve interesante y util al respecto.

El 15% al 30% de la poblacion geriatrica, que vive en sus casas, asi como el 33% de los que viven en casas de cuidado agudo y el 50% de los que viven en ancianatos, presentan incontinencia urinaria.

Los  cambios  relacionados  con  la  edad,  unidos  a  los  cambios  relacionados  con

determinadas patologias, y las posibles interaccciones medicamentosas, hacen posible la  aparicion  de  sintomas  de  hiper-actividad  vesical,  entre  los  cuales  la  incontinencia urinaria, es el mas frecuente y el que mas capta la atencion y en cierto modo el que mas afecta la calidad de vida del paciente.

La  hiperactividad  vesical  en  la  ancianidad,  esta  asociada  con  un  aumento  de  la actividad  espontanea  de  la  fibra  muscular  vesical  y  con  cambios  especificos  a  nivel celular,   ya   ampliamente   descritos   en   este   capitulo,   conocidos   como   "patron   de desunion"  donde  vemos  apertura  de  los  espacios  intercelulares,  reemplazo  de  las uniones  celulares  musculares  normales,  por  uniones  "protruyentes",  y  acercamientos patologicos  de los  linderos  que conectan las  celulas  entre  si,  formando  mallas  que de cierto modo, aumentan la propagacion de la actividad de la celula muscular lisa y esto se  convierte,  dicho  de  un  modo  mas  sencillo,  en  un  amplificador  de  la  actividad mioelectrica  de  la  celula,  resultando  al  final  en  la  aparicion  de  contracciones   no inhibidas  o  involuntarias  del  musculo  detrusor,  que  se  denomina  en  la  actualidad hiperactividad vesical.

Por otro lado Chai y col. (1998), presentaron un trabajo de investigacion bastante interesante  donde  demostraron  que  el  factor  de  crecimiento  neurologico  (NGF),  esta


disminuido  en  la  vejez  y  esto  disminuye  a  su  vez  el  tamaño  tanto  de  las  neuronas aferentes  como  eferentes.   Esto  ocasiona  una  neuroplasticidad  como  producto  de  las interacciones neurotroficas alteradas por la edad, afectando la sensibilidad vesical, que ocasiona vaciamiento vesical con volumenes urinarios reducidos.

 

 

La   hiperactividad   vesical   en   la   ancianidad,   tiene   2   formas   clinicas   de manifestarse:   una   en   que   la   función   contractil   del   musculo   detrusor   esta preservada   y   otra   en   que   la   función   contractil   del   musculo   detrusor   esta disminuida, esta ultima ya nombrada en este libro, se denomina con el acrónimo de  OHIC  o  mejor  aun  HVCO,  en  español,  es  decir  hiperactividad  vesical  con contractilidad disminuida, que es la forma mas comun vista en la vejez.

 

 

La forma clinica de hiperactividad vesical con contractilidad disminuida, representa un reto diaqnostico y terapeutico para el uroloqo, porque tiende a confundirse con otras causas  de  incontinencia  urinaria,  asi  como  con  otros  diaqnosticos  uroloqicos,  porque estos  pacientes  pueden  presentar,  por  su  debilidad  muscular  vesical,  retenciones urinarias  con  residuos  urinarios  altos  y  por  supuesto  con  los  secundarismos  que  esto arrastra,   infecciones   urinarias   entre   otros;   aparte   que   podria   ser   confundido   con incontinencia urinaria de esfuerzo o con inestabilidad uretral (Goto y col. 1992).

No  pocos  casos  son  etiquetados  como  obstruccion  de  salida  vesical  por  cuanto presentan sintomas de hiperactividad vesical, con altos residuos urinarios y con chorro urinario  debil,  y  con  siqnos  clinicos  endoscopicos  que  apuntan  hacia  una  vejiqa  de esfuerzo, al verse trabeculaciones persistentes al llenado vesical.

Por  tanto  para  un  diaqnostico,  lo  mas  acertado  posible,  es  indispensable  una detallada historia medica, extrayendole a esta parte del diaqnostico, la mayor cantidad de informacion posible.

Debemos  tambien  pedirle  al  paciente,  que  nos  entreque  un  diario  miccional realizado  en  7  a  14  dias,  en  relacion  con  su  comportamiento  miccional  y  a  las circunstancias que rodearon los sintomas y siqnos urinarios presentados.

Todo esto lo debemos  unir a un preciso y detallado examen urodinamico, donde

podamos reproducir los sintomas y siqnos molestos del paciente y por ende dar con el diaqnostico,   que   en   ocasiones   es   sumamente   dificil,   sobre   todo   en   poblaciones ancianas.

Hablabamos  de  reto  terapeutico,  por  cuanto  al  presentarse  la  combinacion  de

hiperactividad  vesical  con  contractilidad  deteriorada  del  mismo,  resulta  dificil  para  el uroloqo, tratar el caso con farmacos parasimpaticoliticos, porque podemos aumentar la cantidad de residuo urinario y aumentar las posibilidades de retencion aquda de orina, al afectar aun mas la ya escasa capacidad contractil del musculo detrusor.

Se sabe por otro lado, que las causas mas frecuentes de fracaso del tratamiento, bien  sea  medico  o  medico-quirurqico,  en  una  persona  senil  son,  la  presencia  de  una vejiqa neuroqenica severa, la presencia de una vejiqa mioqenica severa y al hecho de que  son  pacientes  que  han  sido  dejados  sin  tratamiento  por  mucho  tiempo,  haciendo


muy dificil su rehabilitación urológica miccional (Elbadawi 1997).

Ademas son pacientes que pueden tener demencia senil, con todas sus formas de presentación  y  presentar  impedimentos  fisicos  que  dificultan  la  realización  de  tareas sencillas,  que  ayudarian  en  mucho  al  exito  de  cualquier  tipo  de  tratamiento  que  le demos al paciente por su hiperactividad vesical.

Por todo lo  mencionado,  un paciente senil con hiperactividad vesical,  representa uno de los mayores retos terapeuticos, en la practica diaria de todo urólogo.

 

 


Capitulo XI

Vejiga hiperactiva en la infancia

 

 

Para  los  medicos  especialistas  que  tienen  que  tratar  poblacion  infantil,  es  muy frecuente la consulta medica de ninos con disturbios miccionales.

En  una  minoria  de  ellos,  es  facil  hacer  el  diagnostico  porque  presentan  causas obvias,   por   ejemplo   mielomeningocele  u   otras   entidades   nosologicas   de  caracter congenito, que causan el disturbio miccional, usualmente del tipo de vejiga hiperactiva, con su sinto-matologia ya conocida, o bien vejiga hipoactiva con o sin coordinacion con el aparato esfinteriano proximal y/o distal, conocido como discinergia vesicoesfinteriana (Hald 1982).

Pero  la  mayoria  de  ninos  con  disturbios  miccionales,  presentan  caracteristicas que hacen dificil establecer un diagnostico, de una manera precisa.

Son  muchas  las  ocasiones  en  que  nos  encontraremos  con  estudios  urologicos completamente  normales,  a  pesar  de  que  el  nino  presenta  un  disturbio  miccional evidente (Rickwood y Lee 1984).

Sera la suspicacia del medico tratante, que lo haga llegar a la conclusion, del tipo

de trastorno que esta padeciendo el paciente, tanto si se trata de un trastorno organico, como si se trata de un trastorno funcional-dinamico.

Es sabido que la vejiga de los ninos presenta hiperactividad vesical (inestabilidad vesical),   hasta   tanto   su   sistema   nervioso   central   (SNC)   alcance   su   maduracion completa.

De los sintomas caracteristicos de la hiperactividad vesical, la incontinencia es la que mas capta la atencion en la poblacion pediatrica.   Despues de la edad de 5 anos, es  raro  ver  incontinencia  urinaria,  llamada  diurna  o  nocturna,  de  acuerdo  al  momento del  dia  en  la  cual  ocurre.    De  ocurrir  la  incontinencia  urinaria,  muchas  veces,  deter- minada por un estado de hiperactividad vesical, tendremos un 10% a la edad de 5 anos, un 5% a la edad de 10 anos y un 1% a la edad de 18 anos.

Por otro lado, es indispensable que conozcamos  las causas  que puedan llevar a un   nino   a   presentar   incontinencia   urinaria,   bien   sea   organicas,   psicologicas   o neurologicas, porque al descartarlas, podremos llegar a un diagnostico mas preciso que nos lleva a su vez a un tratamiento mas eficaz.

Debemos descartar la presencia de obstruccion urinaria infra-vesical en el varon, como  son  las  valvas  de  uretra  posterior,  trastornos  del  funcionalismo  intestinal,  por hipoperistaltismo,   que   lleven   a   trastornos   defecatorios   que   nos   conduzcan   a   la presencia de consti-pacion y secundariamente a la presencia de incontinencia urinaria. Trastornos vaginales como la fusion de labios, que es facilmente tratable, la presencia de vaginitis o una anormalidad denominada "miccion vaginal", que es la perdida urinaria que se produce despues  de haber orinado,  motivado al hecho de que en la vagina se deposita una cantidad considerable de orina,  debido al aumento del tono  muscular  de los  músculos  del  piso  pelvico  muscular,  por  tener  que  adaptarse  a  tazas  de  bano  o retretes muy grandes para su edad.


Debemos descartar causas neurológicas de incontinencia urinaria, sobre todo si el paciente presenta encopresis, o disuria, o micciones dolorosas, o episodios de retención aguda  o  crónica  de  orina,  o  la  presencia  de  hematuria  persistente  o  de  infecciones urinarias  complicadas  (disrafismo  espinal,  sindrome  de  la  medula  anclada  (tethered cord),   procesos   neoproliferativos   oncológicos   de   la   medula   espinal,   antecedentes quirurgicos  del  area  pelviana,  mielitis  transversa  de  etiologias  diversas,  lesiones  o traumatismos sobre la medula espinal).

Es fundamental descartar la presencia de ureteres ectópicos, de epispadias, o a la presencia  de  diabetes   mellitus,   diabetes   insipida,   de  anemia  drepanocitica,   o  de estados poliuricos no precisados.

 

 

Enuresis o incontinencia urinaria nocturna

Se define como "un evento miccional normal, pero en un lugar y en un momento socialmente inaceptable" (Shortliffe-Stanford University).

La incontinencia urinaria nocturna o enuresis nocturna, es mas comun en varones que   en   hembras,   su   etiologia   es   multifactorial.     Lentitud   en   el   desarrollo   fisico, incremento  en  la  producción  de  orina  por  la  noche,  falta  de  habilidad  en reconocer la plenitud vesical, una vez dormido el nino, y cuadros de ansiedad, pudieran ser los moti- vadores  de  dicha  incontinencia  nocturna,  aparte  del  factor  hereditario,  retardo  en  la maduración de los controles vesicales, en ocasiones desórdenes psicológicos, estados de  irritación  o  infección  urinaria,  anomalias  organicas  o  anatómicas    podrian  ser  la causa de la enuresis (Hjalmas 1998).

La   enuresis   nocturna  primaria   es   un  sintoma   con   multiples   etiologias.     Se mencionan  varias  anormalidades  fisiológicas  en  estos  pacientes,  como  la  perdida  de reconocer  la  sensación  de  vejiga  llena,  o  la  falta  de  percepción  de  una  contracción vesical, la poliuria nocturna, y la capacidad funcional vesical disminuida.

Por otro lado se mencionan factores geneticos presentes en familias que han sido estudiadas  al respecto y  donde se han  demostrado anormalidades  cromosómicas  que testifican la responsabilidad genetica de las enuresis primarias nocturnas.

Cuando el nino tiene entre 5 y  10 anos, factores  como periodos  prolongados  de

sueno,   profundidad  del   mismo,   visto  tambien   en  otros   integrantes   de  su  familia, capacidad vesical reducida (organica y funcional), y un desarrollo parcial de las alarmas corporales, que tenemos todos lo seres humanos, entre las que se cuentan, las que nos dan  indicios  de  plenitud  vesical,  tanto  en  la  vigilia  como  en  el  sueno,  se  mencionan entre los factores que condicionan una enuresis nocturna.

En  ocasiones  hay  una  falta  de  secreción  de  la  hormona  antidiuretica  de  noche, que  disminuye  fisiológicamente  la  producción  de  orina  durante  la  noche,  y  por  tanto tendremos  una  vejiga  sobre-distendida,  que  si  lo  unimos  a  la  falta  de  sensibilidad  de plenitud vesical, hara que ocurran los episodios de incontinencia urinaria.

Sabemos  tambien  que  un  clima  de  ansiedad  bien  sea  en  el  entorno  familiar  (el mas  frecuente),  o  en  el  entorno  escolar-social,  que  puede  tener  el  nino,  antes  de adquirir un control vesical completo, o bien despues de haberlo adquirido, puede llevar


al nino a presentar episodios de incontinencia.

Los  episodios  de  incontinencia  urinaria,  bien  sea  de  dia  o  de  noche,  pueden aumentar por si mismos el clima de ansiedad que vive el paciente y sus familiares y ser uno de los factores etiologicos mas importantes.

En   relacion   con   el   factor   hereditario   o   genetico,   una   investigacion   danesa

realizada  el  ano  1995,  mencionaba  un  sitio  en  el  cromosoma  13  responsable  de  la enuresis nocturna.